LIII "Quédate"

239 7 0
                                    

Lucía POV

Estaba por entrar a la Mansión cuando, por segunda vez en el dia, alguien tiro de mi brazo y me escondió atrás de una estatua.

--¡Scheib!.-- grité aturdida.

--¡Shhhhh!, no hables... ¿acabas de maldecir en Alemán?... bueno, no importa, solo contesta mis preguntas.-- habló una voz con fuerte acento Alemán.

--¿Kerstin?, ¿Que estas...?.

--¡Que no hables!, ¿Cuales son tus intenciones con Valentina?.

--¿Como?.

--No me hagas repetirlo niña.-- habló la mujer sosteniendo su brazo en mi garganta.

--¿Cuales crees que son?, ella me gusta y yo la quiero.-- hable sintiendo mi falta de aire.

--Te advierto, si le haces algo que la lastime, puedo incluso matarte.-- habló secamente, y no sé si lo decía para intimidarme o verdaderamente era una amenaza.

--¿¡Ehhh!?.

--¿Quien era la mujer con la que estabas hoy en ese callejón?.-- preguntó descolocandome completamente.

--¿Como sabes vos de Mónica?.-- pregunté ahora completamente seria agarrando el brazo que tenía en mi cuello y retirandolo lentamente con mi fuerza. Gracias a los dioses no había usado ninguna técnica de sometimiento... no como Mónica.

--¡Oye no he terminado el interrogatorio!, ¿Como tienes tanta fuerza?.

--¿Como sabes vos de Mónica?.-- volví a preguntar.

--Mi hermano es un detective privado, conozco sus métodos, estuve siguiéndote. Esa chica te beso y tu la apartaste asqueada,
¿Por que?.

--Porque no quiero que otra persona que no sea Valentina me bese.-- respondí observando sus ojos.-- Ella es algo así como una Ex, es una historia larga que no quiero contar ahora, me beso y sometió contra mi voluntad después de que la dejé sola porque empezó a hablar mal de Valentina, eso fue lo que viste y lo que pasó.

Ambas nos quedamos completamente calladas y ella me miró atónita, aflojando su agarre.

--Oh, l-lo siento, yo no... ¿Q-quieres que llame a la policía? Lo que me dices es algo muy fuerte, ¿O quieres que-?

--No, quiero que entiendas que yo sé que no nos conocemos, pero a las dos nos importa Valentina y necesito que sepas que antes de dañarla, me tiro de un puente. Soy una persona completamente fiel a mis ideales y principios, así que nunca traicionaría a nadie y menos a ella.-- terminé saliendo de detrás de la estatua y entrando a la Mansión seriamente. Suspiré ondo, tratando de calmar mis nervios y llegar con la mejor sonrisa. --Buenas noches señor Héctor, ¿Como está?.

--¡Oh!, la esperábamos señorita Lucía, estoy bien, gracias por su preocupación.

--¿Su esposa e hijos?.-- pregunté dándole mi campera.

--Si, gracias al cielo los tres están bien, pase señorita, los señores le esperan en la sala central.

--Muchas gracias Héctor, que tenga buena noche.

--Igualemente para usted señorita.-- terminó el hombre con una sonrisa, los empleados de la Mansión eran tan buenos.

Camine a la sala central, como el hombre me había dicho, cuando llegué, me encontre con Blaz, Carlota y Lidia jugando Monopoly con copas hasta arriba de licor y Valentina a un costado de el sofá con un jarro grande de lo que parecía ser cerveza.

--Hola.-- hable sonriendo y ellos me recibieron con el mismo gesto. Todos menos Valentina, que parecía inmersa en el líquido Ambar que tenía en sus manos.

ARAGONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora