Élite

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Naruto

¿En qué estado la encontraría?

No paraba de pensar mientras atravesaba el desierto, esta vez con menos equipo y armas con él, la angustia de haberla dejado abandonada le carcomía las entrañas y hacia que acelerará cada vez más el paso por la desérticas y calurosas tierras.

Él le había dicho con claridad que era el miembro menos valioso del equipo y, en aquella misión, se había dado cuenta que Sakura eres imprescindible tanto para el equipo como para él. ¿Cuántos kilómetros quedaban para llegar a las ruinas?, se detuvo e intentó calcular cuanto habia avanzado, aún estaba bastante lejos.

El punto de encuentro con el helicóptero había estado más lejos de los que había pensado, aunque sé sentía con un peso menos encima saber que sus hombres estaban a salvo y rumbo a recibir atención médica especializada. Entretanto él no se iría hasta encontrar a Sakura.

Pero con el pasar de los minutos, los segundos, aumentaban su desesperación. Cualquier minuto podía significar estar mas cerca y al mismo tiempo más tarde. Se concentró y siguió corriendo, sentia un dolor agónico en los pulmones pero no pensaba parar. A lo lejos escucho el rugido de un motor, se detuvo un momento y se echó al suelo, para evitar que lo vieran.

Bien podía ser el enemigo buscandolos y dado que la mañana comenzaba a elevarse, ya no tenía la ventaja de la noche para ocultarse. El sonido se fue acercando cada vez más, sonaba como una camioneta 4x4, apunto en dirección a al ruido, esperando el momento de tenerlo en mira para disparar si fuese necesario.

Tenía tanto odio y angustia dentro que la idea de acabar con más de esos cabrones satisfacía la sed de venganza que cargaba consigo. Para su suerte o quizás no tanto, se trataba de un vehículo con la insignias del ejército de Estados Unidos, guardo su arma y se levantó del suelo, pronto el vehículo se aproximó hasta donde estaba él.

—No soy enemigo —hablo en voz alta cuando vio que los pasajeros del vehículo le apuntaban con sus armas al pararse a solo unos metros de donde estaba él— Voy a soltar el arma y mostraré mis credenciales, vale?

Ninguno de los soldados respondió, así que con cuidado se descolgó del hombro el cañón que cargaba y lo tiro al suelo, cerca del vehículo militar, luego muy despacio pero sin dudar saco del bolsillo de su pantalón la cartera que portaba sus credenciales; donde se le acreditaba como agente de campo para una organización del gobierno de los Estados Unidos que operaba en secreto. Mostró el sello con su foto, más abajo también tenía la identificación que le acreditaba como soldado del ejército inactivo.

Los soldados al ver las acreditaciones bajaron las armas y salieron del vehículo, ahora con una actitud más relajada dado que ante ellos estaba un ex compañero del ejército.

—¿Que hace en medio del desierto, no sabe que aquí es un blanco fácil? —le hablo un muchacho de más o menos su altura, con el cabello castaño y su uniforme militar.

Naruto al mirar sus insignias vio que era un sargento, volvió la vista hasta el y respondió.

—La misión de mi equipo ha culminado, pero uno de mis miembros se ha quedado atrás y he vuelto para recuperarlo.

—¿Recuperarlo, ha habido un secuestro?

—Un accidente, ha sido una explosión en una ruinas.

—¿Se ha comunicado con ese miembro para saber su estado? —le hablo esta vez otro joven soldado, este tenía lentes.

—Hemos perdido la comunicación...

—¿No ha considerado la posibilidad entonces de que su miembro este ya muerto? —de nuevo volvió a hablarle el sargento, esta vez con más dureza, quizás por qué consideraba que arriesgarse así por un cadaver era una estupidez.

—Yo no dejo a ningún miembro atrás, muerto o vivo volveré por él —respondio el también de manera dura y feroz, haciendo callar al sargento.

Hubo un silencio incómodo en el ambiente, pero Naruto no pensaba dejar amedentrar, después de todo el ya había estado en el lugar de ellos. Una mirada fría bastó para que el sargento y sus soldado dejarán de preguntar.

—Lo ayudaremos —dijo simplemente el sargento— si hubo un desprendimiento de estructura como nos comentó necesitará más manos.

Naruto asintió, no pensaba rechazar la oferta si eso lo ayudaba a llegar más rápido hasta Sakura. Tomo su arma del suelo y se dirigió junto con los soldados hasta el vehículo, indicándoles las coordenadas de la ruinas.

—Desde aquí serán cinco minutos —le comento el chico de castaños cabellos.

—Se lo agradezco..

—Konohamaru.

—Un gusto conocerte Konohamaru.

—Lo mismo digo Naruto.

Continuará.
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Bueno dado que el corona virus nos tiene en casa a todo el mundo tendré que actualizar más seguido😅 aunque en este caso tendrán que ser capítulos cortos ya que será de forma más seguida (eso espero..)

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