Home - Bnior [[Editando]]

67

Su felicidad era plenamente marcada y notada en su rostro, parecía que no había nada más hermoso que ese día. Con su vista al frente estacionó su auto unas casas atrás de donde la hermana menor de Jaebum le ha ía indicado que sería la pequeña celebración.

Podía ver varios autos estacionados cerca, estaba seguro que era ahí. La casa se iluminaba completamente y la música era un poco alta.

Bajo con cuidado a Ryujin de su silla, la pequeña solo había hablado con palabras simples lo tanto que quería jugar con los anfitriones de la fiesta.

Jinyoung no estaba preparado para aquella celebración, si no fuera por el llamado de los niños, jamás se enteraría de que era el cumpleaños de su compañero. Y aunque hubiera deseado llevarle algo como regalo, no tuvo tiempo. El avión tuvo unos contratiempos haciéndole llegar tarde a Seúl, de ahí comenzó a alistar a su hija, para después el comenzar a preparase.

Mañana como compensación iba a llevarle algo Jae, el se había convertido en su gran amigo...

—Yo voy. —Sé escucho la masculina de voz de alguien tras la puerta, después de que Ryujin tocará la puerta de la residencia. —Bienvenidos...

Los ojos de ambos se encontraron. Había pasado un largo tiempo en que no lo volvió a ver, el rostro de ambos mostraba sorpresa. Después de aquello jamás se volvieron a hablar.

—¡Ryujin! —Un grito unísono se escuchó detrás del gran hombre que estaba frente a él.

Hyunjin y Yeji se hicieron presentes, matando el incomodo momento y tomaron la mano de su pequeña y la de él para a dentrarlos en la casa.

—Jinnie Hyung, Papá no a llegado pero debemos sorprenderlo cuando llegue. —Ambos Im lucían emocionados con la idea. En algún momento Jinyoung se puso a la altura de los menores con tal de verlos mejor. Las palabras del menor quedaron al aire al encontrarse nuevamente con el mismo hombre el cual había abierto la puerta. No había dejado de verle.

—Hyunjin, para sorprenderlo que tal si apagamos todas las luces y cuando llegue las encendemos.

Los tres menores junto a él se emocionaron en la idea y comenzaron a gritar el plan a todos los invitados. Park sólo los veía revolotean desde ahí con uns sonrisa, olvidando que tenía una incomoda charla pendiente.

—Jinyoung, tú...

El pelinegro se levantó con un leve impulso en su rodilla.
—Si tanto te incomodo, lamento decirte que estoy aquí por mi... Amigo. —Jinyoung podía pensar la palabra, sin embargo salir de su boca era otra cosa. Ese  sentimiento de amistad era diferente a cualquier otro que hubiese tenido antes. —No me iré de aquí.

—Así que conoces a Jaebum. —Aquello había sonado más como una insinuación, pero la fulminante mirada de Park hizo entrar en consiencia al alto. —Yo soy su amigo también, de hecho mi pareja también estará aquí en un rato.

¿A qué venía eso?

—No quiero que esto siga siendo incomodo ambos eramos... Unos críos en ese tiempo. Y Jae es amigo de ambos, así que dejemoslo estar ¿No? —Dijo con cierto nerviosismo.

—Claro. Sigues siendo igual Hyunwoo. —Cuando el mayor iba a agradecer, Jin continuó. —Igual de mastodonte y miedoso. —Dijo en medio de una risa.

Si iba a recuperar a su viejo amigo iba a hacerlo de la buena manera. Ambos continuaron a la gran mesa de bebidas donde siguieron con una animada platica de sus vidas. La casa no estaba tan llena como esperaba, había alrededor de veinte o treinta personas, entre ellos logor ver a Youngjae, Mark y a Nayeon en una sería platica.

—Entonces la niña de hace rato es tu... —No sabía cómo decirlo.

—Mi hija. —Bufo sin pensarlo.

De repente un sonido sordo de una caída fue escuchado por la parte superior del hogar. Todo mundo quedó en silencio un momento.

Rompiendo el primer amistoso momento en años entre dos mejores amigos  que por curiosidad, mataron de un tiro toda confianza.

_____________________________

Si quería ahorrarse sorpresas era la mejor manera de hacerlo sin ganarse reprendas de su madre o su hermana.
Había hecho aquello múltiples veces seguramente nadie se daría cuenta, al igual que su madre a tardes horas de la noche después de una buena fiesta.

Por dios, había hecho aquello en la fiesta universitaria de Halloween en la que llevó a su amado par. Todo estaba preparado, estacionó su auto una calle antes de la de su madre, se cambió la ropa por una con la cual podía pasar desapercibido por todo el vecindario, ya varios residentes le habían sacado la vuelta por parecer un asaltante.

Paso por un lado del del lado izquierdo jardín con tal de cruzar la barda que lo separaba de la casa, la barda no era tan alta con solo saltar ya alcanzaba para poder sostener la orilla, de ahí sus pies lo ayudaron a escalar para que no fuese tan difícil llegar arriba. Con un salto llegó a la parte posterior, bien. Todo iba bien.

Podía ver por las ventanas la gran cantidad de personas. No quería ver a nadie.
Miró hacia arriba, donde se encontraba su vieja habitación. Con la construcción de la casa era fácil subir, habia varios puntos estratégicos que si sabías ubicarlos era como subir una escalera o a esas escaladas en las que usabas un cable para escalar altas paredes.

De poco a poco comenzó a escalar, otra de las cosas por las que estaba agradecido en la construcción de su antiguo hogar era que no había ventanas en la parte de abajo del recinto.

Casi estaba cerca de la ventana, tan cerca que sus manos rozaban con el borde. Con levantar un pie a la próxima piedra su mano izquierda logró sostenerse del marco. No había mucha preocupación en lo demás pues su ventanal siempre estaba sin seguros.

Uno de sus dedos lo empujó y este cedió. Todo parecía ir bien, hasta que su siguiente paso fallo y resbaló.

Mierda. Mierda.

Tuvo que sostenerse con ambas manos del borde, pues al soltar su pie el otro también resultó ceder.

La caída no era tan alta, pero tampoco era una buena idea dejarse caer, si lo hacía terminaría con varios huesos rotos.

Con la fuerza que tenia en sus manos y brazos se impulso hacia arriba. De poco a poco sus pies comenzaron a encontrar piedras para sostenerse nuevamente.

Sin embargo... Cúando quiso poner un pie dentro de su oscura recamara, cayó hacia el frente dandose de cara con el suelo. Dejándole saber a todos que alguien había entrado al lugar con un fuerte sonido.

—Carajo... —Fue lo único que Jaebum articuló al sentir su brazo punzar junto con su nariz.

-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_-_

Abro votación para la bendición de Bambam y Yugyeom, ¿Niña o Niño?
🤔🤔🤔🤔🤔

Perdonen si a veces la historia tiene saltos de tiempo largos, porque tendrá unos cuantos más, son algo necesarios ya que a veces no tengo ideas para lo seguirá entonces solo me basó en lo importante.

20K en vistas. Muchas gracias por darle la oportunidad a esta historia. ❤️❤️❤️❤️

Nos leemos.