MAKENA. Terminada.

Capitulo 64

-Hace mucho tiempo he estado pensando en que te diría cuando nos viéramos nuevamente.- acarició mi rostro y corrió uno de los mechones de pelo que tenía sobre el.
-Pues yo pensaba que no nos volveríamos a ver más.- dije débil.- no debería estar aquí.- dije llevando mi mano hacia mi cabeza.
-No te toques, Richard te ha puesto un vendaje.
-Joder...duele...
-Es porque se ha pasado la anestesia.-me observó como si fuera un objeto precioso y fruncí el ceño.
-No me mires así, me incomoda.- el se carcajeo fuerte.
-Es que cariño...hace mucho que no te veo y sinceramente, eres preciosa.- dijo galante. Sonreí levemente, mi cabeza aun molestaba.
Sentí como alguien golpeaba la puerta y la abría lentamente. Era Sasha con una bandeja en sus manos. Enseguida trate de levantarme pero Axel no me lo permitió.
-Tranquila, solo he venido a traer bocadillos y algo para tomar.- me observo detenidamente, luego paso su vista por su prometido, que estaba acostado justo a mi lado.
-Yo solo he venido a ayudar a Ethan, en cuanto pueda me voy no te preocupes.- hable.
-No...-dijo Axel rápidamente. Ambas lo miramos.- no puedes irte, estás mal y aparte, nos acabamos de ver después de mucho tiempo, no puedes quedarte tan poco.- dijo sin vergüenza. Lo observe con los ojos abiertos de par en par, luego observe a Sasha, ella no estaba sorprendida para nada. Camino hacia la cama por mi lado y dejo la bandeja sobre la mesa de luz que me correspondía.
-Sasha yo...yo me voy a ir en cuanto pueda...
-No te preocupes.- sonrío levemente - se qué Axel siente cosas por ti..-lo observo- muchas cosas por ti.- volvió a dirigirme la mirada. Yo le correspondí horrorizada, ¿qué clase de broma era esta? La incomodidad había aumentado de manera inexplicable y sinceramente quería salir de allí cuanto antes.
-Mejor me voy, esta situación no me gusta para nada.- me levante como pude y esquivando el agarre de Axel. Me sentí mareada por un momento pero pude recomponerme rápidamente. Camine unos pasos hacia adelante cuando Sasha se puso en mi camino.
-No lo dejes así...- dijo con la voz baja. Me di vuelta para observar al hombre que estaba detrás de mi, él se mantenía recostado pero tenía los ojos cerrados, como si se estuviera rindiendo ante algo.- le estás rompiendo el corazón.
-Yo...no... yo no voy a quedarme aquí.- dije algo insegura.- ustedes se casarán, tendrán una familia. Aquí no me quieren, a ti si. Así que me voy.- dije esquivándola y caminando hacia la puerta.
-Es un matrimonio arreglado.- dijo tratando de impedir que me vaya, no lo logro. Abrí la puerta mientras decía no con mi cabeza y luego me retire.
Suspire mientras bajaba lentamente la escalera, el mareo volvía pero no era nada que no pudiera controlar. Haber venido aquí no fue una buena idea y quedaba claro en todos los aspectos.
-Hey Mak, ¿qué haces aqui? Debes estar descansando.- dijo Ethan al pie de la escalera, tenía un enorme tazón de cereales con leche en una de sus manos. Alce una de mis cejas.
-Me voy, dije que en cuanto terminara me iba así que eso hago.- baje varios escalones más. Esa escalera parecía eterna.
-Pero estás herida.- dijo subiendo algunos escalones rápidamente y alcanzándome. Rodeó mi cintura con su brazo libre y me ayudó a bajar.
-Eso no impide que me vaya, te he dicho que ha sido una mala idea venir aquí y he tenido razón.- dije al borde de un ataque de ira. Me controlé tomando un gran sorbo de aire.
-¡La has cagado Sasha! ¡Te he dicho que no entraras a la habitación!- sentí los gritos de Axel.
-Lo he hecho en son de paz, ¡era para agradecerle!- Sasha no se quedaba atrás con respecto a gritos.
-Ya veo por qué te vas...- dijo Ethan.- sabes que realmente no son pareja ¿no? Viven en la misma casa porque la madre de Axel así lo dispone.
-Ya me lo han dicho. No me interesa realmente si son pareja o no, estaría agradecida de no tener más problemas en mi vida.- terminamos de bajar. Caminamos lentamente hacia el living para luego salir.
-Espera aquí, voy a dejar esto en la cocina.- dijo mostrándome el tazón. Asentí con la cabeza y me recosté sobre una pared. Sentí como alguien bajaba rápidamente la escalera.
-Mak...- la voz desesperada de Axel retumbó en la sala- No te vayas, por favor. Solo... solo quédate un momento más.- se acerco rápidamente a mi cuando me diviso.- se que esto es extraño, sé que es toda una locura. Pero por favor, no me quites el tiempo contigo. Es lo único real que tengo en la vida.- lo observe, conociéndolo deliberaba seriamente entre acercarse más o guardar distancia.- sabes que eres la luz de mis ojos, no puedo dejarte ir porque si. Por favor, reconsidéralo...- dijo dudoso mientras me observaba fijamente a los ojos.
-No puedo estar aquí y lo sabes, estamos bien cuando estamos separados.
-Y estamos mucho mejor cuando estamos juntos. ¡Por favor!- rogó.- se que te has incomodado, lo entiendo, pero si me dejas explicártelo estaremos bien.
-Ya tengo conocimiento de todo Axel, no es necesario que me expliques nada.- el dirigió su mirada hacia el suelo. Podía sentir su angustia aunque estuviese a unos metros de mi.- no te preocupes ¿si?, yo no estoy enojada ni nada por el estilo, solo quiero descansar en mi casa.
-Puedo llevarte....- levantó el rostro y hablo con un rastro de esperanza en su mirada. Le dediqué una leve sonrisa y me acerque a él.
-No puedes Axel... no dejan que salgas solo ¿recuerdas? Es muy peligroso.- acaricie su cabello y cerro los ojos ante el suave tacto.
-Quédate conmigo, al menos esta noche. Juro que no te arrepentirás. Y si te arrepientes pues te dejaré ir sin presiones.- dirigió una de sus manos a mi rostro y me acaricio lentamente. Su tacto hacía que me falte el aire.- solo una noche... solo esta noche.- me lo pensé, en verdad lo estaba pensando. Hacia mucho que no lo veía y tal vez nos vendría bien cerrar esta etapa personalmente.
-Está bien... solo esta noche..-sonreí y él también lo hizo.