The Belly Dancer ❀ KookTae

044

—Abuela, que pasaría... ¿Qué pasaría si Jin sabe la verdad? ¿puedes ver lo que el destino le tiene preparado para él? —JungKook intentó recargarse sobre el árbol, pero su espalda aún no había sanado por completo, la última semana había pasado demasiado lenta.

Su abuela sonrió con tristeza, tomó la mano fuerte y grande de su nieto entre las suyas, pequeñas y arrugadas. —No es así como funciona cariño. —Comenzó a decir. —No puedo verlo porque quiero, se presentan como epifanías... y todo es tan borroso.

JungKook pensó un momento sus palabras, hasta que recordó algo. —Usted me dijo aquella vez, que la persona que amaba no era lo que realmente mostraba... que yo debía abrir los ojos y buscar a la persona correcta. —Su abuela asintió, recordando también aquel día, JungKook se había enojado tanto que no había escuchado todo lo que su abuela intentó decirle, simplemente había huido. —¿Usted lo vio... lo vio a él? —Preguntó inseguro.

La vieja mujer negó con la cabeza. —No veo a las personas, veo lo que esconden y lo que quieren realmente.

—No entiendo, abuela.

La mujer se acomodó en su lugar y dejó ir la mano de su nieto, pensó brevemente y explicó. —Yo nunca vi a TaeHyung, no al menos su rostro, pero vi a alguien lastimado, lleno de cicatrices, vi un corazón roto y temeroso...

—Pero puede ser cualquier persona ¿no? No es necesariamente él. —Intentó aclarar su mente, aún muy confundido por sus sentimientos.

—Podría ser cualquiera, sin embargo, tú JungKook, sólo pensaste en él o ella cuando se vestía de mujer... ¿no es así? —JungKook asintió en silencio, su abuela agregó al verlo tan pensativo. —JungKook, tú decidiste que debería ser él, tus sentimientos te guiaron a aquel niño.

Su nieto bufó por lo bajo al no entender por completo sus palabras. —También mencionó que... que si lo encontraba sería el hombre más feliz y poderoso del mundo, sería la persona que me ayudaría a tomar las decisiones correctas. —Recordó en voz alta, cambió su peso de un pie a otro sintiendo dolor cuando se apoyaba contra el árbol.

—Recuerdo lo que dije. —Dijo su abuela seriamente.

—Entonces ¿él me ayudará? ¿él podrá poner orden en todo este caos, abuela? —Preguntó con desespero refiriéndose a sus sentimientos.

La vieja mujer sonrió cambiando su semblante, mostrándose amable ante su nieto. —No, no es así. La persona que ames te dará la valentía que necesites para tomar las decisiones correctas. Hijo, sé que, si tienes a la persona correcta a tu lado, te impulsará a hacer cosas que nunca antes hubieses imaginado.

Sin embargo, JungKook no logró comprender sus palabras, cansado y adolorido decidió volver a mencionar a su primo mayor. —Quiero decirle la verdad.

—¿A Jin? —Preguntó su abuela, él asintió en silencio. —¿Tú piensas que es lo correcto que él sepa la verdad?

JungKook aceptó y la miró con ojos fríos. —Si, quiero que él sepa la verdad. Mis padres le robaron la corona y lo arrebataron de sus padres, lo mínimo que debo hacer es que él se entere de la verdad.

—¿Y por qué no le dices entonces? —Cuestionó ella con calma.

—No lo sé... yo creo que tengo miedo de su reacción. —Confesó en voz baja sin mirar a su abuela.

—Sé que tienes decidido irte, en dos días un grupo de soldados irá a hacer frente a la frontera. —Habló con calma. —Pero pienso que debes cerrar algunos círculos antes que te vayas.

JungKook alzó la mirada y su abuela observó un atisbo de temor en sus ojos, pero que él se alejó de inmediato. —¿Me ha visto regresar, abuela? —Su voz no tembló al preguntar ni cuando ella negó con la cabeza. Él alzó el mentón y miró hacia la nada. —Entonces él debe saber antes que yo me vaya.