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A pesar de que estaba actuando como niña tenia mi regalo envuelto para ese niño.

Mientras dibagaba por mi cuarto, pude ver que a lo lejos, en un rincón de mi buro de ropa, se encontraba el dinosaurio de peluche que yo solía ocupar de niño para jugar.

Se que no es mucho, pero este peluche es importante para mi. Me hacia feliz durante mi infancia, siempre jugaba con el, y a veces este simple peluche me hacia sentir que no debia tener miedo.

¿Ridículo?, tal vez.

Puede que no sea un regalo muy grande, y tampoco muy costoso pero es un regalo que se lo doy de corazón.

Solo espero que lo acepte de buena manera, y que no se enoje conmigo por no asistir a su fiesta.

Aun que, tal vez pueda olvidarme de toda esta ridiculez e ir de una vez por todas.

Pero... ¿me sentiré bien conmigo mismo?. Obvio que no.

Realmente quiero redimirme bien, antes de formar cualquier lazo con él. Ya no quiero que me vea de la manera en la que antes me veía, un sujeto que solía golpearlo y no dejaba de molestarlo.

Quiero que olvide esa faceta de mi, y pueda ahora ver una nueva. Una donde ahora él y yo.. bueno, en la que podamos ser amigos.

— Sasuke.— Itachi llego a mi puerta tocando el marco. —Te lo vuelvo a repetir, ¿seguro que no quieres ir?.

— No, estoy bien así.— Sonreí levemente. —Pero hay algo que necesito que hagas por mi.

— ¿Y que es?.— me levante de la cama con mi regalo en manos. —Oh vaya, ¿le has comprado un regalo?.

— No, no se lo compre, este ya lo tenia. No lo volveré a usar, y tampoco se si él vaya a querer usarlo pero... realmente espero pueda apreciarlo, se que no es mucho pero realmente se lo doy de corazón.

— Oh pequeño hermano.— Itachi revolvió mi cabello. —Un buen regalo, es siempre el de alguien honesto.

— Aun no tengo definida esa palabra, y no se si me pueda considerar una persona honesta, pero si se lo entrego de buena manera.

— Excelente, seria mejor si tu se lo entregaras personalmente, pero dices que no quieres ir.

— No se si el lo entenderá, ojala y si. Cualquier cosa, yo hablare con él.

— Bien, entonces voy saliendo.

— Si, que te vaya bien. Y espero se diviertan.

— ¡Claro que se va a divertir!, estamos hablando del pequeño Taiki.

Aun que no pueda felicitarlo como se debe, (aun que podría) le deseo lo mejor. Y que realmente se la pase bien, aun que no pueda presenciarlo personalmente.

~ • ~

— ¡Nee-chan!, — llego el pequeño corriendo hacia su hermana quien lo esperaba en la entrada de la escuela. —Ya estoy aqui.

— ¿Por que has tardado?.

— El maestro quería que le ayudara a calificar algunos exámenes.

— ¿Calificar?, ¿Tú?.

— ¡Si!, ya sabes.. por ser quien saco mejor calificación.

— En vez de felicitarte te ponen hacer su trabajo, cha'.— la Haruno se acerco a su hermano. — Por cierto, estoy orgullosa de tu calificación enano.

¿Tu eres quien golpea a mi Hermanito?.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora