Capitulo 83

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POV Makena
Ya habían pasado casi tres meses desde que comencé a trabajar aquí. Firmé un contrato de trabajo por dos años y estaba muy contenta con ello, al fin había quedado efectiva.
Al abrirme más a nuevas amistades pude encontrar a muchas personas maravillosas a mi alrededor. Compañeros de trabajo, amigos de los compañeros de trabajo, mi jefe y su familia, clientes del centro y demás personas. Al principio me costó pero ahora todo iba fluyendo con normalidad y estaba muy cómoda.
-Recuerda practicar la posición de tus piernas y brazos para la próxima clase Robert. Es necesario para que esto no vuelva a suceder.- dije limpiando la sangre de su rostro. El pobre hombre de unos sesenta años había comenzado con sus clases de tiro hacia muy poco y no tenía muy en claro que un arma de fuego podía tener la fuerza de impacto suficiente como para golpearse la nariz y dejarle un pequeño corte en ella.- Espero que te mejores, solo ha sido el susto.- dije saludándolos mientras su mujer le ayudaba a salir del local. Él había disparado y al no mantener sus brazos firmes se dio un culatazo de lleno en la cara, son cosas que suelen suceder. Le cure la herida y llame a su mujer, que no estaba de acuerdo con su nuevo hobby, para que lo viniese a buscar solo por prevención.
-Cuando vea la grabación de esa clase de seguro reiré hasta el final de mis tiempos.- dijo Anna divertida luego de que la pareja saliera del lugar.
-¿Has llamado a Zack para avisarle?- pregunte recargándome en el mostrador.
-Si, ha dicho que si ha sido solo un corte que no te preocupes, que siempre pasa. Dice que cualquier cosa lo vuelvamos a llamar.- subió el volumen de la tv, ella siempre miraba programas de chismes y como nunca había nadie en la sala de espera que pueda hacerla cambiar de opinión, jamas cambiaba de canal.
-Necesito fijarme la nueva lista de alumnos de la nueva clase.- dije concentrada en mi móvil.
-Utiliza la otra computadora, está encendida.- respondió. Camine detrás del mostrador y me ubique frente al aparato. Abrí las nuevas tablillas y leí los nombres que se encontraban allí, sonreí al leer el nombre del dueño del supermercado al cual iba siempre. Le había insistido para que vaya a tomar un curso de armas ya que me había dicho que quería cambiar su rutina.
-Tenemos una primicia ¿no es así Pamela?- hablo un hombre en el televisor. Rodee mis ojos, chismes.
-Así es Jack. Estamos en el lugar donde sucedió el accidente de esquí, podemos ver cómo hay un gran despliegue policial. Hay menos seis grados de temperatura aquí y la nieve está realmente agresiva.- alcé mi vista para poder ver la imagen solo unos segundos y luego volví la atención a la computadora.- Intentamos hablar con la esposa de la víctima pero no quiere acercarse a los medios de comunicación. Esta muy afectada con lo sucedido.
-¿Que noticias hay del chico?
-Esta en grave estado, me han dicho que en estos momentos lo están tratando de estabilizar y se lo han llevado junto con el grupo de rescate al hospital más cercano.
-¿Sabes como fue el accidente?
-Él chico se ha ido a esquiar por la mañana temprano, algunas personas que se encontraban aquí nos dijeron que él siempre venía y que últimamente no le estaba dando mucho descanso a su cuerpo. Según contaron, un calambre en una de sus piernas ha hecho desestabilizarlo lo que causó una caída muy grande. Tiene múltiples traumatismos y según los médicos podría tener varias hemorragias internas.
-Lamentablemente estas cosas suceden, por eso a las personas que esquían y ven este programa les encomendamos que se cuiden. Que le den descanso a su cuerpo, no es un deporte peligroso pero tiene consecuencias, como todo. ¿Tienes algo más para decirnos Pamela?
-Si Jack, mientras tú hablabas me han dicho que la víctima de este accidente es Axel Lowell, el famoso actor británico que ha salido en una de las últimas películas más exitosas del año.- Al escuchar su nombre me congele en mi lugar.- recordamos que se ha casado hace tres meses y que se ha mudado hace uno junto a su esposa aquí a Canadá. En una entrevista ha dicho que necesitaba un descanso y que venía por un tiempo a disfrutar de la nieve junto a su familia.- No quería levantar la vista, no quería ver lo que en realidad estaba sucediendo.
-Que lástima lo que le ha pasado pobre.- dijo Anna subiendo aún más el volumen.- tan guapo que es y mira como le ha ido, ojalá se salve.- solo las palabras de la reportera rebotaban una y otra vez en mi mente, no podía entender nada de lo qué Anne decía en ese momento. No podía ser Axel, él estaba lejos y no le gustaban los deportes para nada. Él no esquiaba, o al menos eso tenía entendido. Analice las posibilidades de que esa mujer se equivocara pero fallé en el intento.
-Trataremos de conseguir más información y de comunicarnos con algún familiar para saber su progreso. Nos despedimos por ahora.- termino por decir la mujer. Mi respiración se había tornado un poco agitada pero traté de disimular lo mejor que pude ante Anne. Sentí un dolor en mi pecho y supe que aunque haya pasado todo lo qué pasó, aún sentía cosas por él y me desesperaba muchísimo no saber si estaba bien.
-¿Sabes? No me siento muy bien. Creo que me iré a casa, ya he terminado con todo el trabajo aquí.- logre decir, aunque mi voz salió débil. Anna me observo. Apague la computadora como pude y me levante de mi lugar pero un pequeño mareo hizo que me tambaleara.
-¿Necesitas algo? ¿Quieres que te lleve a tu casa?- hablo mi compañera mientras rápidamente corría a sostenerme.
-No no, solo estoy un poco descompuesta. Iré caminando no te preocupes. Tomaré aire.
-Esta bien, mantenme al tanto ¿si? Nos vemos mañana.- dijo cuando vio que me recuperé un poco.
Como si la vida se me fuera salí de ahí directo a mi casa, necesitaba tener noticias de lo que había pasado, todavía no podía creerlo.

MAKENA. Terminada. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora