10.

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Aun que ya había otras ocasiones en las que ella me había humillado esta vez la sentí mas pesada, sentía vergüenza por la manera en como me trato en la escuela enfrente de casi toda la escuela.

Cuando termino por derramar el refresco en mi, se había retirado del lugar junto con su hermano.

Dejándome a mi humillado y avergonzado, nadie me había ayudado y mucho menos se me habían acercado se hicieron de la vista gorda y me dejaron tirado.

Nuevamente me había sentido solo, sentía que estaba apartado de todo y de todos, por primera vez sentía que ya no encajaba en ese lugar.

Recuerdo que cuando había terminado la humillación había recogido mis cosas y mis papeles –que ya ni los entregue– y salí corriendo del lugar.

Me había sentido sofocado, humillado, avergonzado y voy a ser sincero, primera vez que quería que esto terminara.

Ya estaba harto la manera en como ella me trataba, como me humillaba y hacerme sentir con las ganas de no poder hacer nada me hacían enojar.

Joder, tendría que poner otros medios.

Tome mi celular y rápidamente marque a uno de mis fieles contactos, Suigetsu.

¡Hey!.— su voz animada del otro lado del celular hizo que me calmara un poco. —Maldito, hasta que por fin decides llamarme.

Suigetsu, me alegra escucharte.

Calmado eh, me gustan las mujeres no los hombres.

—Hmp, estúpido.

No creo que me hayas llamado solo para decirme estúpido.

Me conoces bien.

¡Ja!, y bien ¿que necesitas?.

—Hay dos personas que me están cabreando demasiado pero una de ella en especial.

¿Como los viejos tiempos eh?.

Como los viejos tiempos.— reafirmo. —Entonces, ¿me ayudaras?.

Sabes lo que tienes que hacer Sasuke, pero tal vez tarde un poco de tiempo ahora mismo también tengo que hacer otros encargos.

—Con tal de que lo hagas, cuento contigo en esto Suigetsu.— fue lo ultimo que dije para finalizar la llamada.

Ahora si, todo estaba planeado.

Esto era sencillo, desaste del hermano y la hermana quedara destrozada.

Y a si yo podre tomar ventaja.

~ • ~

—Todo se basa en la piernas.— le dije a Taiki. —Cuando el contrincante quiere atacar su fuerza siempre la incrementa en sus puños, se olvida de sus piernas y eso a ti te da ventaja.

—¿Que se supone que me da ventaja?.

—Las piernas son la clave de ellas vives, mientras mantengas tu peso y equilibrio fijo seras capaz de defenderte correctamente.

—Nee-chan, esto es complicado.

Estábamos en casa, había decidido enseñarle unas cuantas cosas a Taiki sobre defensa personal, yo lo protegeré siempre pero él también necesita saber defensa personal en caso de que no este con él, cosa que espero nunca suceda.

¿Tu eres quien golpea a mi Hermanito?.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora