-Harry. Un nombre vulgar y horrible, si quieres mi opinión.
-Oh, sí-dijo el señor Dursley, con una espantosa sensación de
abatimiento-. Sí, estoy de acuerdo.
No dijo nada más sobre el tema, y subieron a acostarse. Mientras la señora
Dursley estaba en el cuarto de baño, el señor Dursley se acercó lentamente
hasta la ventana del dormitorio y escudriñó el jardín delantero. Los gatos aun
estaba allí. Miraba con atención hacia Privet Drive, como si estuviera
esperando algo.
¿Se estaba imaginando cosas? ¿O podría todo aquello tener algo que ver con los Potter? Si fuera así... si se descubría que ellos eran parientes de
unos... bueno, creía que no podría soportarlo.
Los Dursley se fueron a la cama. La señora Dursley se quedó dormida
rápidamente, pero el señor Dursley permaneció despierto, con todo aquello
dando vueltas por su mente. Su último y consolador pensamiento antes de
quedarse dormido fue que, aunque los Potter estuvieran implicados en los
sucesos, no había razón para que se acercaran a él y a la señora Dursley. Los
Potter sabían muy bien lo que él y Petunia pensaban de ellos y de los de su
clase... No veía cómo a él y a Petunia podrían mezclarlos en algo que tuviera
que ver (bostezó y se dio la vuelta)... No, no podría afectarlos a ellos...
¡Qué equivocado estaba!
El señor Dursley cayó en un sueño intranquilo, pero los gatos que estaban
sentados en la pared del jardín no mostraba señales de adormecerse.
Hasta que finamlemnte vio como los dos grises se fueron a paso veloz, y fue cuando lo vio, vio como los gatos, mientras corrían se transformaban en sus vecinos sheffield, no se llevaban tan mal con ellos, por que era mejor ser su amigo a su enemigo. Estaba
tan inmóvil como una estatua, con los ojos fijos, sin pestañear, en la esquina de
Privet Drive. Apenas tembló cuando se cerró la puertezuela de la casa de los sheffield enfrente de su calle, o cuando dos lechuzas volaron sobre su cabeza. La verdad es
que el gato no se movió hasta la medianoche.
Un hombre apareció en la esquina que el gato había estado observando, y
lo hizo tan súbita y silenciosamente que se podría pensar que había surgido de
la tierra. La cola del gato se agitó y sus ojos se entornaron.
En Privet Drive nunca se había visto un hombre así. Era alto, delgado y
muy anciano, a juzgar por su pelo y barba plateados, tan largos que podría
sujetarlos con el cinturón. Llevaba una túnica larga, una capa color púrpura que
barría el suelo y botas con tacón alto y hebillas. Sus ojos azules eran claros,
brillantes y centelleaban detrás de unas gafas de cristales de media luna. Tenía
una nariz muy larga y torcida, como si se la hubiera fracturado alguna vez. El
nombre de aquel hombre era Albus Dumbledore.Albus Dumbledore no parecía darse cuenta de que había llegado a una
calle en donde todo lo suyo, desde su nombre hasta sus botas, era mal
recibido. Estaba muy ocupado revolviendo en su capa, buscando algo, pero
pareció darse cuenta de que lo observaban porque, de pronto, miró al gato, que
todavía lo contemplaba con fijeza desde la otra punta de la calle. Por alguna
razón, ver al gato pareció divertirlo. Rió entre dientes y murmuró:
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(Tn) en hogwarts, 1T, la piedra filosofal
FanfictionQue pasaría si nuestro Harry potter se hubiera enamorado de una amiga de su primo? Que pasara cuando el se entere de que ella también pertenece al mundo mágico? Habrá un triángulo amoroso entre ella y algún otro amigo? ____(tn) rowena Sheffield, t...