EL MISTERIO DEL DIARIO SECRETO (Draco Malfoy)

XXXIV

CAPITULO 34: BELLATRIX LASTRANGE

—¡Concéntrese Saint-Jean!

—¡Basta! ¡No tiene ningún derecho a ver todo eso!—grité desesperada.

—Ya es suficiente, déjela en paz—ordenó Harry acercándose a mi pata ayudarme a mantener la postura.

El cuerpo me dolía, la cabeza me daba fuertes puntadas como si fueran cuchillazos y solamente tenía ganas de llorar de la frustración. Dumbledore había asignado en primer lugar a Snape para que le diera clases de oculmancia a Harry con la intención de que el azabache pueda evitar la influencia de Voldemort. Después de que McGonagall le comentara de las borrosas visiones y voces que había tenido y sentido en la luna llena, también me ordenaron tomar las clases particulares con Harry.

Sin dudas era un martirio.

—Por favor Saint-Jean, no me interesa lo que haga usted con el señor Malfoy—dijo bruscamente Snape.

Harry me miró horrorizado esperando una respuesta pero negué con la cabeza dándole a entender que no iba a hablar de eso.

Ninguno de los dos podíamos dominar las clases de oculmancia. Harry me había comentado que estaba un poco inestable emocionalmente debido a que se había besado con Cho Chang, Umbridge lo sometía a castigos que básicamente eran una tortura y tenía visiones sobre Voldemort.

Por otro lado, yo no entendía porque no podía ocultarle a Snape mis recuerdos pero este no dejaba de insistir en que era peligroso que alguien supiera lo que yo vi.

Las clases finalmente terminaron y me sentía agotada y hambrienta. Junto a Harry nos fuimos al comedor para encontrar a chicos de todas las casas con expresiones de miedo y confusión.

—¿Que ocurre?—preguntó el azabache.

Neville levantó su mirada del diario y sus ojos solamente reflejaban pánico.

—Míralo por ti mismo—respondió Her y le pasó el periódico.

Me acerque a leer junto a Harry y mi rostro palideció al ver la portada.

EL PROFETA

"Hemos confirmado que diez prisioneros de alta seguridad de Azkaban escaparon a primeras horas de la noche de ayer. El primer ministro ha sido advertido del peligro y tenemos la leve sospecha de que la fuga fue planeada por un hombre que tiene experiencia en escapar de Azkaban. El conocido asesino en masa Sirius Black, primo de la fugitiva Bellatrix Lestrange"

Bellatrix Lestrange...

—Harry...

Todos volteamos encontrando a Seamus quien se comenzó a disculpar con Harry por no creer en lo que él decía a principios de año sobre el regreso de quien-tu-sabes.

—Bellatrix Lestrange...—murmuré recordando. Su nombre resonó en mi cabeza y dos segundos después uní los cabos sueltos.

—¿Que hay con ella?—Luna me habló y despegué la vista del periódico.

—Su nombre me suena simplemente—respondí evitando hablar de mis visiones.

Simplemente no podía.

—Seguramente, es una fiel seguidora de quien-tu-sabes—dijo Fred.

—Y tía de Malfoy, dicen que está totalmente loca—agregó George.

Eso explica muchas cosas.

Busqué en el comedor al rubio con la mirada hasta que lo vi desayunando animadamente con sus amigos. Los dos gorilas de Crabbe y Goyle.