ARAGON

II "Comienzos" (2/2)

—Ma, no llores, voy a estar bien, Barcelona es un muy lindo lugar para vivir, es España, el país al que quise ir desde que me enteré que existía.—Hablé un poco desesperada, tratando de calmar a mi vieja que cada vez soltaba más lágrimas.

—Ya se hija, pero no me podes culpar, te vas al otro lado del Mundo, y pretendes que no me preocupe.

—Y para colmo te vas antes de Navidad, ¿no la vas a pasar con nosotros?—Ese era mi papá preguntando desde la cocina.

—No Pá, si quiero el trabajo en la empresa tengo que volar lo antes posible, ya tengo el pasaje y todos los papeles, desgraciadamente no me alcanza para comprar tres pasajes de avión el mismo mes para que llegue a tiempo para Navidad y Año Nuevo.

—Lo pagamos nosotros.

—No.—Respondí rotundamente.

—Sabes que no tenés que pagarte todo vos sola, serás inteligente e independiente, pero sos joven Lucía, y podes seguir dependiendo financieramente de nosotros.

—Eso ya es otro tema Papá, yo decidí irme de la casa por autonomía, y los trabajos que tuve me sirvieron para bancar el departamento y las facturas, ustedes hicieron suficiente al pagarme la comida.

—Porque los dos somos grandes, trabajamos, y sos nuestra única hija.

No respondí, pero mantuve mi postura.

Los dos suspiraron.—Bueno Lu, si estas segura, nosotros te bancamos, ¿Cuándo te vas?.

—Esta madrugada.

El ceño de mi viejo se arrugó.

—¿Cómo no lo dijiste antes?.

 —Estaba ocupada rindiendo las últimas materias, y un par de exámenes que me dieron los profesores de Inglaterra para ver si estoy o no capacitada verdaderamente para terminar la Facu, esperé hasta último momento para mandar el currículum a la empresa de Barcelona y me lo aceptaron casi a los minutos.

—¿Y como los rendiste?

—Cien de cien en todos, los profes de Oxford los revisaron en un día, son bastante rápidos.

Ambos se quedaron callados observándome con sorpresa.

—¿Ténes el título?... entonces... ¿Estás graduada?

—Si...

—¿Y te aceptaron en una empresa de España?

—Hice una entrevista por meet después de mandar el currículum, me invitaron a un programa de internos de la empresa en el que te brindan asilo y el dinero necesario para solventar los gastos de comida de tres meses, que es lo que dura la etapa de prueba, después de eso, se eligen a los mejores seis y se les dá un puesto en la empresa.

—Lucía, ¿Cuándo pensabas decirnos?

—No quería armar tanto alboroto, no es nada nuevo...

—Aunque no sea algo nuevo, es todo un logro mi vida.— Me abrazó mi vieja empezando a soltar lágrimas otra vez.

—¿Cómo no lo decís antes?... podría haber hecho un asado antes de que te fueras.—Habló mi viejo, caminando hasta nosotras y uniéndose al abrazo.

—Yo... sé que si nos juntábamos a comer un asado con toda la familia no iba a poder irme... perdón... no pensé en que querían despedirme...

—¿Cómo que no?, te vamos a extrañar tanto Cúcu...

—¿Los abuelos saben ya?

—No les dije nada, están de vacaciones, no quiero que se preocupen.

—Tu abuela te va a hacer la cruz.