La lucha continúa.

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El viaje de regreso a la base fue lo más deprimente que alguien puede imaginar. Una chica que no superaba los 18 años , lloraba por su primer amor que fue asesinado brutalmente a manos del más grande villano de la historia. El poco delineador que llevaba puesto en sus ojos se escurrió en su rostro manchándolo de negro.

Y la pareja, ellos sólo viajaban sentados el uno al lado del otro mirando al suelo culpándose  de lo que sucedió. La mujer se aferró al brazo de su pareja en donde derramó las lágrimas  secas que le quedaban. Hundida en sollozos y gritos ahogados fue como liberó la culpa y el estrés que le causaba la situación, o por lo menos intentó liberarse de aquel dolor.

Deku, el héroe que juró luchar por los demás y dar todo de si mismo por un bien común, ahora se encontraba en el momento más critico de su vida. La supervivencia de quienes amaba y el resto de personas dependía de lo que hiciera. ¿Qué debía hacer? Esta vez no había manera en la  cual pudiese responder esa pregunta.

La azabache miró de reojo por la ventana, para su sorpresa, el cielo se encontraba totalmente oscuro, la oscuridad era adornada por los cuerpos celestes del cielo. Lo extraño de la situación era que habían dejado la base desde la mañana, el viaje duró poco y la lucha duró no más de una hora, entonces, ¿Por qué el cielo estaba oscuro?

La mujer clavó su mirada en el peliverde, él también había notado lo extraño de la situación.

Izuku: No tardamos mucho tiempo fuera, ¿Entonces por qué ya es de noche?

Su pareja no respondió, a cambio de su respuesta dio un leve suspiro para después secar las lágrimas que yacían en sus mejillas.

La pelinegra tomó de la mano a su hija, esta trató de consolarla pero no quería decir nada pues por experiencia propia sabía que lo mejor era dejarla derramar sus lágrimas hasta que se calmara.

Tardaron alrededor de una hora y media en llegar.
En el momento en el que la gran arca se posó en el suelo, una mujer rubia de ojos azules esperaba ver a los guerreros salir con una sonrisa de victoria. Su deseo se hizo pedazos al ver como sólo bajaron algunos cuantos de los que se habían ido originalmente.

La mujer rápidamente corrió hasta dónde estaba la pareja y tomó a la pelinegra de los hombros.

Melissa: ¿Qué sucedió?

Preguntó alterada. Pero lo único que resibió como respuesta fue un, “Perdón”

Melissa: ¡Ya díganme que pasó!

Momo: Te juro que hicimos todo lo que pudimos, pero… Shigaraki fue monstruosamente superior a nosotros.

Sus ojos perdieron su característico brillo azul. Inundada en su deseo de saber más, lanzó su siguiente pregunta la cuál  claramente le dolería saber la respuesta.

Melissa: ¿Dónde están los demás?

El peliverde apretó los puños sosteniendo sus sollozos dentro de él.

Izuku: Shigaraki… los asesinó.

El resto de presentes que no fueron al combate claramente se veían incrédulos a la respuesta. Habían enviado una tropa numerosa y poderosos héroes, ¿Cómo era posible que siguiera vivo y que haya asesinado a tantos?

Todos se quedaron en silencio inundados en sus pensamientos pues no había otra cosa en la que pudieran consolarse

Entonces, la albina dijo algo que rompió el ambiente, palabras que demostraban su roto estado en el que se encontraba.

Eri: ¿Que haremos ahora? ¿¡Cómo se supone que vamos a vencer algo que no podemos matar!?

Su grito recorrió el lugar. Como si ya lo sucedido no fuera suficiente dolor, ahora aquellas preguntas convirtieron en un infierno sus mentes.

Eri: ¿Por qué nos pasa esto? ¿Que hemos hecho para ver a las personas que amamos morir? Si no hubiera notado lo de las placas, si no lo hubiera notado ellos seguirían vivos. Los llevé a su propia muerte. Murieron por mi culpa.

Cayó de rodillas al suelo, las lagrimas recorrieron sus mejillas hasta chocar con el concreto. Los ojos carmesí que tanto la caracterizaban habían perdido su brillo, ahora no eran más que un color rojizo apagado sin ningún brillo.

