XXXVIII "Alemanes"

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Lucía POV

--Lu, cría, levanta, hay que ir al curro...-- escuche una voz conocida susurrandome en el oído.

--¿Que hora es?.

--5:45 AM.

--Tenemos 15 minutos más para dormir.-- conteste abrazando a Valentina y recostando mi cabeza en su coronilla.

--No, debemos ir a...-- la corte abrazándole más fuerte.--Vale... 15 minutos.

Todavía no entiendo porque Valentina me deja tener este tipo de contacto con ella, capaz que es normal hacer cucharita con tu amiga, nunca tuve amigas como para comprobarlo. "¿Puede ser que le guste a Valentina?..." no, no eso es imposible, mi mente se está haciendo muchas ilusiones.

La gallega se abrazó más a mi enterrando su cabeza en mi pecho.

Esto no es un simple acto de amistad, parecemos hasta pareja, pero eso no puede ser, muchas veces nos llevamos para la mierda, Valentina no esta atraída por mi, y como yo estoy desesperada porque quiero gustarle, me armo mil historias en la cabeza malinterpretando todo, creo que ya es momento de ir dejando de a poco lo que siento por ella, tampoco es que quiera lastimarme, no soy masoquista.

Enterró un poco más su cabeza en mi pecho haciendome sentir una cálida sensación.

Bueno... capaz puedo estar así un rato más con ella...

No.

Me aparté un poco de su cuerpo para después levantarme de la cama y empecé a cambiarme, me había descambiado antes de recostarme con Val en la madrugada. Valentina se sentó resfregandose los ojos de forma cansada para luego seguirme con la mirada mientras sostenía una leve sonrisita.

--¿Que pasa?.-- pregunte con una media sonrisa y entrecerrando los ojos tratando de ponerme los jeans.

--Nada.

--¿Y porque me miras entonces?.

--¿No puedo mirarte?.

--Deja de contestar mis preguntas con más preguntas.

--No sé porque te estaba mirando, mis ojos se desviaron hacia ti, nada más...

--Bueno, si vos decís.

--Si, sho digo.--contesto imitandome haciendo que soltara una carcajada.

--Te sale mejor que a Carlota.

--Sha lo sé boluda, sha lo sé.

Continúe riendo hasta que me salieron lágrimas, Valentina era pura ternura, y además exageraba demasiado mi forma de hablar.

Terminamos de cambiarnos y alistarnos para salir, desayunamos rápido para luego bajar al estacionamiento, al llegar al auto Valentina entro sonriente y yo me paré en seco con la mano en el picaporte, un hombre con la pistola escondida, unos ojos azules con odio en la mirada, un arma apuntandome a través de la ventana y la daga atravesando mi mano, todo eso cruzó por mi cabeza en un segundo y saque rápidamente mi mano de la puerta.

Comence a temblar como el día anterior, gire mi cabeza para todos lados en busca de algo o alguien que pudiese herirme, me sentía completamente desprotegida, mi vista se nublo y los ojos se me humedecieron, hasta que sentí unos brazos rodearme y a alguien que apoyaba su cabeza en mi pecho, me tense al instante.

Vale POV

--Estas bien, no tengas miedo...-- susurre lentamente pero lo suficiente alto para que la Argentina lo escuchara.

Su mirada se encontraba en un punto fijo sin expresión, no pude contenerme y la abracé, sentí como se tensaba fuertemente y no correspondía mi abrazo, ¿Estará enojada conmigo?... "Niña, no todo se trata de ti, ¡Lucía está traumada!"... Mierda, soy una egoísta, nunca pensé que podía estar traumada.

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