Pov Beatriz:
Abrí los ojos a eso de las nueve de la mañana. Me quedé extrañada al no despertar en mi cama pero luego me acordé de lo que había pasado y suspiré resignada. Me percaté de que estaba sonando en la radio "Bad Day" de Daniel Powter. Me hice un moño, me puse encima del pijama un sudadera y bajé.
Dustin - Siento si te he despertado - dijo apagando la radio.
- No pasa nada ¿Quieres que te haga el desayuno?
Dustin. No por Dios, tu eres la invitada.
- Que menos - Al final Dustin accedió y me puse a hacerle el desayuno. Preparé tostadas, chocolate y unos croassants. Antes de que pudiera darle mi primer bocado al croassant me llamó Su - ¿Si?
Su - ¿Cómo que si?
- ¿Y qué quieres que te diga?
Su - No se, por ejemplo... ¡ah si! ¿Por qué coño te has ido?
- Su, ya dejé una carta ¿No te vale?
Su - Me jode mucho que te vayas por su culpa.
- A ver no confundamos las cosas. Yo no me voy por su culpa, sólo que ha habido una serie de circunstancias y lo de James me dio un empujón para que lo hiciera
Su - ¡Pero no es justo! ¿No te das cuenta?
- No, lo que no es justo es que yo intentara explicarme bien y con tranquilidad y el orgulloso de James no me dejara tirando tu puerta abajo ¿Quién ha sido el injusto? - Escuché susurros por el teléfono. Estaba hablando con otra persona.
Su - Vale ¿Pero de verdad te compensa?
- Hombre, no se. En estos últimos meses me ha pasado de todo. Creo que necesito un respiro.
Su - Pues tenlo, pero aquí.
- Su te tengo que colgar ¿Vale? Un beso - Colgué porque sabía que como siguiera hablando con ella me iba hacer cambiar de opinión. Estuve leyendo uno de los muchos libros que tenía Dustin pero me empecé a encontrar mal y decidí ponerme el termómetro. Volvía a tener fiebre. Ya no sabía si era por el resfriado o por la herida, así que con mucho cuidado y sudadera incluida me metí en la cama tiritando de frío y antes de dormirme escuché como Dustin llegaba, pero no lo hacía solo.