MAKENA. Terminada.

Capitulo 55

P.O.V Axel

Golpeamos la puerta principal, estaba un poco sucia y solo quedaban algunas pegatinas viejas allí.

Observamos la cámara principal, sabíamos que estaba encendida y que había alguien en el lugar manejándola. Sentimos un ruido, y la puerta se abrió. Sonreí, hacia mucho que no lo hacia. Subimos la escalera principal y nos dirigimos a donde se encontraba la antigua oficina de Steven, ahora era solo un cuarto obscuro con posters pegados en las paredes. El gimnasio había llegado a la quiebra y no pudieron sacarlo de allí, poco a poco se fueron perdiendo clientes y con ellos el dinero que ingresaba. La ultima vez que estuve aquí quise ayudarles pero no me dejaron. Ahora el lugar era una sala llena de aparatos con polvo arriba. Desde allí arriba se podía ver el ring, ese ring en donde Makena de seguro habia dedicado muchísimas horas de su vida. Manuel abrió la puerta sin golpear, ¿para que? El sabia que ya estábamos aquí. Nos encontramos con un hombre en ruinas, casi como su gimnasio. Recordé aquel dicho que dice que el ultimo en salir del barco antes de que se hunda es el capitán. Y Steven era el capitán aquí, aunque el barco se haya hundido por completo.

Tenia barba, ojeras y una camiseta que de seguro tiempo atrás era blanca. Habia una botella de whisky junto a un vaso servido, esas eran las únicas cosas que decoraban su escritorio. Arriba de el solo habia una bombilla de luz, de seguro vieja porque ya casi no alumbraba.

- Ella no esta aquí si es lo que buscan... - Dijo con su ronca voz. Dio un sorbo grande al vaso. - Ni siquiera se en donde esta ella, no se si esta bien, mal o muerta. Lo único que se es que escapo del hospital en donde estaba, aun estaba con tratamiento. - Dijo algo resentido.

- La he visto...- Dije sin dejar que siga hablando.- Esta bien si es eso lo que te preocupa...- A él se le iluminaron los ojos lentamente, allí pude ver una pizca de esperanza después de tanto tiempo.

- ¿En donde esta? ¿Esta bien? ¿No murió? - pregunto rápidamente, tan rápido que casi se queda sin aire.

- Ella esta bien, y esta mas hermosa que nunca. - Dije con alegría, Manuel nos observaba divertido. De seguro para el eramos como dos universitarios hablando de una chica. Pude notar que los hombros de Steven bajaron un poco, como aliviando su tensión. Sonrío y se rasco un poco la cabeza, sus pelos estaban canosos. El aun no creía lo que yo decía, sonreía como un pequeño niño.

- ¿Has podido hablar con ella? - Pregunto ilusionado.

- Sabes que me es imposible Steven, mi madre...

- Lo sé, disculpame pero es una vieja bruja.- Sonreí. No era el único que pensaba eso de mi madre.

- Mientras venia hacia aquí he tenido una idea, y necesito que me ayudes para poder recuperar a Makena. - Manuel y Steven me observaron extrañados.- Por lo que veo estas sin trabajo ¿no? - Steven suspiro y asintió lentamente con su cabeza.- Pues haremos esto así... Manuel, hablas con Richard, dile que tienes un tío lejano que necesita trabajo como guardia.. - Manuel se replanteo el plan en su cabeza.

- ¿Sabes que Richard conoce a Steven no? - Dijo.

- Si lo se, pero... maldición, entonces haremos esto...- Pense, pense mucho para solo llegar a un plan facilismo.- Le dirás que Steven necesita trabajo, que has pasado por el gimnasio y lo has visto hecho mierda.

- ¡Oye! - me interrumpió Steven.

- Lo siento Stev pero es verdad. - Respondí simpático, el parecía ofendido pero termino sonriendo.- Bueno siguiendo con el plan, Manuel le dirás que el gimnasio esta hecho mierda y que has hablado con Steven, dile que no tiene casi para comer y que esta destruido. Le sacaremos una foto y en cuanto lo vea se dará cuenta de que es verdad.

- Me sigues ofendiendo muchacho...- cruzo sus brazos y los puso sobre su panza.

- Lo siento viejo...es la única forma de volver a ver a Makena. Cuando Richard vea la foto, supongo y espero que se le ablande el corazón y lo contrate. Aparte de ello Steven a entrenado a muchos boxeadores, sabe de lucha y estrategia.- Manuel asintió.- Tiene que saber que yo no estoy con ustedes, hagamos de cuenta que no estoy enterado de nada.

- ¿Y como harás para que no piense que Makena me envió? - Pregunto Steven.

- Buen punto... Manuel dirás que la has visto con otra familia, que ella ya no quiere saber mas nada con nosotros. - Mi guardia asintió nuevamente.- Cuando Steven logre entrar a la guardia y tenga la confianza de Richard, nos encargamos de Makena...