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Si bien Ryujin le había animado hasta los cielos al hacerle ver inconscientemente que era su hija de cualquier forma, el asistir a la cena con los Kim lo bajó de su pedestal.

Era nostálgico ver como esos dos se daban el uno al otro en todo lo necesario...

Si Bam necesitaba refuerzos en la cocina, el titan le ayudaba.

Si Yug requeria ayuda al peinar a Yuna, su abogado iba en marcha.

Si uno de los dos quería afecto, el otro sin rechistar se lo otorgaba...

Ese sentimiento asqueroso crecía desde su estómago a su cabeza, como si con cada leve acercamiento a ellos una rama creciese desde su raíz.

No envidiaba el tener a Yugyeom como pareja, ni muerto. Si no el ser el recibidor de todo el afecto de alguien y brindar a ese alguien todo lo que quisiera...

Pero lo peor es que así había sido meses atrás... Sabía como era tener todo ello, más no lidiar a la pérdida de ello...

—¿Te sientes bien? —Preguntó el Tailandes al verlo limpiar los platos.

El se ha ofrecido a tal labor, después de todo la joven pareja ya se había encargado de la grata cena. Ahora en la sala las niñas veían una película con ellos.

—Si, solo estaba cansado.

Bam se sentó sobre la barra al lado del lavavajillas. Jinyoung no se vio bien en la velada.

—Estoy casi seguro de que no lo hacías. —Dijo mirando sus uñas buscando algún defecto. —Eso o se te apetecía más Gyeomie que la comida...

Debio reír. Debió reír al chiste, más no podía sentirse como un hipócrita... Por ello siguió con el jabón y la esponja.

—He hablado con varias personas. Testigos de tu relación con Jisoo.

Su mandíbula se tensaba al escucharlo.

—Todos dicen que se amaban sin igual, que no había pareja más perfecta.

Hijos de hombres sumamente importantes en el mundo de los negocios.

Visuales atractivos.

Inteligentes y caritativos.

—Solo no entiendo una parte.

Su mirada se centro en el moreno, y sus manos dejaban los platos. Todo para escucharle desertar.

—¿Cuál?

—No soy tan tonto e infantil como crees.

Jin enarco su ceja en duda.

—Se que no dejaste a Jaebum por no amarlo. Lo dejaste por ser un cobarde.

Bambam parecía una serpiente. Pequeño, escurridizo e indefenso, pero al abrir su boca un veneno letal te podía aniquilar.

—¿Que quieres decir?

Park temía a las palabras, a las que pudieran ser verdad y difíciles de aceptar.

—Quiero decir que eres tan inseguro, que ni siquiera terminaste de conocer a tu prometida.

—Tu no sab...

—Con lo que he oído de ella puedo asumir, incluso asegurarte que le hubiera dolido más que siguieras aferrandote a su pérdida, a que vieras por lo que anhelas.

Su mente enblanquecio...

—¿Tengo razón, o no?

Fue lo último que menciono el tailandes, para marcharse por donde había entrado...

¿Que era lo que su corazón realmente quería?

- -

No.

No...

—¡No!

Sabia que eso sucedería tarde o temprano.

—Oigan se que no están de acuerdo, pero solo serán unas semanas y después...

—¡Y después te olvidarás de nosotros! —Interrumpió Yeji.

Cada fragmento caía con cada negativa de sus niños.

—Hey, no. No es cierto, princesa. —Intentaba calmarla en su pecho... Pero ella solo lloraba aumentando el desconsuelo.

—¡Te iras y olvidarás de venir por nosotros! ¡Asi como Papá Jin y Ryu! —Contraatacó Hyunjin.

Un golpe en su parte baja hubiera dolido menos.

En sus brazos tomó a los dos niños que entre lágrimas se deshacía... El también había empezado a lagrimear.

No quería dejarlos, pero simplemente no podía hacer todo de una, no podía arriesgarse a que su ahorro no pudiera pagar todo lo que un niño pudiese necesitar en Nueva York.

—Voy a volver. —Calmó a los infantes dovanso sus cabecillas. —Lo haré. Lo prometo...

No el podría vivía si volvia a separarse de ellos...

Ya no más...

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Creerlo era imposible.

Se habían cuidado.

Ella había tomado la maldita pastilla y el ha Iá usado condon para una seguridad mayor.

¿Que mierda se suponía que harían?

Jaebum soñaba con terminar sus estudios antes que nada, y ella también debía terminarlos si quería ser libre...

Eso arruinaba todo.

Pero...

—¿Todo bien ahí adentro?

Su hermana. Irene.

Irene podía ayudarla. Bien tenía dinero en su cuenta, una pequeña ayuda de su hermana le daría un aborto exitoso y bien ocultado.

Eso sería lo que necesitaba.

Eso los ayudaría.

Así sus sueños con Im no morirían.

No...

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