Capítulo 53 ✗ Ella no es una cazadora

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                           ++ A Y L I N ++
Voces y ruido logran despertarme. Adormilada abro los ojos, mi vista se aclara y veo hacía la puerta. Esta se mantiene cerrada sin embargo, puedo escuchar voces y pasos del otro lado.

Bostezo, tallo mis ojos y me volteo. Frunzo el ceño al ver la cama, de esta cuelgan cortinas de cada lado. Desvío la vista, la angustia me invade al no ver a Ana Liz a mi lado.

Enseguida me incorporo en la cama y la busco por toda la habitación sin ver rastro de ella o ese cuervo.

Me encuentro completamente sola.

Me siento extraña y muy desorientada.

Es raro ver el balcón abierto, la habitación es iluminada por ella. Observo la pared y el candelabro que Mía había colocado, no está más.

—Hija. —murmuro. Aparto las sábanas y bajo de la cama— Ana Liz.

Me dirijo descalza al balcón. Me estremezco en cada paso que doy. La habitación se siente demasiado fría.

Me asomo sin verla. La preocupación aumenta y me dirijo a esa pared. Hago exactamente lo mismo que hizo Ashley, esta se mueve. Me permite ver al interior sin embargo no hay rastro de Ana Liz.

—Hija —me volteo y observo la cama— ¿Dónde está? —me digo a mi misma.

Lo último que recuerdo es que después de lo ocurrido ayer, fuimos encerradas. No volvimos a ver a nadie más que a Ashley y solo para traernos de comer, trajo a Darki y se terminó marchando. Pasamos el resto del día solas, encerradas hasta que llegó la noche y el sueño nos venció a ambas.

Rápido me muevo. Me acerco a la cama y me coloco los tennis.

»Iré por ella. Buscaré a Ana Liz, la encontraré así tenga que buscar en cada rincón de este inmenso Castillo«

Tomo una profunda respiración antes de salir de la habitación. Tomo la perilla, la hago girar, esta accede y prosigo a salir. Me asomo sin ver a Ashley vigilando. Afuera está despejado y fácil puedo salir sin ser vista.

Cierro la puerta lo más silenciosa que puedo y empiezo a caminar por el pasillo. Me abrazo a mi misma, veo alrededor alerta. Es raro no ver a ninguno vampiro cerca, a algunos de ellos.

»Sinceramente, al último que quiero ver es a Darren«

Los pasillos son fríos, desolados. Poca iluminación entra aunque aseguro que ya es de día.

Bajo los últimos escalones, observo a ambos lados del pasillo y doy vuelta a la izquierda.

De pronto, me detengo al escuchar voces cerca. Rápido me oculto, retrocedo y me escondo en la pared.

—No puedes hacer eso. Ellos no lo permitiran.

Curiosa me asomo, cuido de no ser vista. Abro los ojos impactada al ver a Victoria a una distancia de mi. Ella sin verme. Se ve diferente, su cabello está sujetado, caen dos mechones ondulados por su rostro y lleva un vestido ampon, lo demasiado antiguo.

✗VÍNCULOS DE SANGRE✗ © [SVD #2] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora