Liv
Ya llevamos 10 entradas de luz en la guarida, es curioso el cómo cada vez que esa curiosa luz entra se siente una calidez muy agradable, era la primera entrada de luz que veía. Ya no solo me valía de mi nariz, ahora podía ver aquellos olores que me gustaban tanto. Pero habían un par de olores que podía sentir, pero que no podía ver, el primero era de quien me daba de comer, de hecho comenzaba a tener hambre; y el segundo era el olor de quien me ponía su nariz fría en mi vientre y me daba pequeños empujones, pero que luego se recostaba junto a mí por un breve momento hasta que se iba. Este último podía sentirlo desde afuera de la guarida, estaba ansiosa de poder verlo, pero no sabía cómo hacer para que entrara.
Algo se acercaba a nosotros, por un momento la guarida se oscureció completamente, y cuando la luz volvió, dentro había alguien enorme con el pelaje blanco, una hembra. Ella me miró fijamente y me mostró una cariñosa sonrisa, a lo que yo le correspondí con otra del mismo modo; de momento solo sabia que ella era la productora de la comida.
La guarida volvió a oscurecerse, pero nadie entró. Era el olor de quien se encontraba afuera, el dueño de la nariz fría que nos miraba desde la entrada con ojos curiosos e impacientes por estar junto a nosotros, junto a su familia.
Ya todo estaba claro de algún modo, la hembra blanca que estaba junto a nosotros y que nos alimentaba era mamá, el macho que se encontraba fuera y que protegía la guarida de la entrada de extraños era papá, y los demás cachorros como yo que eran mucho mas hábiles que yo a la hora de buscar alimento eran mis hermanos.
Al parecer yo había sido la última en abrir los ojos, fui la última en nacer, y siempre era la última en alimentarme. Ya quería saber en qué mas era la última. Aunque me gusta pensar que algún día seré la primera en algo, es posible, eso me gustaría mucho.
Cuando el hambre atacaba a toda la camada era un lío, Tyler quien era mas grande que cualquiera siempre llegaba primero. En segundo lugar ganaba su puesto la inquieta de mi hermana, Kara, quien se tambaleaba al moverse pero se las arreglaba bastante bien cuando se trataba de ganar un buen puesto al momento de comer. Luego llegaban Hanna y Henno, curiosamente eran igual en todo, a la hora de comer llegaban al mismo tiempo, Henno tomaba el pezón de abajo y Hanna el pezón de arriba, o quizás era al revés....luego llegaba Triell, quien se veía más interesado en comer que por su alrededor, no hay mucho que decir de él la verdad. Seguido de Triell llegó Coddy, mi hermano favorito. Yo siempre buscaba la forma de estar junto a él, con él sentía la misma sensación que cuando papá se acercaba en momentos a mí. Yo lo seguí hacia mamá y por primera ves en mas de tres semanas pude ganarme un puesto decente en el desayuno. Pero me falta alguien... ah si, Set, él no es muy allegado a la camada, o a mamá, o a papá; debe sentirse fuera de lugar por ser tan diferente a nosotros, digo... nadie lo molesta ni nada de eso, él solo se aparta de los demás, pero a la hora de comer, se acerca como si fuera un deber, pero no tiene contacto de ningún tipo con ninguno de nosotros.
Por alguna razón mamá gruñía y enseñaba los dientes cada vez que papá intentaba meterse en la guarida, y dejaba de hacerlo cuando retrocedía y volvía recostarse en la entrada, luego de eso acercaba el hocico a nosotros y lamia nuestras cabezas individualmente mientras comíamos.
- Ya quiero poder jugar con ellos... - esa era la voz de papá, fue lo primero que le oí decir - te envidio por estar junto a ellos todo el tiempo... - a pesar de que estaba emocionado e impaciento. Me parecía alguien gracioso y agradable.
- Quieto...aún son muy pequeños...no falta mucho para que deban salir de la guarida... - la voz de mi mamá era reservada, estricta, pero dulce y suave a la vez.
- Tenemos una gran familia...
- Por ellos comenzaremos una nueva manada...son demasiados para la que ya pertenecemos, y me rehúso a que sean rechazados por estos...
- No esperábamos tantos. Querías tanto ser madre...que no renunciarías a ellos por nada del mundo. Eres una madre admirable Jera, mi Jera... - dijo con un tono de voz mas suave.
La forma de hablar de ambos, de algún modo volvía mas cálido el ambiente, el cariño que se tenían el uno con el otro, y el cariño que tenían por nosotros era todo lo que necesitábamos.
Mis hermanos habían acabado de comer y comenzaban a acurrucarse uno sobre otro para caer dormidos.
- Está bien...ya puedes entrar, Saga, pero ten cuidado...
Papá se apresuró a entrar a la guarida, olfateó a todos y a cada uno de nosotros con total emoción, se dirigió hacia mamá y le dijo:
- Ya es hora de que tengan nombre ¿no lo crees?
- Algo me dice que ya tienes nombres en mente... ¿no?
- Bueno... he tenido mucho tiempo para pensar, y solo pensé en eso, haha
- Mhmhmh, bien... te escucho - dijo mamá
Papá comenzó a pasar uno por uno y comenzó a decir los nombres que se le habían ocurrido.
- Este es el primero, se ve muy prometedor, me gusta Tyler. Será un gran lobo.
- Me gusta - dijo mamá
- Estos son idénticos el uno con el otro, me es difícil reconocerlos...pero son un niño y una niña...
- Me gusta Hanna... - dijo mamá
- Entonces el niño se llamará Henno... - volteó a ver a Triell - Es una lástima no haber visto a todos mis hijos nacer...
- Solo hacías lo que debías...si a él le interesa esto, lo entenderá.
- Lo siento...pequeño Triell, te prometo siempre estar ahí para ti. - continuó con los siguientes - wow... tiene un pelaje bastante peculiar...
- Y no has visto sus ojos, es como la perfecta armonía entre nosotros.
- Aun así es extraño, pero esta bien para mi, su nombre será Coddy.
- Ella será Kara - dijo mamá. Papá no se negó y continuó con el siguiente
- Él si que es diferente, llamará mas la atención que Coddy...
- Recuerda que un lobo puede nacer con un pelaje ajeno al de sus padres... - aclaró - más que diferente, es especial... aunque me preocupa su forma de ser, no interactua con sus hermanos y no parece estar muy interesado en su entorno.
- Su nombre será Set - dijo papá y se dirigió a mi.
- Vaya, aun está despierta - bajó su cabeza - asique ya sabes como se llaman tus hermanos y hermanas ¿eh? - el se sentó pensativo mientras movía la cola frenéticamente - ¿sabes...? cuando naciste temimos que no sobrevivieras, pero lo hiciste y eso me hace sentir orgulloso tener hijos que se aferran a la vida con uñas y dientes, mi pequeña estrella... tu nombre...es Liv.
- Es un lindo nombre... ahora déjalos dormir... ya llegará el momento en que puedan pasar tiempo contigo.
- Estoy satisfecho con haber podido nombrar a mis hijos...
- También son míos ¿sabes? - dijo mamá sarcásticamente
- Lo sé... ¿tienes hambre?, te traeré una liebre.
- Eso me sentaría bien...ten cuidado
Papá salió de la guarida, y yo me dormí acurrucada entre mis hermanos.
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Entre lobos...
General FictionSer lobo puede ser complicado si no sigues las reglas de la manada. Sobre todo, si el haber nacido rompió una de ellas. luego de perder a la mitad de su familia, Saga, el padre los cachorros, dará todo de sí mismo para que los lobeznos sobrevivient...