Izuku: Tranquila, cualquiera que lo hubiera notado habría hecho lo mismo que tú. Se que te sientes frustrada, pero debemos pensar en que hacer a partir de ahora sin mirar atrás, ellos dieron sus vidas para que pudiéramos escapar.

Eri: ¿¡Y de qué sirve!? De todas maneras no lo podemos matar. Además, ¿De qué sirve salvar a las personas si no podemos salvar a quienes amamos? Simplemente no tiene sentido.

Las lágrimas prontamente fueron acompañadas por sollozos que salían de la boca de la albina. Su corazón estaba hecho pedazos, quería que las cosas fueran diferentes, pero estaba enfrentando una realidad que jamás imaginó, estaba continuando su propia historia sin la persona que amaba. Ahora se encontraba en un nuevo párrafo del cual no sabía cómo terminaría.

Momo: Eri, debes calmarte, ¿No oyes las incoherencias que dices? Somos héroes, nuestro trabajo es salvar a las personas.

Eri: ¿Salvar a las personas? Hemos trabajado haciendo eso por mucho, salvar a las personas era lo que solíamos hacer.

La rubia se posó de rodillas en el suelo frente a la peliblanca que aún seguía con la mirada pegada al suelo, esta colocó las palmas de sus manos en los hombros de la chica, pero esta no hizo contacto alguno.

Melissa: ¿Y qué es lo que quieres?

La albina no dijo nada por algunos segundos. Se paró del suelo y limpio las lágrimas con las muñecas de sus manos, al terminar, miró a la pareja de héroes a su costado.

Eri: Huyamos, vámonos de aquí, jamás vamos podremos vencerlo, mejor dediquémonos a sobrevivir. Ya he visto como muchas personas han muerto, ¡Sólo me quedan ustedes y no los pienso perder! Ya no quiero que este infierno nos persiga.

Nunca antes habían puesto atención a sus sentimientos, el hecho de que su mente y corazón estuvieran destrozados, hacía las cosas más complicadas pues era tan sólo una chica tratando de vivir una vida feliz llena de buenos momentos, no de tragos amargos como los estaba experimentando.

Eri: Huyamos de aquí, busquemos algún lugar dónde podamos refugiarnos. Por favor, por lo menos en esta ocasión, piensen en ustedes mismos.

La azabache se agachó para estar al frente de su hija, esta creó un pequeño pañuelo y lentamente limpió el rostro de la peliblanca pasando la tela por sus mejillas hasta borrar el tono negro del delineador.

Momo: Sabemos que tienes miedo, y no te culpo, nosotros también lo tenemos, nunca antes habíamos enfrentado algo así. Pero debemos luchar para que la mayoría de personas sobrevivan, ¿Sabes qué? Todos los que dieron sus vidas lo hicieron porque también buscaban el bien de los demás. Kota hubiera preferido que lucharamos hasta vencer a Shigaraki, porque de esa manera tú podrías vivir.

Un chico rubio se aclaró la garganta mientras le daba la espalda a todos, este hizo su pelo hacia atrás descubriendo su rostro dejando que el aire acariciara su rostro.

Kaminari: Él jamás volverá, debes tener en cuenta eso, por más que llores y te lamentes, jamás volverá, está muerto. ¿Sabes cuál era la razón por la que él luchaba? Eras tú, y murió por ti, estuvo dispuesto a enfrentar al más grande villano de todos sólo por ti. Si de verdad lo amabas, entonces debes cumplir con ganar, porque esa fue la razón de su sacrificio. Lucha en su nombre y no dejes que su muerte haya sido en vano.

La chica levantó su mirada, su mente había hecho un click y vino a su mente aquella vez en la que casi armaba un escándalo por la muerte de Kyoka. Sin darse cuenta ella estaba en una situación muy similar.

Melissa: Oigan, ¿sienten eso?

Un temblor comenzó a sentirse debajo de ellos, todos estaban boquiabiertos pues en ese lugar nunca antes había temblado, los edificios y los postes comenzaron a partirse y las personas cercanas a los refugios se alteraron por no saber lo que sucedía.

