Habían pasado cuatro meses desde la operación de Beomgyu y dos semanas desde aquel Día del Padre, en el que Sunoo les había sorprendido a Soobin y Yeonjun con un adorable desayuno en la cama.
Durante estos cuatro meses, la vida de Beomgyu había sido un torbellino de emociones y cambios.
Primero que nada, ni bien había salido del hospital, tuvo que comenzar la terapia física, además de también continuar con su terapia psicológica.
Cosas que progresaron bastante bien, de hecho, al mes de iniciar con la rehabilitación física, su doctor encargado lo dio de alta, ya que al parecer sus músculos no estaban tan atrofiados por la falta de movimiento como en otros casos. Y con respecto a sus sesiones con la psicóloga, aunque aún permanecía yendo, la mujer le había dicho que estaba avanzando muy bien y que se notaba su cambio de enfoque en sus acciones.
Siendo que por ello, cuando Beomgyu le contó de su intención de irse a estudiar a otro país por un año, la mujer estuvo de acuerdo y lo alentó a cumplir sus metas.
Y asi fue, pues a los pocos días que le dieron el alta de la terapia física, Beomgyu fue a su universidad a averiguar que debía hacer para recuperar sus estudios, ya que el haber estado en coma por medio año lo había hecho perder su año académico y temía que no lo pudiese recuperar.
Por suerte, cuando llegó a su universidad, muy aparte de las palabras de admiración por haber despertado de un coma por parte de sus compañeros y profesores, también se llevó buenas noticias. Pues cuando recién todo había comenzado, Soobin había informado de su situación a la escuela de su facultad, la cual tomó la decisión de reservar su matrícula.
Tenían la esperanza de que despertara... Y si lo logró.
Aquello le facilitó mucho los trámites, y después de unos cuantos pagos y una que otra carta más que nada por mera formalidad, Beomgyu figuraba nuevamente como estudiante activo en los registros de su universidad.
Pero claro, eso no era todo lo que el omega quería.
Antes de pagar su matrícula para retomar el ciclo que había perdido, Beomgyu preguntó por intercambios a otros países y después de muchas vueltas le dijeron que podía postularse para irse a Canadá. Lugar que le encantó, así que sin querer demorarse más, comenzó el trámite.
La verdad, aquellos días fueron muy agotadores e incluso se puso a reflexionar del como Taehyun hace tres años pudo hacer todo tan fácilmente.
Aunque bueno, era irse o enfermar más rápido.
Como sea, después de unas dos semanas Beomgyu terminó de presentar todos los papeles que le solicitaban y a los pocos días le dieron la confirmación de su registro al intercambio.
Estaba más que feliz, si podría irse.
La alegría no cabía en el cuerpo de Beomgyu y ni bien procesó aquella noticia tan buena, quiso llamar a Soobin para contarle todo. Pero justo cuando estaba a punto de marcar a su mejor amigo, algo en su cerebro hizo click y recordó una cosa muy importante.
Soobin no sabía que el planeaba irse.
Ese día, Beomgyu regresó a su casa entre sentimientos de felicidad y de miedo, pensó varias formas de como decírselo, imaginó varios escenarios.
Para ese tiempo, Soobin prácticamente vivía con Yeonjun y Sunoo, y aunque aún tenía cierto recelo por Lea, apoyaba a Bahiyyih en el cuidado de Yeseo, su hija. Prácticamente ya ni se veían, y eso obviamente no le molestaba, entendía que su amigo estaba iniciando una nueva etapa y lo apoyaba.
Pero el que ya casi no pasaran tiempo juntos, le hacía un poco más complicado el querer contarle todo. Pues los pocos días en los que se la pasaban juntos, Beomgyu obviamente no quería malograrlos.
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Segunda Oportunidad | »»Yeonbin«« | »»Omegaverse««
RandomCuando Soobin ingresó a esa cafetería, pensaba que solo comería un pequeño postre y luego iría a su departamento para llamar a su novio y hablar con él toda la tarde sobre como había ido su día. No esperaba que al ingresar se encontraría son su pre...