A Demon's Tale Forty-fourth

361 51 2
                                    


Ahora que Drake estaba pronto a hacer su debut en las calles como Robin, Kyo tenía una nueva misión, hacer al chico maravilla intocable.

Originalmente pensó que la protección del murciélago bastaría para mantener a Robin vivo, después de todo el caballero de la noche se las arreglaba bien por su cuenta sin su ayuda, así que cuando Jason tomó el manto, Kyo pensó que estaría bien sin que interviniera, ahora, después de lo sucedido Kyo vio su error y no planeaba cometerlo dos veces, así que si, su prioridad era hacer a Robin una de sus reglas y tenía un plan de como hacer eso pasar.

Lo primero en su plan era hacer que el mensaje llegara a la mayor cantidad de oídos posibles, pero sin que lo pudieran conectar a ella — No quería que Drake pensara que no le tenía fe o meterse en discusiones con Bruce cuando se estaban llevando tan bien — lo que significaba que tenía que hacer que el mensaje lo esparciera alguien más, alguien con la suficiente autoridad sobre la ciudad como para que la mayoría de los criminales lo pensara dos veces antes de mirar al chico maravillo pensado causarle daño.

— Ya conseguí lo que me pediste. — Dijo Ivy a su lado entregándole un pedazo de papel que ella tomó para verlo de forma apreciativa antes de pasárselo a Tetsuya. – ¿Estas segura de que no quieres la ayuda de Fon para esto? — Pregunto la pelirroja viendo a Tetsuya quemar el papel.

— No lo necesito. — Contestó bajandose de hombros mientras terminaba su tarea de cálculo, algo realmente horrible en su opinión. — Además, será una noche de chicas. — Añadió con una leve sonrisa y la pelirroja Rio.

— Le diré a Harley, estará feliz de salir un rato sin supervision. — Respondió saliendo de la habitación dejando a la japonesa haciendo su tarea en compañía de su fiel acompañante.

Muy bien la parte uno de su plan iba bien, pero aún necesitaba encargarse de su discurso, después de todo su Madre siempre le dijo que era importante tanto el mensaje como la forma en que lo entregabas.

———

— ¿Estas segura que no quieres que alguien más las acompañe? — Pregunto Bruce viendo a Kyo tomar su cartera de las manos de Tetsuya mientras Ivy la esperaba en la puerta.

— ¡Lo siento Brucie! ¡Hoy es una noche de chicas! — Le abrazo por la espalda la psiquiatra antes de soltarlo para arrastrar a las demás a la salida donde un convertible rojo las esperaba.

— Que tengan una buena noche. — Les deseo Fon mostrando las llaves, las cuales Harley quizo tomar pero este las levanto en lo alto donde no pudiera tomarlas.

— Mhmm. — Asintió su sobrina no estando segura si sabía o no que iban a hacer esta noche, pero decidiendo que no importaba.

— Diviértanse. — Lanzó las llaves a Pamela que ya estaba sentada en el asiento del conductor.

— ¡Tan cruel! ¡Yo conduzco de vuelta! — Exclamó la rubia saltando al asiento trasero del auto mientras Kyo se subía al de copiloto con los brazos cruzados. — ¡Chaito! —Se despidió al mismo tiempo que la pelirroja pisaba el acelerador y el auto se movia hacia su destino.

El viaje fue pasado entre los interminables cantos de Harley de la música que estaba en la radio y las amenazas de Ivy de regresar si no se mantenía en su asiento de una buena vez, en todo no se fue un viaje aburrido.

Al llegar uno de los clubes más famosos de Gótica las recibió, Kyo consideró disfrazarse para aparentar un poco... Pero este club veía todo tipo de cosas y nunca llegaban a ver la luz del día — o de la computadora en la baticueva — por lo que no se molesto en esconder su identidad.

En la puerta había una gran fila que se disperso en el momento en que las tres chicas comenzaron a caminar hacia la puerta, el guardia tan solo tembló antes de abrirles la puerta al establecimiento.

The Demon of Gotham Donde viven las historias. Descúbrelo ahora