Izuku: Él viene.

Dejó de temblar, todo se quedó en silencio por unos largos 10 segundos, el aire se tensó, una vez más las pequeñas rocas temblaban en el suelo.
La punta de una de las montañas estalló, los residuos de la explosión caían cómo lluvia, los héroes detuvieron tantos fragmentos de roca como pudieron. Al terminar dirigieron su mirada a la cima del lugar…












... y ahí estaba él…


















…observaba desde las alturas como si fueran simples insectos…





















Shigaraki los encontró en muy poco tiempo.

Izuku: ¡¡Huyan todos!!

Los civiles comenzaron a correr en direcciones aleatorias temiendo por sus vvidas.

Izuku: Uraraka, Eri y Melissa. Ustedes lleven a los sobrevivientes a cualquiera de los refugios subterráneos, ¡Ahora!

Dos de ellas asintieron, la rubia tomó del brazo a la albina y la llevó con ella mientras que la castaña llamaba la atención de tantos como podían.

Mientras tanto, sólo cuatro de ellos estaban al frente de batalla, ya no había militares, artillería pesada, héroes, ya no existía quien pudiera ayudarlos. Tampoco tenían un plan en mente así que nadie sabía exactamente qué hacer.

Momo: ¿Crees poder usar el One For All?

El chico no respondió, ella miró de reojo a su costado en dónde estaba el peliverde con la cabeza baja mientras que pequeños rayos salían de su cuerpo.

Kaminari: ¿Estás bien?

Izuku: One For All… 50%

Su cuerpo comenzó a emanar rayos verdes que podían dar descargas a cualquiera que estuviera cerca.

Izuku: No sé si mi cuerpo pueda resistir todo. [Rize… Kai… necesito ayuda]

Los fantamas aparecieron frente a él, obviamente sólo el peliverde y su pareja podían verlos.

Izuku: Rize, quiero que me des la fuerza de los kagunes en todo mi cuerpo, Kai, quiero que me dejes usar el Demiajin en cantidades para no gastarlo.

Rize/Kai: Intercambio recibido.

Ambos tomaron los dedos, la musculatura de nuestro protagonista incrementó ligeramente mientras que la masa oscura rodeaba su cuerpo.

Monoma: ¿Alguien tiene un plan?

Kaminari: No tengo ni idea.

Momo: Me gustaría decir que tengo algo en mente, pero no es así.

El peliceleste llegó hasta dónde ellos yacían, la diferencia de alturas es monstruosa, él prácticamente lucía como un titán.

Shigaraki: Fue muy fácil encontrarlos, el sacrificio de todos ellos fue en vano, no creo que tengan una idea de cómo hacerme daño, ¿no?

Ninguno de los últimos cuatro héroes dijo algo, sólo escuchaban cuidadosamente sus palabras.
La luna desapareció del cielo, todos fueron encerrados en una cúpula oscura de dónde nadie podía escapar.

Momo: Nos atrapó, y también a los civiles.

Las personas veían con miedo lo que sucedía, todos habían sido encerrados en aquella cúpula que no tenía salida.

Shigaraki: ¿¡Que harán ahora!?

Izuku: One For All… 80%

Este dio un gran salto hacia enfrente y con el enorme poder que el quirk le otorgó golpeó en el rostro al villano.
Su cuerpo dolía, a pesar de estar acostumbrado a usar muchos quirks y a pesar de tener soporte extra, su cuerpo seguía pidiendo ayuda.

Momo: Escuchen, acabo de notar algo. Esta cúpula depende de su concentración, en el momento en la que apareció, en su frente se marcaban unas venas, y cuando Izuku lo golpeó la cúpula desapareció por algunos nanosegundos.

Monoma: Creo que entiendo por dónde va esto.

Kaminari: Entonces cortemos la cabeza y permitamos que los ciudadanos huyan.

El pecoso se levantó del suelo y se posicionó listo para el combate.

Izuku: Este poder es enorme.

El peliceleste salió de entre los escombros al mismo tiempo que sus heridas se regeneraban.

