EL MISTERIO DEL DIARIO SECRETO (Draco Malfoy)

XXXIX

CAPITULO 39: LO PROMETO

Después de todo lo ocurrido unos días atrás, la tensión era palpable en el mundo mágico.

Harry y Dumbledore fueron reivindicados ante el mundo mágico, mientras Dumbledore por su parte es reinstituido a su cargo como Director de Hogwarts

Por otro lado la comunidad mágica también exige la inmediata renuncia de Conrnelius Fudge por su cobardía, mientras que Umbridge por su parte es desterrada del castillo y suspendida de su cargo por el Ministerio de Magia. Además de ello se le abre una investigación en su contra por sus constantes abusos de autoridad realizados en Hogwarts.

También en una publicación del diario El Profeta se revela públicamente el regreso de Voldemort, ya nadie negaba los dichos de Harry.

Se anunció además, que durante el ataque al Ministerio lograron arrestar a varios mortífagos, entre ellos a Lucius Malfoy.

En mi rostro se formó una expresión de asombro al leer las noticias que recitaba El profeta.

Bajé el periódico lentamente dejándolo sobre la mesa de madera. Miré a Luna y Abby quienes estaban igual de sorprendidas que yo.

—Lo bueno es que Umbridge ha sido desterrada del castillo—habló Luna en un intento de que el silencio y la tensión en la mesa desaparecieran.

—Si, eso es una buena noticia—la apoyó Abby.

Solté un gran suspiro asimilando todo, era una locura.

—Todavía no puedo creer lo que pasó...ya saben, hace unos días—dije haciendo referencia al día que fuimos al ministerio.

—Yo tampoco, sigo asimilando todo—murmuró Abby.

—Voldemort ya demostró lo peligroso que puede ser, él y los mortífagos—dije finalmente.

Luna me miró horrorizada al escuchar su nombre. Abby simplemente se limitó tomó un gran trago de jugo.

Suspiré pesadamente.

—Sé que no hay que decir su nombre pero al muy maldito no le interesa, él quiere asesinar a todos sin importar nada más—solté resignada ante la incomodidad en la mesa.

Luna llevó sus manos a su rostro en un intento de despejar su cabeza.

—Esto es horrible...—murmuró.

Unos chicos de Slytherin pasaron por donde estábamos sentadas y sus palabras llegaron a nuestros oídos.

—Escuché que el padre de Draco está en Azkaban.

—Si, es cierto. Está junto a otros mortífagos.

—Su familia perdió todo su honor, son unos fracasados. Draco no quiere hablar con nadie y se comporta como un imbécil desde que comenzó a salir con esa, la brujita celestina... ¿Quien se cree que es? Es sólo una perra sufrida.

Mi cuerpo se tensó al escuchar las últimas palabras... No tenía idea de como todos sabían que yo estaba saliendo con Draco. Lo peor es que se tomaban la molestia de hablar de nosotros.