EL MISTERIO DEL DIARIO SECRETO (Draco Malfoy)

XVIII

CAPITULO 18: PRIMERA PRUEBA Y EL DIARIO

Hoy era la primera prueba del torneo, caminé junto a Hermione a la carpa de campeones, allí estaban Viktor, Fleur, Cedric y Harry.

Después de hablar unos segundos con Harry intentando calmar sus nervios, me dirigí hacía Cedric.

Después de hablar unos segundos con Harry intentando calmar sus nervios, me dirigí hacía Cedric que estaba un poco inquieto pero enérgico.

—Te irá excelente—hablé y el castaño volteó hacia mi.

—Son dragones, Harry me lo dijo—empezó a decir.

Lo miré atenta y la verdad es que a pesar de estar nervioso no mostraba signos de querer abandonar el torneo, al contrario. Estaba siendo valiente.

—Lo sé, y tu podrás con él—lo animé y él me sonrió para luego darme un corto beso.

Sentí un flash que nos obligó a separarnos y me encontré con Rita Skeeter, la periodista del diario El Profeta.

—Vaya vaya, al parecer la señorita Saint-Jean tiene una relación con el campeón de Hogwarts, Cedric Diggory—dijo y noté como una pluma flotante anotaba sus palabras.

La miré seria, pero aún así Cedric se reía por lo acontecido.

Después de ese suceso salí de la carpa y volví hacia mi asiento junto a mis amigos, no quería demostrarlo pero me sentía nerviosa, incluso más por Harry.

Durante la prueba, él transformó una piedra en un perro, que distrajo al dragón, y logró recuperar el huevo de oro, aunque recibió una quemadura en la mejilla.

Después de ese largo rato pude soltar la respiración. Aún así, seguía nerviosa porque era el turno de Harry.

El azabache salió de la carpa y se veía tan indefenso. Miré a Hermione preocupada.

—Él lo hará bien—murmuró Her para si misma y tomé la mano de mi amiga y ella me sonrió.

Harry usó un hechizo de invocación para convocar su Saeta de Fuego. Tuvo que maniobrar por todo el estadio para poder coger el huevo mientras era perseguido por el dragón que se había soltado de sus cadenas.

Después de unos minutos, consiguió el huevo y todos en en el estadio nos levantamos aplaudiendo. Al fin había terminado esta tortura.

Después del Torneo, los campeones fueron a la enfermería a curar sus heridas mientras que mis amigos y yo nos dirigíamos al comedor.

Todos hablaban de lo ocurrido en el Torneo, muchos estaban sorprendidos de Harry, creían que él abandonaría o que incluso, se dejaría ganar. Claramente Harry había callado muchas bocas.

Ya en el comedor tomé asiento y saqué de mi mochila el libro que Draco me había dado. Estúpido Draco.

Estaba tan molesta con él.

Analicé mejor las letras que adornaban la portada del libro. "El origen de las brujas celestinas". Lo abrí y comencé a leer.

Mucha información coincidía con lo que ya había leído en varios libros desde que había llegado a Hogwarts. Lo cierto es que, no pude evitar sorprenderme al leer el nombre de Sarah Bisen, la primera bruja celestina.

Seguí leyendo un poco más mientras mi rostro se iba transformando de sorpresa a intriga.

"Muchos investigadores, analizando el árbol genealógico de las brujas celestinas, llegaron a la conclusión de que Sarah Bisen fue la primera, dejando un diario escondido que recita cada profecía para cada una de las brujas celestinas"