18 - Encontrar

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—Gracias profesor. —Dijo el zorro cuando escucho que Fhill les había dado la entrada aunque fuera uno de los últimos formados.

—Jaime por favor, no estés de escándaloso hoy. —le dijo riendo su ya gran amigo Uriel.

Un perro goldador bastante apuesto que conoció en el coliseo.

Uriel en repetidas ocasiones acompañaba como segunda guitarra a Jaime cuándo se prestaba a tocar algunas de sus composiciones o reemplazaba artistas que tenían que abrir algún show estelar y que no llegaban.

Aquel goldador que tocó junto a odio y deseo cuando Luis no llegó.

—No es estar de escandaloso, simplemente le estoy agradeciendo al profesor. —se justifico riendo al mismo tiempo que avanzaba pues algunos de sus compañeros ya habían empezado a entrar.

—Ya cállate o el profesor te va a regañar. —Dijo negando y riendo.

—Si, si, lo que tú digas. —Jaime mantenía su mochila en su mano.

—Se enumeraron las sillas para que no tengan confusión acerca de cuál es su nueva banca, así que permanecerán sentados como estaban en el otro salón. —Aclaró el profesor Fhill.

El zorro volteó la mirada para tratar de ubicar dónde es que Uriel y el se sentarían, pero en vez de eso, se encontró con alguien que no quería volver a ver en su vida.

Jaime se detuvo.

Fue tanta su impresión que incluso su mochila cayó el suelo pues la había soltado.

Inmediatamente el zorro recordó lo que le había dicho a Esther.

Y claramente, sus rezos para desear que no fuera ese lobo qué tantas lágrimas le provocó, habían sido en vano.

De parte de lobo, su reacción no era diferente aunque sus razones si lo fueran.

—Zorro avanza. —Dijo un poco incómodo el goldador. —porque de repente te detienes y pones una expresión de... —Ahí fue cuando Uriel también se percató de la presencia de él lobo. —¿Luis?.

El nombrado sacudió su cabeza. —¿Uriel?.

—¡Que grande sorpresa!. —el perro levanto la mochila de Jaime y se acercó hasta dónde se encontraba el lobo.

—Yo... Yo también opino lo mismo. —era difícil reaccionar para Luis en esos momentos.

—Cuentame, ¿Qué haces aquí?.

—Voy a convertirme en un gran productor. —El lobo pidió a Uriel que se acercara.

Acción que obedeció perfectamente.

—Me están pagando para completar este curso. —Susurro Luis.

El perro río. —A mí también me están pagando. —susurro de igual forma.

—Bueno muchachos, es hora de que todos se sienten y guarden silencio, voy a dar indicaciones. —Informó el gato.

Uriel asintió y dirigió rápidamente su mirada a el lobo. —Después seguimos platicando... ¿Jaime?.

El zorro entonces levantó la mano sin voltear pues ya había ubicado la banca que les tocaba.

El goldador agradeció sentándose al lado del zorro.

Y ahí estaban.

Una vez más, El lobo y el zorro se volvían a encontrar.

Los Imanes. (Furry/Yaoi)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora