Fuiste una bala perdida. TERMINADA

15. Cena

Me desperté porque el teléfono de Isaza no dejaba de sonar, el dormía como un bebé, trate de despertarlo para que apagara el ruido pero fue imposible, no podía levantarme ya que tenía su brazo por mi cintura y no me soltaba. Me volví a dormir y cuando desperté dos horas más tarde Juan ya no estaba a mi lado. Me levante a duras penas, lo busque por la casa pero se había ido, me dí una ducha bastante larga y cuando salí del baño Villa estaba en mi cama mirando a su teléfono.   

- (Julieta): ¿y tu que haces aquí? 

- (Villamil): buen día para ti también - se acercó a saludarme - te vine a ver 

- (Julieta): deberías aprender a tocar la puerta - le dije mientras caminaba a buscar mi ropa - 

- (Villamil): por algo me diste llaves ¿no?

- (Julieta): es para emergencias - me reí -

- (Villamil): bueno, no importa, te vine a ver para que comiéramos juntos.

- (Julieta): perdón, no puedo - camine de nuevo al baño para vestirme -  tengo que ir a casa de mi padre, me invito a comer. 

- (Villamil): ¿y me vas a abandonar aquí con hambre? - grito desde afuera - 

- (Julieta): ¿quieres venir conmigo? 

- (Villamil): no estoy preparado para conocer a mi suegro - salí ya vestida y lo mire riendo -

- (Julieta): deja de soñar, ¿quieres o no? 

- (Villamil): esta bien, pero no sé si estoy vestido correctamente - me miro preocupado - 

- (Julieta): estas perfecto, no te preocupes - terminé de arreglarme en 15 minutos, nos fuimos en el auto de Villa, eran 40 minutos de viaje, mi padre vivía al otro lado de la ciudad entonces había que salir con anticipación para llegar a tiempo. El viaje junto a villa fue muy divertido, nos tomamos una foto muy linda que el subió a su historia de Instagram, luego me contó historias de cuando estaba en el colegio y lo bien que lo pasaban, cantamos todo tipo de música, mas bien el cantó con esa linda voz que tiene y yo simplemente gritaba desafinada, me miraba riéndose por lo mal que cantaba y se puso a grabarme para luego subirlo a las redes sociales, le reclame diciendo que me dejaría en vergüenza pero me ignoro, al cabo de casi una hora, llegamos. 

- (Villamil): ¿en que carajos trabaja tu papá? - dijo mirando la enorme casa - 

- (Julieta): en nada interesante, lo prometo - toqué el timbre, unos segundos mas tarde, Margarita, la mujer de edad que trabajaba en casa de mi padre, nos abrió - Maggi, Hola - dije abrazándola - 

- (Margarita): Hola mi niña, que linda estas

- (Julieta): Gracias, el es mi amigo Juan Pablo - los presente y entramos -

- (Margarita): te esperan en el patio trasero - le agradecí y fuimos caminando hasta el patio, mire a villa y se veía un poco nervioso - 

- (Julieta): ¿estas bien? - me reí - 

- (Villamil): si, me da un poco de vergüenza venir sin ser invitado. 

- (Julieta): no seas tonto, yo te invite - salimos, ahí estaba mi pequeña familia, me acerque a saludarlos animadamente - Hola viejito - me abrazo - 

- (Carlos): al fin llegaste, pensé que no venías - nos separamos y miró a Villa - ¿viene contigo? - le pegue - 

- (Julieta): - mientras saludaba a Barbara, mi madrastra, mi papá se acercó a Villa - espero no te importe que lo haya invitado. 

- (Barbara): para nada hermosa, estas en tu casa - le sonreí - es lindo - me dijo en un susurro - 

- (Julieta): a veces - ambas nos reímos -