Los Imanes. (Furry/Yaoi)

35 - Ceder

El lobo frunció el ceño. -Sí, por supuesto yo... pensé que era obvio.

-¿Que?. -Pregunto el zorro sin quitarle la mirada a su libreta que tenía en frente.

-ni siquiera estoy aquí porque realmente quiera aprender producción musical... Estoy aquí porque la banda me mandó. -Confeso. -Espero que puedas estar tranquilo con el hecho de que lo único que quiero es completar el curso y largarme nuevamente de aquí. -Aclaro Luis algo dudoso de las palabras que había escogido.

Los nervios no lo dejaban aclararse.

El zorro suspiro y luego asintió.

-Pues entonces me parece bien. igual espero que cualquier plática que tengamos sea solamente enfocado al trabajo, no quiero responderte de una forma grosera.

El lobo asintió. -Y bueno, entonces qué canción será la que elegiremos.

Jaime comenzó a pensar.

un sinfín de sus canciones favoritas le vinieron a la mente.

Le agradaba mucho la idea de exponer sobre canciones que a él le gustaban, pero después recordó que la decisión también la tenía que tomar Luis.

Pasaron algunos minutos.

El nerviosismo del lobo iba en aumento.

No sabía si Jaime aún estaba pensando en su opción o si simplemente había decidido ignorarlo.

No estaba seguro de volver a repetir la pregunta porque no quería que el ambiente se volviera aún más incómodo, aunque ahora que lo pensaba, no sabía si eso era posible.

-Em... Dije que...

-Creo que en estos momentos no puedo tomar una decisión. -Termino por responder Jaime. -Tengo que analizar muchas canciones, ver si cumplen con lo que estableció Fhill y que tan buenas son. ¿Por qué no mejor lo decido en casa y te mando un mensaje para que la escuches?.

Con la pregunta, al lobo le quedó más que claro que él no tendría voto para elegir la canción, pero eso no significaba un problema, él quería llevar las cosas en paz y si eso significaba ceder, lo haría.

Justo como lo había aprendido en su terapia.

—Me parece bien. —Respondió el lobo. —Pero... Bueno...

—¿Ocurre un problema? —Pregunto el zorro confundido.

—Es que... —Recordo Luis un poco avergonzado. —Tu... Me bloqueaste. —Rio nervioso.

—Cierto. —Respondió Jaime indiferente. —¿Entonces cuál es tu cuenta personal?

Esa pregunta sorprendió demasiado al lobo.

—¿Por qué no mejor... Simplemente me desbloqueas y...

—Lo siento pero no estoy muy cómodo con las cuentas falsas. —Explico mientras jugaba con su lápiz.

Era increíble como unas simples palabras podían tener tanta repercusión.

¿Pero como discutir eso?.

El tenía un punto, y ahora cada que estuviera en desacuerdo con una idea, se recordaría que tenía que ceder.