Porque cualquier padre quiere ser el hogar de su hijo.
Dos padres solteros.
Dos diferentes situaciones.
Pero son sin duda los mejores para sus retoños.
Y... ¿También los mejores el uno para el otro?
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💎Capítulos cortos
💎Aparición de otros gru...
Desde muy temprano el departamento de los Wang era un santísimo desastre. Bueno, de alguna manera tener tres niños al cuidado de un solo adulto no era prácticamente la idea de limpieza, mucho menos si ese adulto era Mark.
La noche anterior por fin había terminado la maldita columna de su trabajo, pero al costo de pasar en vela media noche.
Estaba hecho mierda.
—¿Creen que si le saltamos encima despierte?
Sung tenía ya rato con esa idea en mente debido al hambre.
—Estas loco. Papá no ha dormido. —Dijo Chae, ella también tenía hambre pero sabía que no podía despertar a su padre.
—Yo no tengo culpa de eso. —Murmuró.
Con los años, para Felix, Jisung y Chaewon, se habían convertido en ese tipo de hermanos con el papel de Demonio y Ángel, respectivamente.
Lix siempre era orillado a hacer cosas por comentarios de sus mayores. El pecoso dejó pelear a ambos mientras se dirigía a la cocina por algún leve aperitivo que los hiciera dejar de molestar.
Sin embargo a medio camino escuchó algo aterrador, sabiendo que el único adulto con llave estaba dormido...
—Chae, Sung. —Su temblorina voz llena de pánico no fue acatada por sus hermanos...
En cámara lenta vio como la cerradura se abría lentamente... Un escalofrío lo recorrió.
¿Un asesino?
¿Un asaltante?
—Chae, Sung. —Dijo un poco más alto. Tal funcionó porque estos dos se quedaron en sumo silencio...
El ver como la puerta se abría los congeló ahí mismo.
Las manos húmedas de Jisung buscaron las de su mellizo y las de su hermana. Tomando refugio entre los tres
El trío Wang cerró sus ojitos con miedo, ilusionados así mismos que si los cerraban con más fuerza menos visibles serían.
Sintieron los pasos infringir en departamento, el trío de niño seguía en silencio deseando no haber sido vistos.
—¡Niños!
—AHHHHHHHHHHH —Gritaron de miedo por el susto que la voz llena de emoción les dio.
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—¿Quieren salir de ahí?
Jaebum no podía decir que se sentía frustrado. No realmente, se sentía más bien enternecido por sus hijos...
Hyunjin y Yeji habían escondido sus maletas y ellos mismos se metieron de unas parecidas, ahora teniendo las reales ellos se negaban a salir de las otras.