Capítulo 48

1.4K 141 44
                                    

Marzo 01 del 2001

De nuevo nos encontramos en esta fecha. Nuevo año. Justo ahora Ron esta cumpliendo 21 años pero al igual que Maison esta cumpliendo su noveno mes. Sus dientes empezaron a crecer, creció demasiado y tan rápido, su cabello rubio permaneció.

Mi permiso de maternidad había terminado hace tiempo, volví a lo que me aposionaba y realmente disfrute estar de regreso.

Aunque el llegar tarde aún era un mal hábito que se mantuvo en un par de ocasiones. No había aceptado ninguna niñera que el Ministerio le ofrecía a Ron.

Llevaba a Maison conmigo al campo, tenía que cumplir con mi contrato después de todo, Ginny como madrina estaba encantada en cuidarlo mientras veía nuestros entrenamientos.

Vestí a Maison de un muy lindo atuendo color verde, resaltaba sus ojos y combinaria con el uniforme que me pondría.

Lo tomé en brazos. Ron entró en la habitación dispuesto a irse al Ministerio.

—¿De verdad te vas a negar a ir al Ministerio? — gruñó.

—Sí. — fue lo único que conteste.

Lo pase por un lado para bajar las escaleras rumbo a tomar la Red Flu.

Siempre era la misma vieja discusión.

—¿Ni siquiera por que hoy es mi cumpleaños? ¿Cuánto tiempo seguirás negandote a ir? — me siguió remarcando sus pisadas.

—Lo suficiente.

—Harry quiere hablar, no sólo conmigo si no con ambos.

Eso llamo mi atención pero no me detendría por eso. — Hablaremos con Harry después de nuestros trabajos, en la Madriguera.

—¿A dónde se supone que vas? — me detuvo justo antes de entrar a la sala.

—A mi trabajo. —respondí obvia, intenté pasarlo pero de nuevo se negó.

—Claro, pero para ir a ese lugar estas más que dispuesta.

—Voy a mi trabajo. Y me estás haciendo llegar tarde. —esta vez pase a su lado chocando su hombro.

—¿Te vas a llevar a Maison?

—Por supuesto. — me pare justo enfrente de la chimenea.

—No puedo creer que hagas esto. Y que te niegues a lo que el Ministerio te ofrece.

—No necesito nada del Ministerio.

—Estas actuando como una adolescente.

—Bueno, me voy a trabajar.

—No te vas a llevar a mi hijo y tampoco vas a ir a trabajar hoy, es mi cumpleaños te lo recuerdo.

—¿Supongo que tú me lo vas a impedir? — eso pareció molestarlo aún más. — Ya te dije que no voy a volver a pisar el Ministerio.

—¡Eres una necia! — resoplo.

—Te veré en la Madriguera. Maison viene conmigo hoy.

—Ni se te ocurra irte, vendrás conmigo.. — no lo deje terminar.

—Feliz cumpleaños. — rechiste entre dientes, desapareciendo entre las llamas.

Y así entre pequeñas discusiones habían transcurrido los nueve meses.

-

La tan frecuente discusión o sea lo que haya sido me hizo llegar tarde. Caminaba con precaución y apuro a la vez, mientras que Maison sugetaba en sus manos uno de sus juguetes.

Encadenados [Ronald Weasley] EN EDICIÓN Donde viven las historias. Descúbrelo ahora