POV'S LILITH.
Baje y cuando llegué Tom tenía a una chica rubia sobre su regazo así que me aclaré la garganta, él le susurró algo y la chica se levantó, fue ahí cuando la identifiqué como Daphne, la hermana de Astoria.
-Según leí en el reglamento las muestras de afecto indecentes están prohibidas en la sala común –Comenté mientras caminábamos hacia el gran comedor.
-Cállate.
-Si tú lo haces yo también podría hacerlo.
-Cuando algún chico te tenga sobre su regazo lo voy a estrangular –Dijo mi hermano y yo solté la carcajada.
Justo antes de entrar vimos a Azael hablando con Melanie.
-¿Crees que regrese con ella? –Le pregunté a Tom.
-No estoy seguro, la ha estado ignorando pero ella siempre lo busca.
-Espero que no lo haga, Azael es mucho para ella.
-Supongo, él sabrá que hacer.
-¿Y si no?
-Se tiene que dar cuenta en algún punto.
Al día siguiente estaba un tanto nerviosa, Emily en ningún momento me dijo quién sería mi tutor y estaba algo ansiosa respecto a eso.
Las clases estuvieron relativamente normales y durante el castigo me sorprendió que Lavender estuviera callada, supongo que aún le afectaban las cosas que habían dicho de ella.
-Tu tutor te espera en el campo de entrenamiento a las cinco –Me dijo Emily y salió del salón.
Terminé mi castigo y al llegar a mi dormitorio note que no estaba ni Bella ni Astoria así que deje mis cosas y me cambie, me puse un pans gris y un croptop blanco, recogí mi cabello en una coleta alta y me puse mis tenis, al final agarre un termo con agua y me fui al campo de entrenamiento, cuando llegue aún no había nadie así que fui a sentarme a la sombra.
-Hola ¿tú eres Lilith?
-Sí soy yo –Respondí mientras me levantaba del suelo.
-Soy Cedric Diggory y seré tu tutor –Dijo mientras me extendía la mano.
-¿Diggory? Como Emily...
-Es mi hermana.
-Mucho gusto y gracias por ayudarme en esto –Contesté estrechando su mano.
-No te preocupes.
-¿Por qué tú serás mi tutor?
-Le debía un favor a mi hermana, además dijo que tú le ayudarías con matemáticas si te ayudaba.
-Lo supuse.
-Bien, antes que nada quiero decirte que soy un entrenador exigente.
-Claro.
Cedric fue muy directo y a decir verdad era buen tutor, comenzamos con un poco de calentamiento y seguido de eso él me puso algunos ejercicios que seguramente vendrían en mi prueba.
-Bueno es todo por hoy, aprendes rápido Lilith.
-Gracias.
-¿Te parece si te acompaño al castillo?
-Claro ¿Por qué no?
-¿Y de dónde eres?
-¿De dónde me veo?
-No lo sé, lo pregunto porque actúas un poco distinto a las demás chicas –Dijo y ambos reímos.
-Sí, soy mexicana.
