Capítulo 46

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Tyler

Era una discusión sin sentido, y no podía irme hasta que Liv volviera con Coddy para llevarse a papá de vuelta a la guarida.

— Y bien, Saga... ¿algún último deseo antes de que lo inevitable ocurra?

— Siempre tan directo con ésta clase de cosas...

— Ya me conoces...

— Bien... supongo que hay muchas cosas que me habría gustado que pasaran, y también hay muchas cosas de las que me arrepiento también...

— Adelante viejo amigo... — dijo Tommen ayudándolo a enderezarse.

— Bueno... en lo que llevo de vida... la única cosa que de la que me arrepiento es, el no haber podido proteger a toda mi familia... a Set, Triell, Kara, Jera y... habría preferido encontrar el cuerpo de Tyler que pasar todas estas lunas pensando en que murió en alguna parte de este río sumido por el miedo y pensando que no tenía a nadie para ayudarlo... — papá me miró con ojos tristes y culpables – lamento no haber estado ahí... si no me hubiera rendido de inmediato quizás habría podido hacer algo más...

— Cómo es que tú... — sentí una presión en el pecho. Pánico, sorpresa, intriga. Me confundí.

— Algo me decía que no habías muerto... luego ocurrió el accidente con aquel ciervo y... decidí cuidar a tus hermanos pensando que en cualquier momento moriría, pero duró más tiempo del que creí...

— ¿Por qué no dijiste nada la vez que nos vimos en los límites...? — pregunté con voz lastimosa.

— Porque tenías una nueva vida... con una familia que te adoptó y te protegió sin pensarlo...

— Pero...

— ...Era algo que no pude darte... ni a tí ni a tus hermanos y...

— Eres muy modesto... — le interrumpió Tommen — ... pero te equivocas — papá y yo lo miramos atentamente — haz mantenido a tus hijos con vida a pesar de la falta de una hembra, y son mucho más preparados para sobrevivir por su cuenta que los hijos de tu hermano... y lo sabes...

— Aún son muy jóvenes...

— No más que cuando tú y Ciro perdieron a vuestros padres...

— De qué habla... — pregunté confundido. — ¿aún son jóvenes para qué?, ¿Tommen, papá?

— Tyler, hijo mío... — no dije nada — ya no puedo hacer más por nadie... ni siquiera por mí mismo...

— No comprendo... - dije

— Sí lo haces — dijo Tommen — pero no quieres aceptarlo...

Tenía razón, sabía exactamente lo que estaba pasando, y lo que iba a pasar en un futuro extremadamente cercano.

Apenas había tenido una conversación decente con mi padre, y claro que no iba a aceptar que aquella fuera la última vez que lo hiciéramos. Tenía mucho que decirle, mucho que quería que él me dijera. Me sentí mal por pensar durante todas esas lunas que él nos había abandonado. <<debes decírselo antes de que sea tarde... dile que lo sientes. Anda vamos, no seas un cobarde. Es posible que no vuelva a tener una oportunidad como esta...>>, discutía conmigo mismo.

— Sa... — me interrumpí y sacudí la cabeza – Papá... — él me miró con una expresión que abarcaba varias emociones.

— Qué sucede...

— Yo solo... quería decirte que... — <<eres un cobarde...>>. Inhalé profundo para decirlo todo de una vez – quería pedirte perdón por haber...

— Hijo... — me interrumpió – tú no eres el que debe pedir perdón por nada. Solo eras un cachorro, y estabas asustado por lo que pasó. En tu lugar habría hecho lo mismo; la diferencia es que estuve ahí cuando mis dos padres murieron.

Por alguna razón me sentí pequeño e indefenso. Tanto, que me recosté en frente de papá con la cabeza estirada entre mis patas y casi tocando las suyas. Comenzó a lamerme la cabeza entre las orejas. Aska solía hacer eso cuando era más pequeño, pero no era la misma sensación que sentía con mis verdaderos padres.

— Debí haber vuelto... debí habérselo contado todo a Torel y Aska y....

— Shhh... — me hizo callar — ¿sabes? Tu madre y yo siempre quisimos que nuestros hijos escogieran el camino que quisieran seguir, que hicieran lo que quisieran con sus vidas.

— Pero no sé que es lo que debo hacer ahora... ¿debo quedarme, o volver con ustedes?

— Esa decisión te corresponde solamente a ti... y de nadie más... — dijo en voz baja.

— Pero...

— ¡Papá!

— ¡Papá!

Eran Liv y Coddy. Me dio nervios verlos conmigo en aquella posición, e inconscientemente me levanté sacudiendo mi cabeza.

— ¡Papá!

Un par voces algo conocidas se escucharon detrás de Coddy. Hanna y Henno. << ¡Son Hanna y Henno!>>

— Todos están aquí... — musité. Papá me oyó.

— Recuerdas a tus hermanos... — susurró.

— A todos... — esbocé una sonrisa, y mi vista pareció ponerse borrosa por un momento.

— Solo un poco más... — pude oír musitar a papá, y al verle, él estaba mirando hacia otra parte. Miré en la dirección de sus ojos, pero no vi nada.

Liv corrió junto a papá y pegó su cabeza con la de él. Coddy se frenó delante de él, y luego de un rato clavó la mirada en mí. Hanna y Henno me miraban a ratos con curiosidad ¿cómo podía ser posible que yo recordara a todos, y ninguno se acordara de mí?

Coddy dio un par de pasos hacia mí. Su posición era algo amenazadora.

— Ahora eres tú quien está en nuestro territorio.

Antes de responder, miré a papá, esperando alguna ayuda de su parte. Pero lo único que hizo, fue asentir con la cabeza pacíficamente mientras Liv le lamía el morro.

No lo comprendí al principio, pero luego me hizo un gesto de "mira a tu alrededor", y lo comprendí.

Estaban bien sin mí. Coddy había adoptado el papel de hermano mayor. Y sabía que papá no diría nada a nadie, porque era decisión mía que los demás supieran la verdad, y de nadie más.

— Yo solo...

— Tranquilo muchacho — dijo Tommen cruzándose entre Coddy y yo hasta ponerse a mi lado — ya nos íbamos de todos modos... — una sonrisa irónica se dibujó mostrando sus dientes.

— Solo vinimos al oír los gritos de ayuda de Liv... — Coddy gruñó.

— ¡Coddy! Ya déjalo. — exclamó Liv.

— Bien... — dijo Tommen entonando la voz – es hora de volver...

— Está bien... — miré a papá, quien me miraba con una sonrisa sincera y cálida, parecía orgulloso — adiós...

— Ten una buena vida...

Esas palabras me dolieron. Era una despedida definitiva. No la quería. Pero este momento sería lo último que tendría de él, y aunque sea un recuerdo doloroso, lo atesoraré por siempre.

Entre lobos...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora