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—¿Que sucede?

El mayor se acercaba al sofá donde el menor estaba sentado.

—¿Con qué? ¿O qué? —Preguntó a su padre.

Mark había dejado a los otros dos hijos arriba en su siesta de la tarde.

—Se que debería ser al revés pero las maestras están preocupadas por tu seriedad. ¿Algo que decir, Sung?

Mark veía al menor. El lo había notado, al principio pensó que este solo se le había perdido algún juguete. Pero no.

Jisung sólo frunció el ceño.

—Es muy aburrido ir.

El pequeño Wang podría ser muy flojo, pero jamás diría eso, al le gustaba asistir porque podía jugar y jugar sin preocuparse.

—¿A que te refieres? —Mark tomaba asiento con su niño cacheton y acariciaba sus cabellos castaños.

Por un momento su parlanchin se quedó en silencio.
—Sin Hyunjin no es divertido. —Habló al fin.

Lo entendía. Sunggie y Jinnie habían crecido prácticamente juntos de travesura en travesura. Era lógico que si no se veían para jugar, se aburrirían.

—Los extraño papá. —Incluyo a Yeji en sus comentarios. Tal vez no peleará con ella pero también jugaba con ella junto a sus hermanos.

El ex Tuan sonrió con nostalgia, el también extrañaba a Jaebum y a sus niños.

—Es obvio Sung, el es como tu mejor amigo al fin del caso.

—¿Ah? ¿Yo mejor amigo del perdedor de Hyunjin? —Jisung veía con seriedad e incredulidad a su mayor mientras reía y carcajeaba. —No se si te has dado cuenta de que solo peleamos.

Mark adoraba a su bebito, Jisung. Aunque últimamente Jackson y el lo llamaban Hannie, haciendo referencia al número uno en Coreano, Hana, debido a que el había sido su primer hijo.

—Pero también juegas con el sobre todas sus diferencias. —El menor hizo un puchero a la vez que su padre le decía que se acercara a él. —Los mejores amigos son así, Jinnie y yo charlamos, jugamos y de vez en cuando peleamos, cariño. Los mejores amigos son así... Siempre pelearán pero siempre estarán ahí para el otro.

El hijo de los Wang se hizo bolita en su lugar y suspiro.

—¿Entonces porque Hyunjin ya no va a jugar conmigo?

Pobre Sung, el no tenía nada que ver y también se encontraba sufriendo por el error de Park e Im... No quería ni imaginar como estarían los niños de esos dos...

—Todo estará bien Sunggie. —Y con ello abrazo a su niño esperando que volviera a su extravagante energía...

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No sabían que pasaba a su alrededor.
Tenían miedo. Jamás habían pasado tanto tiempo fuera de casa, mucho menos con su padre lejos de ellos.

Yeeun había pensado que ambos se durmieron hace horas, y dejándolos en el antiguo cuarto de Jaebum, fue a dormir.

Ellos habían dormido en esa cama por años, a veces solos, a veces en compañía de su papá.

Comenzaban a pensar en que todas las amenazas dichas por Jaebum con respecto a sus travesuras se habían vuelto ciertas.

En parte les dolía, pero sabían que ellos tenían culpa... Nunca se habían portado bien, no le habían hecho caso, siempre arruina an todo... Era muy entendible que les abandonará...