Shigaraki: Tú posees el OFA, para ser tu primera vez con él, no estuvo tan mal.

Izuku: Esta ves ganaremos. No importa que todos esté en nuestra contra.

Este subió el poder del OFA al 100% , ambos rubios se pararon a los costados del pecoso mientras que la pelinegra preparaba varias armas con las cuales atacar.

Sin embargo, en las montañas, dónde las personas seguían atentas a lo que sucedía en la base, una chica albina arrancó una parte de su traje y con la tela apretó su brazo haciendo que sus venas se marcaran.

Melissa: ¿Qué crees que haces?

La chica terminó de apretar su brazo jalando ambas puntas de la tela con ayuda de su boca.

Eri: No dejaré las cosas así, es tal cómo ellos dijeron, debo luchar.

Sacó un maletín que estaba dentro de unos arbustos, lo abrió, dentro del objeto había 5 jeringas con un extraño líquido rojo.

Eri: Romperé mis límites.

Melissa: ¡No debes hacer eso!

La rubia trató de quitarle las jeringas, pero la peliblanca empujó con un pie a la mujer haciendo que cayera al suelo.

Eri: Ese maldito tiene que pagar por todo lo que hizo.

Mordió otro pedazo de tela e inyectó el líquido de una jeringa en una de sus venas de su brazo.

En tierra, las cosas eran difíciles. Monoma estaba cansado de usar distintos quirks lo que estaba haciendo que su resistencia decaiga rápidamente.

Kaminari: ¿Puedes seguir?

Monoma: Creo que… no...

El rubio se desplomó en el suelo, su compañero trató de ayudarlo. El pelilechuga luchaba mano a mano en contra del peliceleste, estos se encontraban a un nivel similar de fuerza física, pero sus habilidades eran distintas.

Shigaraki: Enserio que eres difícil de matar.

Izuku: No moriré hasta que tú estés derrotado.

Shigaraki: Decay Black Hole.

Tronó sus dedos y el pecoso comenzó a ser arrastrado por un agujero negro. En un abrir y cerrar de ojos, un par de cadenas se clavaron en lo brazos del peliceleste, se trataba de la pelinegra quien con ayuda del Demiajin jalaron el cuerpo hasta ser absorbido por aquel agujero.

A Los pocos segundos el cuerpo se regeneró en su totalidad, en otras palabras, ni su propio poder podía matarlo.

Shigaraki: ¿Qué parte de, “Soy inmortal” no entienden?

El villano metió su mano en un portal que pareció por un lado del rubio de los ojos grises, lo tomó del cuello y lo hizo aparecer frente a él.

Izuku: ¡Monoma!

Shigaraki: Es patético lo que hacen ustedes, sólo están arriesgando las vidas de los demás. Miren cómo otra vida es arrebatada por sus errores.

Posicionó sus dedos en el cuello del rubio haciendo que desapareciera lentamente, y no fue más que sólo polvo.

Shigaraki: Es tan divertido ver como desaparecen lentamente en mis manos.

Kaminari: Monoma…

Izuku: ¡¡¡¡Ya basta!!!!

El peliverde tomó impulso desde una pared, activó al OFA al 100% de su capacidad, encendió sus llamas al 100% y ambos combinados obtuvieron la apariencia de un gran dragón Nórdico que tomó entre sus dientes el cuerpo del villano haciéndolo pedazos en el proceso.

Se elevó hasta el cielo y dejó caer toda su fuerza y ardor en un solo golpe que agujeró el suelo y creó una explosión que se expandía rápidamente por el lugar.

La pelinegra hizo un par de alas y tomó de los brazos al rubio sobreviviente, rápidamente voló tan rápido como pudo y llegaron cerca de las montañas en dónde sólo se pudo sentir una parte de la onda de choque.

Momo: Mi cuerpo… está muy dañado… creo que voy a…

Calló de rodillas y comenzó a ver borroso, su respiración se alentaba con el correr de los segundos y su cuerpo se sentía débil.

Una vez más abrió los ojos, estaba sentada en un trono de oro con detalles de diamantes y las más finas perlas.

Momo: ¿Dónde estoy?

Escuchó unos pasos frente a ella, pasos que lentamente se hacían cada vez más claros.

Frente a ella, había un hombre de pelo negro al igual que sus ojos, este compartía muchas características con Kai.

Se acercó a ella, tomó su mano y respetuosamente la besó en los nudillos.

¿: Entonces eres tú quien tiene mi habilidad.

Momo: ¿Quién eres?

¿: Mi nombre es Noa, soy el hermano de Kai, y hermano de la chica que está dentro de Yarima.

Momo: ¿Y qué quieres?

Noa: Usa todo mi poder, úsalo sin preocupación, una vez que yo renuncie a mi poder, la dureza y cantidad del quirk aumentará y podrás usar su 100%, no es mucha la diferencia a lo que experimentas, pero créeme que te servirá para resistir las altas temperaturas.

Momo: ¿Estás seguro de esto?

Noa: Más seguro no puedo estar. Ganen.

El hombre colocó dos de sus dedos en la frente de la azabache y ella sintió como una descarga recorría su cuerpo.
Por tercera vez abrió los ojos y notó que en la vida real habían pasado sólo unos cuantos segundos.

Kaminari: No puedo acercarme, el suelo está muy caliente.

Momo: Entonces, ataca desde aquí…

Kaminari: ¿Qué?

El cuerpo de la mujer se envolvió en una masa negra que podía darle forma a su gusto. Dio un gran salto, hizo unas alas y se metió dentro del área en dónde las temperaturas eran diabólicas.

Momo: ¡¡Izuku!!

Ni si quiera el bestial poder de dos poderosos quirks fueron suficientes para dañar gravemente al villano. El peliceleste tenía al pecoso tirado en el suelo mientras que su pie izquierdo se posaba sobre la cabeza del protagonista.

Shigaraki: Oh, ahí estás tú, Yaoyorozu, te estaba buscando, serás la siguiente después de que le aplaste la cabeza.

El villano comenzó a alzar más el pie para tener la fuerza suficiente de destrozar la cabeza del peliverde.

Shigaraki: Muere…

Antes de moverse, un enorme edificio se acercaba a gran velocidad al peliceleste, él no pudo reaccionar a tiempo y fue arrastrado por el lugar. Edificios y caminos estaban regresando a su normalidad, como si de alguna manera estuvieran viajando al pasado en dónde la batalla había comenzado.

Momo: ¿¡Estás bien?

Le preguntó a su pareja mientras lo ayudaba a levantarse.

Izuku: No lo sé, mi cuerpo duele mucho.

Unos pasos se escucharon entre el humo que se movía con el viento. De aquel lugar surgió una chica peliblanca, ojos rojos brillantes como las estrellas en la noche, y que poseía dos pares de cuernos en su cabeza.

Momo: Eri…

Eri: Mamá, papá, me uniré a ustedes, perdón por todo lo que dije, me sentía muy frustrada por lo que sucedió, pero Kaminari me abrió los ojos, así que lucharé a su lado.

Izuku: ¿Cómo obtuviste tal poder?

Eri: Le robé algunas jeringas de droga potenciadora a Monoma antes de morir, inyecté cuatro de ellas en mi.

Momo: ¿¡Cuatro!?

Eri: No me puede suceder nada por sobre dosis, pero me cansaré bastante. Mi quirk ahora puede revertir los daños a cosas materiales al igual que personas, pero sigo sin poder revivir personas.

Izuku: Pero como…

Eri: Tengo una idea, él no puede morir de ninguna manera, así que hay que hay que hacer que nunca haya existido, no sé cuánto tiempo me tomará, pero quizás pueda borrarlo de la existencia, o tal vez llevarlo antes de que fuera inmortal, y ahí podrán atacarlo.

Momo: Buena idea.

Izuku: No podemos contar con Kaminari, se supone que está demasiado caliente aquí. Entonces, ¿Cómo puedes mantenerte en pie?

Eri: El maletín tenía dos tipos de drogas, la de los quirks y la que potencia las habilidades físicas, me inyecté ambas, así que por eso puedo resistir.

Momo: En ese caso, ¡Vamos!

El edificio se partió en pedazos que cayeron como lluvia, de entre los escombros salió el peliceleste al mismo tiempo que sus heridas se curaban.

Shigaraki: Aún hay muchos estorbos. Ugh, entre más rápido los elimine más rápido podré disfrutar de este mundo.

Eri: ¡Ahora!

El Demiajin de la hija única de los Yaoyorozu aumentó su resistencia y durabilidad a niveles extraordinarios con la capacidad de resistir los poderosos golpes del villano.

Izuku: One For All…

Con el Hell Fire potenciado con el OFA las llamas del pecoso comenzaron a arder como nunca, las llamas eran de color azul casi llegando a un tono violeta. Saltó desde lo lejos y pasó una gran cantidad de fuego a sus manos las cuales las puso sobre el rostro del villano, su cara comenzaba a deformarse por la gran temperatura que se sentía.

Ante todo esto, surgió un problema. La droga que la albina había usado para potenciar sus habilidades físicas estaba llegando casi a su fin, por lo que las altas temperaturas dentro del área de combate causaban que su vista comenzara a verse borrosa.

El peliverde tomó del brazo al peliceleste mientras seguía aumentando la temperatura, su pareja tomó la otra extremidad con ayuda de un ser hecho del Demiajin, al mismo tiempo que controlaba a aquel ser, también usó el Heavy Metal para aumentar su peso y poder apresar con más fuerza al enemigo.

Izuku: ¡¡Ahora!!

Eri: Esto va por ti, Kota, tía Mirko, Tío Katsuki, y por todos los que han muerto en sus manos.

Los dos pares de cuernos se encendieron en una luz brillante de color amarillo que causaban una metamorfosis en el cuerpo del villano, su cuerpo iba hacia atrás a etapas anteriores, sin embargo, estaba sucediendo muy lentamente y las condiciones en la que ella intentaba regresarlo, eran las peores, las altas temperaturas y el corto rango de las drogas estaban poniéndose en su contra.

Eri: Debo resistir, debo llevarlo hasta el punto dónde nunca haya existido.

En las montañas se comenzaba a ver un cambio en el ánimo de todos, muchos comenzaban a creer que la batalla estaba casi por fin en la recta final en dónde por fin estarían todos en paz .

Melissa: ¡Lo están logrando!

Uraraka: ¡¡Ustedes pueden lograrlo!!

El grito de la castaña logró hacer que la peliblanca abriera los ojos y siguiera de pie mientras que el cuerpo del peliceleste seguía en medio de su metamorfosis.

La gran cúpula en la que todos estaban encerrados desaparecía lentamente dejando ver la luna y las estrellas que adornaban el firmamento, lentamente las personas comenzaron a huir hasta algunas arcas de gran tamaño escondidas en los refugios.

La castaña y compañía seguían observando pues querían saber en qué terminaría la batalla. Algunas otras personas también se detuvieron para mirar, pero lo que estaba por suceder, daría un giro completo desordenado la balanza.

Un par de extremidades extras salieron de los costados del villano y lo ayudaron a liberarse del alcance de ambos héroes.

Shigaraki: ¡Largo!

Este golpeó el suelo y ambos cayeron en un cráter que se formó por la ruptura de la tierra. Ese pequeño instante fue aprovechado por el tipo quien a gran velocidad tomó a la albina del cuello, su respiración de agitó más y la combinación de la temperatura y el límite de las drogas lograron que cerrara los ojos quedando inconsciente.

Izuku/Momo: ¡¡Eri!!

El peliceleste colocaba lentamente cada un de sus dedos en el cuello de la chica, llegando a los cuatro, comenzó a bajar el quinto lentamente haciendo que los héroes entraran en desesperación.

¡Aún no!

Un grito se escuchó que provenía de entre el vapor, se trataba del rubio del rayo quien exitosamente logró sacar a la chica de los brazos del villano, una vez en sus brazos corrió hasta llevarla a un lugar seguro donde la rubia y compañía la resguardaron.

Una vez se aseguró que estaba bien, regresó al campo de batalla. Pero las cosas empeoraban, las altas temperaturas estaban quemando su piel, la cual ya se encontraba en un gran tono rojizo y sentía como todo su cuerpo ardía.

Kaminari: Midoriya, Yaoyorozu, busquen una manera de ganar, aunque ya no podemos contar con Eri, aunque despierte ya usó demasiado su quirk y será difícil que se recupere después de haberlo usado de esa manera.

El OFA comenzó a cansar el cuerpo del protagonista y el uso constante del Demiajin y su propio quirk de la chica la estaban comenzando a cansar también.

Izuku: Kaminari, huye, la cúpula desapareció, simplemente váyanse de aquí.

El rubio lo miró de reojo, sonrió y dejó que el vapor saliera de su boca.

Kaminari: Por más que ella ya no está aquí, ella hubiera querido que luchara por ustedes, además, si sigo vivo, entonces por lo menos debo hacer algo que pueda ayudarlos.

El enemigo se paró frente a él, cruzaron miradas, en un abrir y cerrar de ojos el chico del rayo dio una descarga eléctrica al peliceleste quien sólo logró retorcerse, lo que dio el paso a otra batalla de relevo.

Mientras esto sucedía, las mentes de la pareja eran sólo caos tratando de procesar lo que sucedía y lo que deberían hacer.

Izuku: Tengo una idea.

Él la miró a los ojos, ella aún no entendía lo que se refería, pero aún así sentía miedo.

Izuku: Cada vez que uso el OFA en su contra, sus heridas tardan más en recuperarse, si logramos neutralizarlo por más tiempo, los ciudadanos podrán escapar.

Momo: ¿Estas diciendo que…?

El chico estiró la mano llena de heridas a la de la pelinegra y esta la tomó.

Izuku: Ahora, es nuestro turno.

El rubio estaba siendo brutalmente masacrado por el peliceleste, en tan sólo algunos minutos ya había obtenido romperle varias costillas y dañar sus órganos, pero cada vez que caía, lograba ponerse una vez más de pie.

Shigaraki: Has soportado mucho, me sorprende que sigas vivo.

Kaminari: Yo tengo una misión, sólo vengo a cumplirla.

Shigaraki: Entonces deberás morir cumpliendo con tu trabajo.

Lo tomó del cuello y lo alzó a su altura, el villano tomó con cuatro de sus dedos al chico quien estaba apunto de morir.

Kaminaru: [Midoriya, Yaoyorozu, perdónenme por el daño que les llegué a hacer, perdónenme por las estupideces que dije, perdónenme por no ser más útil, pero esto es lo más que puedo hacer. Si es que este es el fin, entonces, Kyoka, podré verte de nuevo en el paraíso.] Escúchame, no sé cómo lo harán, pero ellos te darán tu merecido, maldita escoria, ¡Nos has subestimado!

Shigaraki: Como quieras, entonces supongo que te eliminaré.

La desintegración recorrió el cuerpo del joven quien lentamente se redujo a cenizas muriendo en el acto, pero  por lo menos llevaba en mente de que ayudó en la guerra y que quizás no fue la mejor persona en el mundo. Tuvo la oportunidad de enamorarse, de llorar, sonreír, y mucho más, y por eso mismo estaba agradecido, agradecido de haber tenido con él un ángel que el universo o Dios le envió, y quien también fue la inspiración de seguir luchando hasta el final.

Kaminari: Midoriya, Yaoyorozu, se los dejo a ustedes.

Una pequeña explosión se escuchó al costado del peliceleste, el humo se dispersó lentamente dejando ver a un par de siluetas que estaban de pie. De los cuerpos de aquellas personas brotaban rayos de tonos rojos y verdes, al dispersarse el humo, ambos jóvenes tenían una apariencia peculiar, sus cabelleras estaban herizadas, sus cuerpos lanzaban rayos en todas direcciones, sus ojos brillaban y sus pupilas tomaron una forma más dilatada.

Izuku/Momo: Doble…One For All.











Continuará...

FUEGO Y CREACIÓN ( Izuku × Momo)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora