[Víktor]
— ¿En ese caso, a usted lo debo de llamar Toshiya-san? — quise asegurarme, a lo que mi suegro asintió.
Los padres y la hermana de mi hermoso cerdito estaban enseñándome los honoríficos japoneses que tan intrigado me tenían, así también como una que otra palabrita que usaría con mi Yuuri, mientras él hablaba con su mejor amigo. Al principio, pensé que él se enfadaría conmigo por haberme entrometido en sus cosas pues la frase que todo el mundo conoce "los japoneses son muy reservados", es una verdaderamente real, mas sólo actuó avergonzado, así que no sólo logré que durmiera un poquito más -el cual era mi objetivo de llamar al tailandés por mi cuenta-, ya que estaba agotado, sino que también logré verlo sonrojadito, que aunque no era muy difícil hacerlo enrojecer, era muy bello.
—Exactamente, Víktor-kun— comprobó mamá, usando el honorífico que me explicó que me correspondía de su parte.
—Y... ¿Yuuri-chan? — pregunté también, emocionado por sorprender al mencionado siendo un experto en su idioma.
— ¿Desde cuándo me llamas así, Víktoru? — apareció mi Yuuri, sobresaltándome al no oírlo cuando ingresó en la recepción del hotel.
Es mi momento.
— ¡Yuuri, kon'nichiwa watashi no ai!* — exclamé alegre, girándome para ver su adorable carita semejante a un tomate, pero sólo pude verlo correr de regreso a su cuarto con las manos cubriéndole el rostro — ¡Yuuri! — lo llamé, pero ni caso.
—Ya lo avergonzaste— se burló su hermana, estirándose de donde estaba sentada para llegar al control de la televisión y ponerle más fuerte.
—Mi bebé de mamá, tan tierno como cuando era pequeñito— se enterneció mi suegra, llevando sus manos entrelazadas a su corazón.
— ¿Por qué no traes las fotos para enseñárselas a Víktor, cariño? — propuso papá con una sonrisa.
—Está más que claro que muero por verlas, pero ahora debo ir a por Yuuri; con permiso—.
Tras despedirme, me levanté de mi lugar y me dirigí a donde dormimos con mi parejita, quien, cuando entré, estaba mojándose su rostro repetidas veces en el baño, pero cuando me vio, se apresuró a secarse y saltar a abrazarme muy fuerte.
— ¡Víktoru! ¡Eso fue tan tierno! ¡Dilo otra vez! — exigió acariciando mi mejilla con la suya, rojita y suavecita.
—Kon'nichiwa watashi no ai— repetí obedeciéndole con ternura, besándolo como los esquimales lo hacen, rozando varias veces nuestras narices —.Yuuri, itoshi teru—.
— ¡Yo también te amo, Víktoru! — correspondió besando mi mejilla sonoramente, cosa que nos hizo reír a ambos, mas recordé algo que Mari me había comentado y que varias veces había escuchado estando aquí en Japón.
—Yuuri...— llamé su atención, y él me miró sonriente — ¿Puedes hacer algo por mí? —.
—Cualquier cosa, amor— aceptó y me besó de manera cortita.
—Mi vida... Llámame Senpai...—.
Su carita no tuvo precio, adoré ver la expresión que puso, pero me deleité aún más con lo que hizo a continuación.
~~~~~~~~~~~~~~
Kon'nichiwa watashi no ai: Hola mi amor.
Itoshi Teru: Te amo.
¡El domingo no se acaba hasta que me duermo! ¡Así que sigue siendo domingo!
(Sólo lo digo pa'que no me maten)
¡Disfruten del mini-capitulito!
ESTÁS LEYENDO
Corazón De Cristal [PAUSADO](M-Preg)(Yaoi/Gay)(VictorXYuuri)
FanfictionYuuri es el mejor patinador de todo Japón, su ídolo es el patinador estrella Víktor Nikiforov, a quien, un día y de por "casualidad", se lo encuentra en la pista de patinaje donde trabaja Yuko, una de sus amigas. Yuuri le cae bien desde un comienzo...