Entre lobos...

Capítulo 51

Tyler

El aullido duró hasta que un minúsculo rayo de sol apareció entre los árboles, solo hasta ese entonces, un aullido se había dejado de escuchar.

— Fue todo... — dijo Tommen — ...se ha ido... ¿estás bien?

No respondí. No podía hablar. Bajé la cabeza y desvié la mirada.

Tommen se posó junto a mí con la mirada en dirección opuesta a la mía.

— Ya amaneció y de seguro Torel ya se ha levantado; se preguntará por qué no estás en la guarida y qué fueron todos esos aullidos. Aunque probablemente ya lo sepa. Pero aun así. – comenzó a caminar. Yo no me moví ni dije nada. — será mejor que pienses en lo que harás... — sentí que se detuvo — muy tarde... — retomó la marcha — ...Torel... — dijo pasando junto a él

Los aullidos ya habían cesado. Sentí nervios al percibir que Torel se acercaba hacia mí.

— Sura...

— Murió... — dije interrumpiendo lo que fuera que iba a decir.

— ¿Quién...? — levanté la mirada. Tenía la vista borrosa, y apenas podía hablar.

— ... Mi padre... — Torel se quedó sin habla y me miró asombrado — ...Saga...

Torel parecía no poder hablar. Abría la boca, pero sus palabras estaban atoradas en su garganta.

Su silencio me parecía mucho más tortuoso que si hubiera dicho algo.

— Por favor... — le rogué — ...di algo... lo que sea...

Ya no sabía cómo debía llamarlo ¿Papá o simple Torel? Ahora que ya lo sabía... ¿Qué sería de mí? ¿Qué pasaría con Aska y Lala? ¿Y con Inu? ¿Va a exiliarme del territorio? ¿Podía volver a mi hogar junto a mis hermanos? ¿Pertenecía a algún lugar? ¿O a ninguno? Eran muchas preguntas en mi cabeza. Por primera vez, tenía miedo de pensar en lo que fuera.

— Cómo te llamaban... — preguntó en un tono sombrío.

— Tyler...

— Tyler... — repitió — ¿sabías algo de tu familia cuando llegaste a nosotros?

— ...No...

— Saga... ¿supo que vivías?

— ...Si...

— ...Cuándo...

— Yo... hablé con él antes de que... — no quería decirlo.

— ¿Tus hermanos lo saben?

— No — respondí rápidamente — no pueden saberlo... están bien sin mí. Coddy adoptó el papel que yo ocupaba antes de que todo ocurriera...

La expresión de Torel era extraña, nunca la había visto. ¿Decepción? ¿Duda? ¿Confusión? No eran cosas que a Torel le pasaran por la mente, o al menos no en frente de otros.

— Qué... ¿qué pasará conmigo ahora que lo sabes...? — tenía miedo de respuesta.

— ¿Qué quieres que pase...? — me sorprendió su pregunta. No sabía cómo o qué responderle – todos aquí saben que pertenecías a otra manada. Quizás los más jóvenes aparte de Lala e Inu no lo recuerden. Pero Aska y yo sabíamos que en algún momento nos dirías quienes eran tus verdaderos padres, pero el tiempo pasó y... creímos que lo habías olvidado. Pero veo que nunca lo hiciste.

— Nunca los habría olvidado. Yo... le guardé rencor a mi padre por lo que había pasado... y ahora veo que siempre estuve equivocado. Me habría gustado hablar un poco más con él pero... ya no está.

— El pasado es una lección, aprende de él. El presente, un regalo, atesóralo mientras dure. Y el futuro... una incógnita y depende de lo que hagas en las otras dos... ¿comprendes?

— Creo que sí...

— Ven conmigo...

Lo seguí.