Capítulo 22

66 14 2
                                    

Saga

Seis lunas han pasado desde que Ciro envió a asesinar a mi familia. Seis lunas desde que vivo para mis cuatro hijos sobrevivientes de aquel día. Y seis lunas desde que casi pierdo la vida por salvarnos a Ciro y a mí de ser corneados por un ciervo furioso, teniendo como pago la seguridad de mis hijos. Estuve varios días sin poder desplazarme con normalidad, el lugar en donde me había golpeado el ciervo me impedía moverme y respirar normalmente; por un momento había creído que no iba a sobrevivir, pero no fue así. Pero cuando me recuperé, me di cuenta de que me volví lento, y me cansaba un poco más rápido de lo habitual, y sin contar que siempre me dolía tomar aire.

Cuando mis hijos dejaron de ser amamantados por Rissa, me vi obligado a buscar alimento para alimentarlos como lo hacen las madres pájaro con sus bebés.

Ya han pasado seis lunas, y hoy es el día en el que deben avistar una cacería. Ciro formó un grupo de ocho lobos adultos; Beck, Paul, Sal, Breogan, Mina, Siry, Ann, y yo; aunque no entendía por qué, pero me dejaba tranquilo ya que podría estar al tanto de lo que ocurría allí.

— Chicos...ya es hora... — miré al grupo — ¿en dónde se metió Liv...? — los chicos se miraron entre ellos. — saldré a buscarla, ustedes adelántense...saben en donde es.

En cuanto los cachorros comenzaron a desarrollar su sentido de la orientación, Liv se volvió más curiosa sobre su entorno, más aventurera, y siempre encontraba la forma de escabullirse hacia algún lado. Varias veces tuve ir por ella por el bosque con el corazón en la garganta, con el miedo de que le ocurriera algo malo.

— En donde se ha metido esa niña...no puedo hacer esto por siempre... 

Entre lobos...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora