Empezar de cero

25.Borrachita

Cris

La barra improvisada que armó mi hermano en la cocina estaba un poco concurrida por lo que me demoré un poco en buscar las bebidas, pero cuando por fin me pude hacer con ellas empecé a buscar a Joana con la mirada, y cuando por fin le encuentro no podía creer lo que veían mis ojos…

La perra de Cintia, una de las amigas de mí hermano estaba coqueteandole a Joana...

Estaba por acercarme a Joana para salvarla de la pesada, cuando alguien no me deja pasar...

Ruben: Ey dónde vas tan apurada guapa

Cris: Ruben te puedes quitar, que necesito llegar con mí amiga

Ruben: que amiga?

Cris: Joana

Rubén: la argentina de pelo morado?

Cris: si, así que déjame pasar

Rubén: no seas corta rollos cris

Cris: que dices

Rubén: que Cintia quiere ligar con ella, le gustó desde que la vió, así que porque mejor no vienes a bailar conmigo y las dejas tranquilas

Cris: no me apetece bailar contigo, además mí amiga me está esperando, para que le de su bebida

Rubén: yo no veo que te esté esperando, es más se la ve feliz con Cintia

Miro una vez más dónde estaba Joana, y se estaba riendo de algo que le decía Cintia en ese momento...

Tal vez Rubén tenía razón, y aunque me duela tengo que dejar que Joana se divierta.

Seguramente yo me había imaginado que Joana quería algo más que mí amistad, o tal vez se canso de que yo sea tan indecisa.

Así que me bebo de un sorbo mí cubata, y acepto ir a bailar con Rubén, mientras me bebo la bebida que era para Joana...

Joana

Cris se estaba demorando en volver, encima me había caído está chica, que no paraba de coquetearme, y aunque yo trataba de ser amable con ella, y de reírme con sus chistes malos, esperaba que mí sapito llegará a salvarme.

Pero como no venía le dije a Cintia, así se llamaba la chica en cuestión, que ya volvía que iba por algo beber...

Pero camino a la barra me doy cuenta porque cris no volvía, estaba muy ocupada bailando con un chico moreno...

Sentí una punzada en el pecho, no sé si eran celos, tristeza, desilusión.

La verdad que lo único que quería en este momento era irme a mí casa, pero en lugar de eso, decidí que lo mejor era ir a la barra y prepararme un trago bien cargado...

Cris

La verdad que Rubén me hablaba, pero mí cerebro contestaba de manera automática, ya que no podía pensar en otra cosa que en las risas de Joana y esa perra de Cintia...

Es que esto me pasa por ilusionarme una vez más. Sí Joa me fue sincera desde un principio, y me dijo que solo quería recuperar mí amistad y nada más, pero cómo le explico eso a mi corazón que está enamorado de ella desde hace años...

Joana

Ya perdí la cuenta de la cantidad de tragos qué me tomé. 

En un momento Cintia vino a buscarme y me hablaba, pero yo solo le respondía con monosílabos y seguía bebiendo, hasta que por suerte vino una una de las sotos a rescatarme, Y aunque no fue la hermana que hubiera preferido, agradecí la llegada de Martina...