Después de unos cuantos días, Soobin ya se encontraba listo para volver a sus clases.
Su celo había terminado asi que todo estaba bien... ¿No?... ¡Pues no!... Soobin estaba aterrado y nervioso, ya que temía encontrarse con su predestinado, o como ahora sabía que se llamaba, Yeonjun.
Y es que después del día donde Beomgyu fue a entregar sus trabajos, cuando este volvió, tanto Soobin como su lobo reconocieron el aroma que había logrado traer su amigo.
Su predestinado.
Siendo que casi de inmediato, el omega le cuestionó a su amigo el por qué cargaba con ese olor y con quien había estado.A esto, Beomgyu le contó su día y al final concluyeron que aquel chico con quien se había topado, Yeonjun, era el mismísimo predestinado de Soobin.
Cosa no hizo más que asustar al chico, pues en cierta parte de su historia, Beomgyu le dijo que todo había sucedido en la facultad de psicología por lo que supusieron que el alfa estudiaba dicha carrera o por lo menos tenía algunas clases ahí.
Siendo que esto no le agradaba a Soobin, pues él debía ir muy seguido a esa facultad para sus clases de psicología infantil y pedagogía, ya que el omega quería especializarse en educación inicial.
Así que sí, estaba aterrado.
No quería que su lobo se volviera loco y lo hiciera hacer algo que no quería.
—Soobin vamos, se me hace tarde... —dijo Beomgyu apresurado
El omega nombrado asintió, y se puso su mochila a la espalda, para después salir de su hogar junto a su mejor amigo.
Ambos se encaminaron a la universidad y en cierto tramo de su camino, se separaron, pues Beomgyu se iba a la facultad de música y Soobin a la de psicología.
El omega mayor comenzó a caminar con nervios mientras le decía a su lobo entre susurros que se calmara, pues desde hace rato lo sentía emocionado y esto no debía ser asi.
Y aunque su lobo, solo le gruñó como respuesta, para su suerte cuando llegó al aula que le tocaba, ningún olor a mango se le hizo presente, y eso lo alivió.
Así que ya más calmado y con un lobo decepcionado, se fue a sentar a cualquier lugar libre para despues abrir su cuaderno y esperar que las clases comiencen.
Siendo que cuando creía que todo estaría bien porque las clases ya estaban a nada de comenzar... Aquel olor se hizo presente.
—Lo siento licenciada... Debía llevar unos papeles al señor Kim... —dijo Yeonjun haciendo una ligera reverencia
—No te preocupes, adelante... Ve a sentarte
Yeonjun asintió y algo agitado por correr a su aula y asi no llegar tarde, se fue a sentar. Esto sin percatarse que se había sentado cerca de Soobin.
Y no fue hasta que el olor de fresas y jazmines, lo invadió por completo, que por fin se dio cuenta que la había fregado.
—Mierda... —murmuró
Por otro lado, Soobin quería levantarse e irse a otro sitio, pero la licenciada ya había comenzado su clase y los asientos ya estaban completamente ocupados, así que no le quedó de otra que quedarse ahí y aguantarse los insultos que le quería dar a su lobo por emocionarse por un desconocido.
Mientras que, en cambio, por su lado, Yeonjun solo podía maldecirse internamente a sí mismo, por escuchar a su lobo y hacerle caso de sentarse ahí, sin percatarse antes del olor a fresas y jazmines que sin darse cuenta se le habían quedado impregnados en la mente.
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Segunda Oportunidad | »»Yeonbin«« | »»Omegaverse««
DiversosCuando Soobin ingresó a esa cafetería, pensaba que solo comería un pequeño postre y luego iría a su departamento para llamar a su novio y hablar con él toda la tarde sobre como había ido su día. No esperaba que al ingresar se encontraría son su pre...