[Yuuri]
— ¡Otra vez! ¡Yuuri, hazlo bien de una vez! — gritaba Mila, quien se encargaba de mi entrenamiento mientras Celestino tomaba unas vacaciones, al ver que yo no lograba uno de mis giros debido a la poca concentración que le ponía al mismo.
— ¡S-Sí! — tartamudeé para luego tomar impulso, patinando sobre el frío hielo, y elevarme en el aire, dando tres giros completos antes de caer dolorosamente al suelo, aterrizando sobre mi cadera y rodando un poco.
— ¡Yuuri! ¿Estás bien? — se preocupó la pelirroja, teniendo el impulso de correr hacia mí, pero ya que ella no tenía puestos los patines, no pudo sino arrimarse todo lo que pudo al hielo.
—Estoy bien, Mila, sólo fue un pequeño golpe, nada grave— la tranquilicé poniéndome de pie a la vez que me sobaba el costado, donde seguramente me saldrá un moretón pronto.
— ¡Debes concentrarte! — volvió a gritar.
—Mila, no deberías de ser tan dura con él— intervino una voz que nunca creí oir en persona, captando nuestra atención y haciendo que tanto la rusa como yo nos virásemos hacia tal voz, encontrándonos con un guapo, alto y fornido hombre de cabello plateado.
Mis ojos se abrieron a más no poder, pero luego los cerré como reflejo del pequeño dolor que sentí cuando me pellizqué el brazo en busca de despertar de este, pensé yo, sueño.
— ¡Víktor! — Espetó con sorpresa mi entrenadora sustituta —No me esperaba verte tan pronto, ¿cómo lograste que la gringa te deje venir? —.
Preguntándome a qué se refería Mila, me intenté acercar lentamente, pero mis piernas no respondían, sólo temblaban por la emoción que me causaba ver a mi ídolo a tan sólo unos metros de mí, y temí que dejasen de hacer su trabajo y me derribaran al suelo, pero justo me obedecieron y pude aproximarme aunque sea un poco.
—No es mi madre, además, ¿sabes lo fácil que es conseguir un vuelo cuando la chica que vende los pasajes es tu fan? Sólo le quedaban tres boletos, y uno fue mío, así que: Llegué lo más rápido posible— explicó alegremente, recostándose en el barandal de la pista.
—Ya veo, aprovechado; a Celestino le hubiera gustado verte, pero se fue de vacaciones o yo qué sé— le comentó Mila.
—Lo sé, hablé con él en todas las horas de espera para abordar el avión, me dijo que tú eras quien estabas entrenando a Yuuri mientras tanto—.
¡Sabe mi nombre! ¡Sabe quién soy!
—Me lo pidió de favor, supongo que necesitaba un descanso del niño de allí que sólo sabe sacarte de quicio— se burló mirándome y señalándome con un movimiento de cabeza.
¿Por qué Mila, por qué debes hablarle mal de mí? ¿Qué te he hecho?
—Hola, tú eres Yuuri— notó observándome con una sonrisa de ternura contenida.
—S-Sí, un... un gusto, señor Nikiforov— respondí con extremo nerviosismo y educación, acortando distancia y ofreciéndole mi mano en señal de saludo.
— ¡Pero si eres tan tierno! Aún más en persona— saltó a abrazarme, haciendo que mi rostro se sonrojara violentamente y mis manos se pusieran a temblar como gelatina.
Víktor Nikiforov me está abrazando. El pentacampeón ruso. La leyenda viviente, ¡está abrazándome!
Estoy en el cielo, ¿no es así? Ya he muerto, ya he llegado al paraíso.
—Se-Señor Nikiforov... me asfixia...— le dije trémulamente, palmeando con hesitación su musculosa espalda.
— ¡Oh! Lo siento, es que tengo una ligera obsesión con las cosas tiernas, y tú, lindo, entras en esa categoría— cascó separándose de mí, sentándose en la barandilla, con las piernas dentro de la pista, y estrechando mis extremadamente sonrojadas mejillas entre sus largos dedos.
ESTÁS LEYENDO
Corazón De Cristal [PAUSADO](M-Preg)(Yaoi/Gay)(VictorXYuuri)
FanficYuuri es el mejor patinador de todo Japón, su ídolo es el patinador estrella Víktor Nikiforov, a quien, un día y de por "casualidad", se lo encuentra en la pista de patinaje donde trabaja Yuko, una de sus amigas. Yuuri le cae bien desde un comienzo...