Capítulo 65.

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Holaaa, antes que nada pedir disculpas por:

1. Tardar tantísimo en actualizar

2. Apenas responder comentarios del otro capítulo

De verdad, I'm sorry por ser un desastre de persona, yo prometo que os quiero, pero el tiempo y yo no nos llevamos muy bien 😔

Y dicho eso, espero que disfrutéis de este capítulo... si es que podéis 😅

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-Dos noches antes-

La noche se le estaba haciendo especialmente larga y las muchas botellas de cerveza que se había tomado para sobrellevarla solo la había hecho ligeramente más amena, aunque no lo suficiente. Caminaba por de aquí para allá, charlando con unos y con otros, pero nunca había destacado por ser un hombre muy sociable y ya estaba cansado, así que se apartó lo más lejos posible para poder descansar un poco.

No le apetecía estar ahí, pero irse a casa sonaba incluso peor, así que se obligó a permanecer en el club hasta no poder seguir de pie.

Joder, era humillante de admitir, pero a sus largos treinta y seis años temía quedarse a solas con sus pensamientos, pues en el silencio de su apartamento estos viraban incontrolablemente hacia He Cheng y todo lo que había ocurrido recientemente... y era un auténtico suplicio.

Sabía que en algún punto de su vida ese dolor lacerante que punzaba en su pecho cada vez que recordaba su último beso con el alfa desaparecería, o al menos así esperaba que fuera.

Intentó no tomarte demasiada importancia. Bastante tenía con atormentarse en casa como para hacerlo ahora fuera de ella, y como si Dios le hubiera escuchado, apareció por su flanco derecho una despampanante mujer, dispuesta a hacerle olvidar por un rato todos sus males. Se acercó a él contoneando las caderas y dejando ver sus muslos redondos bajo la tela de la falda.

Era beta, no podía olerlo pero estaba seguro de ello. No era muy usual ver a ese tipo de clientes, por lo general el club era frecuentado por hombres, especialmente alfas, aunque la entrada no estaba prohibida para nadie y de vez en cuando aparecían betas u omegas en busca de diversión. Justo como ahora.

No había tenido intenciones de llevarse a nadie a casa esa noche, pero quizás eso era lo que necesitaba para dejar su mente en blanco.

- Llevas toda la noche de aquí para allá, por fin te pillo solo.

Qiu no tenía demasiadas ganas de responder, desde que su relación con Cheng se fue a la mierda había descubierto que los preliminares antes de poder meter a alguien en la cama eran jodidamente tediosos... con el He eran un aliciente para hacer crecer su excitación, pero con las mujeres que habían ido después de él era desesperante.

- ¿Debería llamar a la policía por acoso? – pese a su estado anímico de mierda, su lengua sagaz seguía funcionando. Una pícara sonrisa se dibujó en su rostro, no la sentía realmente, pero igual así dejaba claras las intenciones y podían ahorrarse tiempo.

La mujer rio divertida y con total confianza respondió.

- Preferiría que no, pero depende de cómo quieres que termine la noche.

Directa al grano. Bien, justo lo que necesitaba en ese momento.

- Depende entonces de lo que se me prometa. Tendría que valorar opciones...

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