Capítulo 107 - Mesa Redonda del Otro Mundo (parte 02)

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“Ahh, No, no es nada. Simplemente recordé algo triste…” (Mitsuha)

De alguna manera logré engañarlos y continué con la plática.

Y tras mirar mi expresión, la cual parecía molesta, todos aprovecharon para tratar de invitarme a su país para animarme.

Tal vez ellos pensaron que algo me sucedió en mi reino de origen.

“En cualquier caso, sería problemático viajar a donde todos me conozcan, yo prefiero visitar un sitio más libremente.

Por eso preferiría visitar varias ciudades como una chica ordinaria. Así que, si no puedo moverme libremente, no tiene caso el venir a este mundo…” (Mitsuha)

“N-no, no tiene de qué preocuparse, todo lo relacionado con Nanoha-sama, ¡Sería estrictamente confidencial!” (diplomático A)

Los representantes de las naciones se agitaron ante mis palabras. Bueno, ellos piensan que a la larga ellos podrán obtener grandes ganancias de mí y, ya que ellos no son del tipo que cuentan los pollitos antes de que salgan del huevo, por supuesto que dudarían.

Con esto, yo puedo esperar cierto grado de secrecía, esto en caso de que sea descuidada.

Tras de eso, hablamos sobre muchas cosas más, aunque no fue nada como tratados o compromisos. Yo ya les he explicado que yo no tengo la autoridad para hacer tratados entre naciones, me rehusó a actuar como intermediaria y desde la última vez, tampoco actuaría como taxi. Por tanto, no hay mucho que puedan solicitarme. A lo más, lo que abundan son las solicitudes por <minerales, plantas, animales y cosas así> aún así, no se las daré tan fácilmente, después de todo esa es mi carta fuerte.

Cada nación insistió en que los visitará, fuera como fuera. Aun así, yo no soy tan ingenua como para aceptar sin miramientos, ¿saben?

No hay forma que pueda llevar a un sitio peligroso a Sabine-chan y Colette-chan. Ni ir sola, mientras las dejo atrás.

Y cuando pensé que estaba por terminar…

“Princesa Sacerdotisa del Templo del Trueno-sama, por favor, visite nuestra nación…” (diplomático asiático)

“Debía de haber quedado, claro que de momento no aceptaré las invitaciones.” (Mitsuha)

El representante de cierta nación asiática, trajo de nuevo el tema, esto, aunque yo ya había explicado por qué no pensaba aceptar.

“¡Como se esperaba! Usted es una ciudadana de nuestra nación, ¡¿no es así?! Por eso mismo, ¡Usted tiene el deber de seguir nuestras instrucciones!” (diplomático asiático)

…nuevamente, alguien dijo algo completamente irracional. ¡¿Es que quieres armar un gran alboroto?!

“¡¿Haa?! ¿Pero qué demonios está diciendo…?” (Mitsuha)

No, no solo yo, sino que los otros representantes parecían sorprendidos.

Aún así, este representante ni siquiera pestaño o cambio su expresión.

“Sus ojos, su cabello y el color de su piel. ¡Todas esas son características de la gente de nuestra nación! Además, usted respondió sin cuidado la pregunta que le hice en nuestro idioma materno, esto solo hace un momento.

¡Eso demuestra que usted es ciudadana de nuestra nación!” (diplomático asiático)

Haa…

“Él afirma eso, pero ¿Qué creen ustedes?” (Mitsuha)

“Es algo risible. No ve lo sorprendente que es usted.” (diplomático nación del medio este)

MitsuhaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora