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Capítulo 61

La noche estaba realmente oscura, o eso es lo que Soobin podía apreciar a través de la ventana que le brindaba una vista clara a la ciudad.

Ya era tarde por lo que no había vehículos andando, así que ver la moto de Taehyun o el auto de Minho llegar, sería algo muy sencillo.

Pero a pesar de que ya habían pasado veinte minutos, ninguno de los vehículos parecía querer aparecer.

—¿Nada?

Sonó a su atrás, la voz ligeramente quebrada de su mejor amigo.

—Nada...

—Y... ¿Y sí te envió u-un mensaje?

Soobin sacó su celular y en silencio lo desbloqueó, yendo rápidamente a revisar sus chats, pero para su desilusión no tenía ningún mensaje nuevo o algo que le indicara donde o que había pasado con Taehyun.

—Lo siento Beom... Aún no hay noticias...

La esperanza que había en Beomgyu se esfumó y la reemplazó la genuina decepción, misma que fue acompañada con el inicio de un fuerte llanto.

—No, no, no... No llores Beom...

Soobin se espantó y rápidamente se acercó a su mejor amigo para poder abrazarlo e intentar consolarlo.

—Tranquilo Beomie... Seguro ahorita Yeonjun hyung me va a escribir para decirme que todo está bien... —dijo buscando calmar a su pequeño amigo

Pero este, por lo contrario, solo lloró más.

—¿Y sí no?... ¿Qué p-pasa si él no está bien?

—Va a estar bien, no te preocupes... Ya verás que en cualquier momento van a llegar...

Soobin solo quería que Beomgyu dejara de llorar, pero este no parecía estar ni cerca de calmarse, ya que para ese punto la habitación estaba infestada de su aroma cargado de tristeza.

—T-todo es mi culpa... No debí r-rechazarlo...

—No, no, no... Beomgyu, tú no estabas, ni estas obligado a corresponderle... Beomgyu, él te hizo daño... Mucho daño... Y eso no es algo que puedas olvidar fácilmente... Es entendible que todo lo que te hizo te haya hecho dejar de sentir ese amor que le tenías antes... No es tu culpa... Nunca fue tu culpa...

Soobin tomó la mano de Beomgyu con una de las suyas mientras que con la otra le comenzó a acariciar el cabello buscando darle confort.

Cosa que creyó lograr hasta que el llanto de su pequeño amigo incrementó mucho más.

—P-pero mentí...

—¿Qué?

—M-mentí Soobin... Le mentí...

Beomgyu se tapó el rostro con su mano libre y en su mismo lugar se encogió un poco.

—¿En qué metiste Beom?

—Y-yo aún lo amo...

Soobin no supo que responder y aunque hubiese sabido, no hubiera tenido la oportunidad de decirlo pues en ese momento entró Han con dos cafés en la mano y una botella de agua en la otra.

—Ufff... Qué cargado está el ambiente... Perdón por la demora, es que había una gran fila y no avanzaba... —dijo Han con una sonrisa en el rostro hasta que vio como Beomgyu lloraba —... ¿Estas llorando?... Ay no, obvio que estas llorando...

Jisung se apresuró a dejar los cafés y la botella de agua en una mesita y rápidamente se acercó a los otros dos omegas.

—¿Qué pasó?... —preguntó mirando a Beomgyu, pero este no le respondió, así que levantó la mirada a Soobin —... ¿Qué pasó?