Capitulo 56

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P.O.V Makena

- Efectivamente estas embarazada. - Dijo el medico en cuanto encendió el ecografo. Mary sonrió y Jonan aun mas.- Señor y señora Thompson, serán padres de dos pequeños bebes.- Luego de terminar esa frase hasta yo quede impactada. Me habían permitido entrar con ellos a la consulta con el obstetra, Mary ya me tenia mucha confianza, era como su mejor amiga.

- Ahora necesitaremos hacer ejercicios para embarazadas. -Bromeo ella, yo sonreí tímidamente, joder, no tenia ni puta idea de lo que eran los ejercicios para embarazadas, solo fui entrenada para golpear y matar como cuervo. Me tengo que adaptar a esto, y aquí es cuando el internet me ayuda.

- Son dos, dos niños cariño...- Jonan recién caía, observaba embobecido a la pantalla del ecografo. Una lagrima corrió por su mejilla.- Nuestros intentos han funcionado nena, tenemos a dos bebes, no a uno, a dos, dos pequeños Thompson se unen a la familia. Wow, estoy impactado.- Hablaba efusivamente, tenia tanta felicidad que se le salia por los poros, hasta podría decir que el hombre brillaba.

- Cariño, ¿te das cuenta de esto? Tendremos a dos niños en la casa... dos...Jesus...- Ok ahora es turno de Maria.- ya quiero saber que sexo tienen, ¿dos niñas? ¿dos niños? ¿uno de cada uno? Oh por dios juro que sean lo que sean ya los quiero tener conmigo..- el doctor sonrió. Yo camine lentamente hacia una esquina y los observaba desde allí, Observaba su felicidad...

- ¿Quieren escuchar sus latidos? Son muy pequeños pero se oyen claramente..- Pregunto el doctor.

- Claro que si por dios, quiero oírlos, quiero saber que traman estos dos en la panza de mami..- Dijo Jonan divertido. Mary sonrió, sus dientes tan blancos parecían perlas y sus ojos estaban iluminados, tenían lagrimas, pero lagrimas de felicidad. Nunca habia visto ese tipo de lagrimas. Todo lo que me rodeaba era desgracia y muerte.

Un sonido acelerado sonó de repente, rellenando todo el vacío del consultorio. "Pum, pum, pum" sonaban muy acelerados.

- Y allí están ellos. Ambos con el ritmo caridiaco normal.- los felices padres lloraban de felicidad y en un momento, cuando me di cuenta, una sonrisa estaba pintada en mi rostro. ¿yo? Sonriendo, maldición ni siquiera habían salido de allí y ya estaba sonriendo.

Pense en mi futuro, reflexione mientras ellos estaban en su burbuja de felicidad. Hasta ahora no quería tener una familia, no fui entrenada para ello. Nací para estar sola, el destino me lo ha marcado siempre, en mi vida solo hay soledad, rabia, tristeza. ¿Que haría yo con un niño? Ni siquiera se mi horario para comer, sonreí mas, tener una familia es una locura para mi. Aunque mi instinto latente dentro de mi decía que no podía morir sola, que necesitaba a alguien, una familia con la cual refugiarme, un cálido hogar con un esposo y pequeños corriendo de aquí para allá. No lo se, ahora estoy en conflicto conmigo misma. Seguí disfrutando de la escena, disfrutaba con ellos. Por lo que pude notar tenían todo planificado. Estaban buscando a su bebe, y encontraron a dos.

Cuando era pequeña y mis padres desaparecieron, ya nada volvió a ser lo mismo, perdí el concepto de lo que era una familia y creía que jamas iba a poder tener una. Veía a los padres adoptantes en el orfanato ni siquiera me interesaba presentarme, pero me ponía contenta al saber que alguno de mis compañeros iba a ser feliz e iba a tener esa contención que yo perdí. Quería a mis padres, queria que por la gran puerta de madera del orfanato aparecieran mis padres, pero no fue así, nunca logre verlos. Es muy desalentador ver que tus compañeros se van y no regresan, llegan nuevos y se van los viejos, pero tu siempre te quedas en tu lugar, Siempre espere a mis padres.

Mary corrió con otra suerte, encontró unos buenos padres que la acogieron como si fuera suya, le dieron toda la educación posible, se caso y miradla ahora. Creando a su propia familia, de seguro esos niños serán los mas felices del mundo.

- Ya podemos irnos Mak, nos han dado la fotografiá de nuestros bebes, ¿ves estas cosas pequeñitas? Son mis bebes. Pronto serán grandes como su padre. - Jonan sonrió orgulloso, no dejaba de ver las fotografiás. Le sonreí a ambos, era una sonrisa sincera, estaba muy contenta por ellos. Tendrían lo que yo jamas podría ser capaz de tener. Por primera vez vi a una familia formarse desde cero.- Miralos tía Mak, aquí estamos..- dijo Mary pasando la ecografia por mi cara, sonrei y la tome en mis manos.

- ¿Puedo quedármela? - pregunte con timidez,

- Claro que si, tenemos muchas.- Señalo a Jonan con los ojos, el seguía en su burbuja de amor observando las demás ecografias.

Cuando llegamos a la casa, Mary fue a recostarse un poco, a pesar de la felicidad no dejaba de tener nauseas y fatiga. Jonan llamo a toda la familia para avisar que vendrían dos personitas nuevas en camino. Luego de subir la escalera, camine hacia mi habitación. Ahora varias dudas asaltaban mi pensamiento, ¿debo irme cuanto antes? Ellos necesitan privacidad y no puedo vivir aquí cuando los pequeños lleguen a casa. Me senté en mi cama y observe la ecografia. Comencé a pensar en mi futuro, necesitaba una casa, ya no podía vivir mas aquí. Tal vez podría dar clases particulares de gimnasia, no lo se, no tengo un diploma que diga que soy profesora, pero se todo de eso. No podría presentar mi expediente tampoco, me habían expulsado de la compañía y de seguro mi expediente termino en un tacho de basura. Si le preguntara a Jonan si algún conocido de el necesitara profesora de gimnasia tal vez encuentre trabajo como para mantenerme. Suspire, de ahora en adelante debía pensar muy bien en lo que haría.

Levante la ecografia para verlos mejor, se notaban muy claros aunque yo no entendiera nada de estos temas.

- Hola pequeños, ¿están cómodos allí dentro? Traten de no empujarse, tengan buenos modales ¿ok?, según su madre yo soy su tía, así que los protegeré hasta el dia de mi muerte. No se preocupen, aquí afuera esta todo controlado, descansen y desarrollense bien. Pronto nos veremos. - Sonreí y deje la pequeña foto sobre mi mesa de luz. Esa foto el día de hoy me causo muchos sentimientos positivos.  

MAKENA. Terminada. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora