[Víktor]
— ¿Están seguros de que tienen todo? — se preocupaba la madre de Yuuri, ajustándole el abrigo que le había puesto en contra de su voluntad.
—No se preocupe, mamá, lo hemos revisado unas cinco veces. Mínimo— la tranquilicé, sobando los tensos hombros de mi novio, pues el comentario de su madre, seguramente lo había puesto nervioso.
—Está bien; estaremos allí mañana para poder verlos—.
—Igual nosotros— agregó Otabek, cuyo brazo rodeaba el estómago, ya bastante prominente, de Yurio, acariciándole casi imperceptiblemente su vientre.
—Si me dan ganas— farfulló el rubio, desviando la mirada, pues según su novio nos había dicho, estaba durmiendo cuando lo tuvo que levantar para venir a despedirnos, de modo que su mal humor estaba por las nubes.
—Espero verte allí, Yurio— sonrió Yuuri, acercándose a él un poco.
Creo que todos pudimos darnos cuenta cómo mi japonés se le quedó mirando a su estómago, deseoso de sentirlo, aunque él pensó que nadie lo notó.
—Ahg, si quieres tocarlo, hazlo de una vez cerdo— cedió Yurio, justo en el momento en el que nuestro tren se detenía frente a nosotros, abriendo sus puertas, y dejando que algunas personas bajasen, quedando casi vacío.
Una tímida y pícara sonrisita se reflejó en el rostro de Yuuri antes de que se agachase un poco y besase el vientre de quien, cuando él se alejó rápidamente y subió al tren a toda felicidad, trató de agarrarlo para golpearlo, con las mejillas furiosamente encendidas.
— ¿Yo también puedo besarlo? — tenté, sabiendo que me mandaría a freír monos.
—Embaraza a tu doncel y besa su propio estómago, a mí déjenme en paz— protestó, zafándose del agarre de Otabek, para ir hacia la salida de la estación.
—Lo pensaré— reí, despidiéndome del kazajo, la madre, el padre y de la hermana de Yuuri, antes de subir yo también al vagón antes de que lo perdiera.
—Soy muy joven para ser tía, usen protección— gritó Mari justo cuando las puertas se cerraban.
Busqué con mi vista a mi hermoso Yuuri, encontrándolo haciéndome discretas señas para que lo pueda ver.
Avancé hasta donde estaba y me senté delante de él, colocando mis maletas a mis lados. Ya luego lo traería junto a mí para poder abrazarlo cuando el viaje esté un poco más avanzado, ahora necesitaba que mi hombro dejara de estar acalambrado, sensación que tenía gracias a que Yuuri quedó dormitando sobre él, en la cama, unos minutos antes de salir para la estación, de la cual ya nos estábamos alejando, encontrándonos con un muy lindo paisaje que sólo embelleció a mi novio tan hermoso.
—Estoy emocionado, ¿Y tú, Víktoru? — quiso saber sin mirarme, con las mejillas levemente sonrojadas y la vista fijada en la ventana, sin notar que, con cuidado, saqué mi móvil y le tomé un fotografía para presumir de la suerte que tengo de tenerlo sólo para mí en Instagram. Decidiendo que ya es hora de dar algunos indicios de quién va a ser mi compañero en la presentación de primavera, que es ya mañana.
—También,mi amor. ¡Oh, Yuuri, mira! — le dije cuando, sólo unos segundos después depublicar su foto, ya había recibido casi un millón de "me gustas".
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Corazón De Cristal [PAUSADO](M-Preg)(Yaoi/Gay)(VictorXYuuri)
FanfictionYuuri es el mejor patinador de todo Japón, su ídolo es el patinador estrella Víktor Nikiforov, a quien, un día y de por "casualidad", se lo encuentra en la pista de patinaje donde trabaja Yuko, una de sus amigas. Yuuri le cae bien desde un comienzo...