El padre de Hope se levantó inmediatamente de su silla y les comenzó a pedir a todos que se fueran.
Así de simple, un momento estaban todos a punto de escuchar la proposición de Hope y al otro el restaurante era un caos con todos moviéndose a la salida enojados.—Papá, ¿qué pasa?— preguntó Hope tratando de acercarse a su padre pero él la evadia pidiéndole a alguien más que lo disculpara pero que la cena había terminado. —¡Papá!
Sky y Dean había sido arrastrados por una de sus tías afuera, casi no quedaba mucha gente en el lugar y en su totalidad, prácticamente solo éramos el club y la familia del enfermero.
Por si acaso mantuve a Hope conmigo sin soltarla.
—Dereck, no hay necesidad de que hagas este escándalo. Solo quiero hablar.
—No tienes nada bueno que decir, nunca lo tienes, ¡solo malas noticias y favores para salvar tu vida!— le gritó. —No vas a molestar a mis hijos, ¿entendido?
Nunca había visto al oficial Julian tan enfadado y nervioso.
—¡Ni siquiera has escuchado lo que tengo que decir! También son mis hijos...
La mano de Hope se puso tensa y caliente. Estaba en shock.
No lo podía creer, ¡era la madre de Hope!
La madre de Dean y de Sky, la señora que los abandonó cuando eran niños. Nunca pensé que se vería de es forma, tan joven y vivaz.—Kasaquir, sacala de aquí. No le va a hacer ningún bien escuchar a esta mujer— me dijo su padre.
—No puedo llevarmela si no quiere— en mi cabeza solo pensaba en que estaría sintiéndose fatal y que esto también lo sentirían los bebés. —Bombón.
—No quiero problemas, solo hablar con los muchachos...
—¿Mamá?— por primera vez en mucho rato escuché hablar a Hope.
La mujer la miró de nuevo con una sonrisa enorme y los ojos brillantes.
—Si...
—¡No! Tu no tienes una madre, Hope, esta señora lo único que tiene de madre son los ovarios.
Me puse entre mi novia y su madre para que me mirara a los ojos.
Tomé su rostro entre mis manos y hablé con delicadeza.—Si quieres o no hablar con ella, estará bien. Es tu decisión, bombón.
Comenzó a negar rápidamente buscando a su madre sobre mi hombro y con los ojos llenos de lágrimas.
—No quiero. Kas, quiero que se vaya.
—Señora, ella no quiere hablar con usted— escuché que el enfermero le dijo inmediatamente después de que Hope acabara.
—No puede saber si quiere hablar conmigo, ella no me conoce...
Tenía que sacarla lo más pronto posible de aquí si esa señora no se iría.
La tomé de la mano y la llevé conmigo a través del lugar hacia la puerta. Un segundo antes de que la sacará de ahí, su madre la tomó de la mano para detenernos.Los muchachos del club reaccionaron acercándose todos al mismo tiempo.
—¡No la molestes!— gritó el señor Julian.
—Señora, sueltela. Esto no le hace bien— dijo Hurley.
—Ni a los bebés, ¡piense en sus nietos!
El lugar entero guardó silencio.
Miré a Bob con expresión preocupada e inmediatamente se dio cuenta de que había dicho algo que aún no era momento de decir.Hope se cubrió el rostro con ambas manos. La noticia solo desató otro desastre en medio del desastre.
—Le pido por favor que se retire, este no fue un buen momento— murmuró Marcus.
Ahora todos miraban a Hope e incluso su madre parecía estar petrificada.
Algunos observadores menos discretos apuntaban los ojos directo a su vientre, otros solo a su rostro escondido en la protección de sus manos.La mujer retrocedió unos pasos y levantó ambas manos.
—Lamento haber llegado así...
—Largate o te arrestaran por alterar la paz.
—Dereck, yo solo quería...
—¡Que te vayas!
Con el grito tan fuerte que soltó su padre, Hope se descubrió el rostro y me di cuenta de que había soltado un par de lágrimas ya.
Bob se sentía culpable, pero antes de que llegara con ella Tanner le dijo que no era oportuno.
La mujer se fue luego de unos instantes más observando perpleja a Hope y luego todo siguió en silencio.
Una tortuosa calma, cuando ya la gran mayoría se había ido y la desastrosa cena se había terminado.Ni siquiera sabía si ella quería que la abrazara o necesitaba espacio. Decidí quedarme en mi lugar hasta que me dijera algo, por lo cual tuve que esperar mucho tiempo.
Dean y Sky entraron de nuevo al lugar y vieron a todos nerviosos e incómodos.
—¿Ella era mamá?— preguntó Dean.
—Si...— asintió el oficial Julian.
—¿Qué quería?— intervino Sky. —¿Qué pasó?
Otro par de ojos se fijó en mi novia.
Entonces apretó los labios y se puso firme, como solo lo hace cuando se siente más vulnerable.Tomó aire y nos dio a todos la espalda. Comenzó a caminar hacia la barra en el fondo donde los meseros que habían contratado esperaban órdenes asustados por lo que acababan de ver.
—Fue un magnífico servicio, muchas gracias— les dijo amable pero sin alegría. —Pueden ir a sus casas. No creo que nadie más quiera cenar.
Varios asintieron y le sonrieron al irse.
Lo más devastador en el mundo es ver a tu luz desilusionada.
Y por lo menos en la última semana, esta cena había sido muy importante para ella. Lo que la arruinó no fue ni más ni menos que la llegada de su madre y la noticia del embarazo suelta como bomba sobre su familia.—Hubiera querido escuchar todo su repertorio, señor— le dijo al saxofonista. —Tiene mucho talento, gracias por la música.
Él al igual que los meseros no supo cómo reaccionar a la desgarradora amabilidad cargada de desilusión de Hope y simplemente le regaló una sonrisa antes de irse.
—¿Es verdad?— preguntó su padre mirándome.
Hope se dejó caer en una silla y con los codos en la mesa volvió a esconder el rostro entre sus manos.
—Son gemelos— respondió ella por mí. —Sorpresa.
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¿Soy bueno ahora?
Teen FictionUn niño rebelde que perdió a su madre en una moto, un adolescente descarriados que una hermosa chica metió en cintura, un joven asustado que perdió también a su padre y por pensar que era mejor estar solo, casi pierde al amor de su vida. Fui todos y...