El León Ruso.

Capitulo 5.

Amber

Me remuevo incómoda tratando de escapar del agarre fuerte de mi cintura.

¡Mierda pareciera como si una trituradora me hubiera pasado por encima!
Los recuerdos de anoche llegan a mi mente, no me paso una trituradora pero si un Ruso muy caliente y salvaje, no puedo creer todas las cosas que hicimos anoche.

Me levanto de la cama saliendo suavemente de el agarre del Ruso, quien lo veía tan tranquilo durmiendo y es una verdadera fiera.

He tenido varios encuentros sexuales en mi vida, no soy ninguna santa, mi primera vez fue a los 15 y fue una experiencia horrible, Martín mi noviecito de ese entonces también era virgen, así que solo éramos dos niños queriendo experimentar.

Ya después las cosas fueron cambiando, tuve algunos encuentros con dos o tres hombres más nada de otro mundo, mejor dicho nada como la noche con este maldito Ruso.

Busco mi vestido, mi ropa interior y mi mochila que quedaron tiradas por algún lugar de la habitación, rompo el elástico de mi bragas y me armo una coleta tirando el resto a la basura , ese ruso sí que es salvaje mira como las dejo eran mi favoritas.

Pienso en dejar mi número o una nota pero descarto la idea, solo fue una noche Amber una loca y apasionada noche, esto tipos de hombres no son para enamorarse, mejor es irme antes que se levante y me termine echando.

Salgo del hotel por la puerta trasera tratando de saltearme me las cámaras creo que lo logre ya que nadie me está siguiendo.

Tengo que comunicarme con Paula después de entregarle el botín, no volví a tener contacto con ella.

Busco en mi mochila mis pertenencias personales y me percato que tengo bastante para tomarme un taxi.

Tengo que tomar las pastillas del día después, ese maldito Ruso estaba tan caliente que se olvidó del maldito cordón, como si tu te acordarás de decirle en ese momento me dice mi conciencia.

Paro el primer taxi que pasa, le indicó a el chófer mi dirección, cierro mis ojos y recuesto mi cabeza en el asiento del taxi, tengo que avisarle a Paula que pude salir sin problemas del hotel.

Me siento extraña como angustiada por algo desde que me levanté, no quiero ser supersticiosa pero no se por que presiento como si algo cambiara o está punto de cambiar.

Cuando el chófer me dice que llegamos abrí mis ojos encontrándome con algo muy extraños.

¡Mierda! Unas cuántas patrullas afuera de mi casa ¿será que el Ruso me denunció? Pero si no sabe ni mi dirección ni mi nombre ¿será que me mandó a seguir? bajo del taxi asustada y alerta, un oficial está hablando con mi vecina Mimí, cuando esta me mira y me da una mirada que no puedo identificar.

—Oh Amber querida llegaste, yo la verdad lo siento mucho .—dice Mimí con pena.

—¿De qué está hablando Mimí.?—pregunto alterada.

—Que no lo sabes, tú hermano él...

No la dejo terminar de hablar, porque entro corriendo a mi casa encontrándome con la escena más dolorosa de mi vida.

¡Mi hermano! no no esto no puede ser, mi hermano mi compañero de mi vida, está tirado en el suelo de la sala lleno de sangre con sus ojitos  que no me dejan acercarme, me agacho hasta él tocando su rostro manchado mis manos de su sangre.

—Luciano, Lu abre los ojos hermanito no me hagas esto por favor ¿que voy hacer yo sin ti? ¿Quién me va enseñar como defenderme? ¿O a regañar cuando me pongo en peligro?—suplicó con mis ojos lleno de lágrimas.

—Señorita por favor necesitamos llevarnos el cuerpo —me dice un oficial.

—¿QUE PASO? ¿DÓNDE ESTÁN MI MADRE Y MI HERMANA? ¿QUE MIERDA PASO AQUÍ?—Grito desesperada.

—Amber hija —escucho la voz de mi madre saliendo de una de las habitaciones.

—¿Que paso mamita? ¿cómo pasó esto?¿quién fue?-pregunto llena de lágrimas.

—No lo se mi vida, estuve trabajando turno noche, Paiper quedo con la vecina vine corriendo cuando recibí la llamada, alguien entró a noche y le disparó me lo mataron maratón a mí niño—solo le agradezco a dios por que tu no estabas aquí mi niña ¿ que voy hacer yo ahora sin mi Luciano?— pregunta mientras se derrumba.

Siento un vacío en el pecho mientras abrazó a mi madre fuerte y lloramos con el corazón roto por la partida de mi hermano.

Nunca pensé que mi vida iba a cambiar tan drásticamente, que mi hermano iba a morir y yo me salvaría por pasar la noche fuera de mi casa.

Se que los maldito de los Ferreti hicieron esto ello mandaron a matar a mi hermano, ya que él estaba trabajando con la policía para encerrar a esa lacra, él solo quería salvarme por eso arregló con la policía para trabajar como infiltrado y que me dieran la liberación antes de tiempo, él como siempre cuidándome.

Jure vengarme estaba dispuesta a todo contar de matar a esa escoria, hasta que unos mese después de la muerte de mi hermano termine en emergencia por un estupido desmayo, ya que no comía mucho y no dormía bien, solo me la pasaba investigando todo para acercarme a la organización que mató a Luciano.

—Tiene que cuidarse el estrés y la mala alimentación está afectando su embarazo —Dice el doctor dejándome en shocks.

—¿QUÉ DIJO?—pregunto sorprendida .—yo no puedo...

—Esta embarazada señorita Molina, para hacer más específico usted tiene 12 semanas de embarazo —¡Ese maldito día! recuerdo, mi encuentro con el Ruso tenía que haberme tomado la maldita pastilla, la cual no tome por estar organizando el sepelio de querido hermano, pienso.

Esa noche perdí a una de las personas mas importante de mi vida, pero Dios me mandó un pequeño Ángel para que me acompañe y me devuelva las ganas de vivir.