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Esta historia me la pidió Teresa cruel y también me ayudó con la idea.

Un día como todos en Japón Haru se encontraba con miles de pendientes, pues aunque tenía que entregar una nueva historia para la empresa no tenía ni la más remota de idea sobre que.

Frustrada y estresada de su mal día, pues se le cayó café en su ropa, uno de sus zapatos de rompio, tuvo una visita de su ex novio idiota que solo le reclamo por no tener jamás tiempo para el y gritándole que es más fría que el hielo.

En fin salió a la tienda para comprar un ramen, es todo lo que si presupuesto le alcanzaba.

Salió bien feliz por qué al menos comería algo en todo el día, hasta que escuchó unos gritos a lo lejos.

Volteo para ver qué es lo que venía hacia ella pero no contó con un chico corriendo como loco con alguna cosa en su mano tirándole de  paso su ramen.

La Haru vio su pobre comida tirada en el suelo lamentándose. El joven la miró y por unos momentos medito algo, asi la  mascada Gucci.

—¡Oye qué te crees!.— le dijo al ver que le tomo la mano y comenzó a caminar rápido a su lado.

—Shh, esa tipa no merecía este bebé.— tocó la mascada con amor.— Vestía un horrible vestido con medias fosforescentes, ¿A quien se le ocurre eso?.— dijo indignado.

—Oye eso a mí me viene valiendo tres hectáreas de terreno, deja mi mano.— trato de safarse.

—Nop, tú te vienes conmigo quieras o no.— y la cargo como un costal de papas para ocultarse en algún lugar.

—Al menos puedes pagarme la comida ¿no crees?.— se sentó en el piso.

La ignoro escuchado como la otra mujer se detuvo cerca del lugar.

—¡Solo quiero mi mascada! ¡Extraño guapo!.— grito para seguir su camino de búsqueda.

—uff se fue.

—Bueno ya me voy.— Haru se levantó y comenzó a caminar, el otro joven solo la seguia.— ¿qué acaso no tienes un hogar?.

—Si pero no quiero irme por allá.— señaló al lado contrario.

La chica suspiro fastidiada, solo le faltaba otro acosador en su vida.

—Lo siento, tire tu ramen por no ver por dónde corría.— volvió hablar apenado.

—Da igual no tengo hambre.

—Te invito de comer.— le dijo con una sonrisa.

Haru no lo había visto bien desde que se encontraron por lo que al mirarle los ojos supo que estaba viendo a un chico demaciado alto, sintió un golpe a su altura.

—Ok.

Después de un rato y en un restaurante carísimo, más que el sueldo de la mencionada comió algo y sonrió satisfecha de haber recibido una disculpa así de grande.

—Mi nombre es Kim Taehyung.— sonrió el chico hablando con su invitada.

—Soy Min Haru.— respondió amable.

Y así comenzó una bella y acosadora historia de amor por parte del Tejiun quien la siguió hasta su trabajo.


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:'3 qué suerte tiene la Min Haru

¡Eres MiO! ♡HopeGa♡Donde viven las historias. Descúbrelo ahora