Dream [YongMark] (TaeYongxMark) NCT

Capítulo 52

—Come algo, estás muy delgado — TaeYong intercambió su plato con el de TaeIl.

Como había esperado, el mayor había perdido una ensalada roja con algo de lechuga y un agua, así que él había pedido algo más elaborado para dárselo, sabiendo que si insistía mucho, TaeIl cedería y terminaría comiendo lo que él había ordenado. No era ciego, notaba lo extremistamente delgado que estaba TaeIl de un modo que poco tenía que ver con ser idols.

—Para eso pedí la carne. Sabes que no podemos comer mucha, así que aprovecha — TaeYong introdujo un trozo de remolacha en su boca, masticando lentamente.

Al principio, había creído que incluso tendría que darle de comer en la boca con los palillos al ver que TaeIl apenas y tocaba la carne, pero suponía que estaba demasiado buena, ya que el interés en comerla aumentó.

—No quiero que pienses que te estoy obligando — Mascó una hoja de lechuga y tragó —, la verdad es que quiero ayudarte. Por lo visto, llevas cargando con eso tú solo.

—Vale, eso suena a lavado cerebral.

—¿Y está funcionando?

—Algo — TaeIl se encogió de hombros —, pero tendrás que hacer un mejor intento.

La persuasión era la mejor técnica que TaeYong podía emplear para dar con lo que necesitaba. Principalmente, necesitaba entrar en la mente de TaeIl y tirar abajo las barreras que impedían que pudiera leerlo, porque, bien, él tampoco era un vidente - y eso ni siquiera existía. Así que en lugar de ir directo al nido del asunto, comenzó a hablar de otras cosas, aligerando el ambiente.

—Espera, me llegó un mensaje... — TaeIl dejó sus palillos en la mesa y sacó su celular, haciendo una mueca con sus labios —. DongYoung dice que MinHyung viene para acá...

—¿MinHyung?

TaeYong se puso nervioso, por lo que trató de ocultarlo tan bien como podía con su experiencia como idol. Algo en él le decía que si TaeIl no había hablado estando ellos dos solos, mucho menos lo haría si alguien más estaba ahí con ellos. Y el apartamento no quedaba tan lejos del café, así que Mark no tardaría mucho en llegar.

—Es hora de que me cuentes qué pasa.

—¿Qué-

—No, TaeIl, te juro que si le sigues dando vueltas al asunto yo mismo voy a descubrirlo.

—¡No puedo decirlo! No voy a arriesgar la vida de Johnny para que tú lo sepas.

Frotando sus sienes con la punta de sus dedos, TaeYong contó hasta diez lentamente. No tenía tiempo para esto, simplemente no.

—Si no me dices, no puedo ayudarte.

—Tampoco te estoy pidiendo ayuda.

—Entonces lo descubriré yo, y luego lo sabrá Johnny, y luego todo el grupo, ¿te parece? Bien — TaeYong dejó sus palillos en la mesa junto con la ensalada a medio comer y se levantó de su asiento, alertando a TaeIl.

—¡Siéntate! Te diré, pero tienes que jurarme por Mark que vas a tener la boca cerrada.

TaeYong asintió, manteniendo su rostro neutro, y volvió a sentarse, esperando que TaeIl dejara de beber el refresco de uva con el pitillo. No tenía tiempo.

—Estoy esperando.

—Yuta es un hijo de puta, no puedes confiar en él, no lo hagas.

Habían dos cosas positivas y una negativa en eso.

La primera era que por fin TaeIl estaba contándole lo que había estado sucediendo en medio de su despiste como líder. No era algo agradable, pero en realidad esperaba algo así, por lo que no fue mucha sorpresa escuchar eso ni que el nombre de Yuta estuviese en la oración. Lo segundo era que sus sospechas eran ciertas, algo no estaba bien dentro de los dormitorios como aparentaba estarlo.