Punto de vista de Leia.
Cerré el archivo intentando contener las lágrimas. Sabía que había algo extraño, pero no me esperaba algo así de frío y de cruel.
Narcotraficantes.
Mis padres era narcotraficantes.
Aquello sonaba como una completa locura, algo improbable que solo pasaba en películas o en historias de Wattpad. Dejé el archivo donde estaba y salí de allí tan rápido como pude. Cuando llegué a mi habitación, me permití llorar todo lo que quise.
Me sentía atrapada.
Yo, una chica común y corriente que nunca había hecho nada malo en su vida, estaba viviendo con dos narcotraficantes. Y si ya habían matado gente? Qué clase de otras cosas horribles podían haber hecho?
Tomé mi teléfono de inmediato y llamé a Nathan para encontrar auxilio. Contestó al tercer timbre.
-Leia?- preguntó con voz dormilona.
-Nathan...- susurré aún llorando. Me sentía en una película de terror.
Al escucharme, se escandalizó inmediatamente.
-Qué paso?! Estás bien? Ya voy para allá...-
-Estoy bien.-le aseguré.-Es solo que acabo de enterarme de algo-
Decidí entonces explicarle con detalles lo que había descubierto. Cuando terminé, el silencio inundó la línea.
Ese silencio, me dio a entender algo más.
-Lo sabías-afirmé cerrando los ojos con fuerza.
-Yo...- intentó justificarse.
Todo cobraba sentido. Cuando había conocido a Nathan, Ziel le había convencido de que trabajara con ella para que fuese mi amigo e investigara sobre mí y así confirmar que era yo, la hija que ella buscaba.
Nathan, era su complice.
-Cariño, las cosas no son como crees- me aseguró.
-Ah no?- respondí irónicamente. Me sentía traicionada.
En mi mente se escuchó la voz de Ashton. Él me había dicho que Nathan tenía algo que ver con una banda, lo que nunca imaginé es que esa banda, era la de mis padres biológicos.
-Escucha, sé que las cosas se ven mal, pero no hagas ninguna locura-
-Porqué no me lo dijiste?- pregunté de inmediato.
-Ziel me pidió guardar el secreto. Tenía miedo que esto influenciara tu decisión de venir a Nueva York.-
-Por supuesto que influencia mi decisión! Quiero volver a Italia-
-No, Leia, escúchame. Pasaré a recogerte e y hablaremos de estos.-
-No puedo creer que me ocultaras algo como esto, Nathan. Se supone que no hay secretos entre nosotros- respondí decepcionada.
-No tenía otra opción-
-Si, si la tenías, excepto que no me elegiste a mí-
Una vez dicho eso, colgué el teléfono bruscamente. Un tornado de enojo, tristeza y decepción inundaba mi cabeza. Mi cuento de hadas había desaparecido, y con él, mi príncipe azul.
Respiré profundamente intentando calmarme. Debía haber una explicación lógica para todo esto.
Pero cuál?
Al pasar los minutos, el cansancio me venció, y mis ojos se cerraron aún con lágrimas en ellos.
Punto de vista de Nathan.
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Leia
Teen Fiction¿Leia? Una chica tímida y amable, con una vida normal, padres normales, y amigos normales. Pero todas las normalidades de acaban cuando Nathan Fisher llega a su vida. ¿Qué harías si descubrieras que toda tu vida es una mentira? Historia enlazada...