LVIII "¿Somos... turistas?"

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Lucía POV

Estaba jugando con uno de los mechones castaños de Valentina, cuando ella empezó a moverse suavemente.

--Mmhgm..., hola...--habló somnolienta. Acurrucándose en mi pecho.

--Hola.-- correspondí sonriendo.

--¿Que hora es?.

--Son las 10:15 de la mañana.

--Hace frío.

--Si, hoy hace frío.

--Me gusta esta sensación.

--¿Que sensación?.

--La de despertar en tu pecho, acurrucada junto a ti en una mañana fría, me gusta como se siente.-- terminó suspirando.

Sonreí levemente, ¿desde cuando nos hablamos de esta forma tan... cálida?.

--A mi también me gusta tenerte así.-- respondí enterrando mi nariz en su cabello.

--¿Iras a caminar con Joaquín hoy?.

--Si, quiero mostrarle todo, ¿que es lo que me recomendás?.

--Mmmm... supongo que lo que te atraiga a ti de Barcelona, tu aún no conoces la cuidad por completo, pero puedes buscar algún guía turístico por internet.-- habló levantándose y caminando al baño.

--¡Eso!, no hay nadie mejor que una persona nacida acá.

--¿A que quieres llegar?.-- preguntó entrecerrando sus ojos mientras se lavaba los dientes.

--¿Querés venir con nosotros?.-- pedí de la forma más inocente que pude.

--No.

--Porfavor.

--No.

--Dale Vale.

--No.

--Bueno... ¡Ya se!, hay un pibe que conocí la otra vez en una heladería, parecia interesado en mi, quedamos que uno de estos días podíamos salir a pasear, ¡este es el momento justo!.

--¿A que hora quieres salir?.-- hablo suspirando enojada y volviendo a recostarse a mi lado. Sonreí internamente, la gallega era bastante celosa. Agarre su mejilla y la atraje hacia mi capturando sus labios.--Eres demasiado manipuladora.-- habló en el beso.

--Y eso te encanta.-- respondí sonriendo altaneramente.

--Felicidades, descubriste que la tierra es redonda.-- contestó con ironía.

--Gracias... por venir con nosotros.

--Si si, ahora sigue basándome y luego ve a hacer el desayuno.

--Si, señora.-- hablé militarmente a la vez que volvía a besarla, me encanta.

Una hora y media después, Joaquín toco la puerta del departamento y empezamos nuestro recorrido por Barcelona en el auto de la gallega.

--¿Podemos ir a ver un partido de Fútbol?.-- preguntó mi amigo.

--Mmm... mañana está el clásico de España.-- contesté buscando en mi teléfono.

--¡Si!, Barça vs Madrid.-- habló la gallega exaltada.-- ¿Te gusta el fútbol Joaquín?.

--Obvio galle, soy Argentino, por ley, me tiene que gustar.

--A Lucía no le gusta.

--¿Como que no le gusta?, si es más fanática que yo.

La gallega se volteó hacia mi lado, observandome interrogante.-- "No veré a veintidós idiotas pateando un balón".-- me citó entrecerrando los ojos.

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