Luka Novanov Líder de la mafia Rusa , un hombre que es frío como el hielo que solo se peocupa por su familia o las personas que considera como tal.
Amber Molina una mujer con cara de ángel y personalidad de demonio no te deje engañar por su cara de...
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Amber.
Dios está mujer va volverme completamente loca, hace más de media hora que no para de hablar y mostrarme revistas con todo el último grito de la moda según ella, mi hermana a intentado escaparse de esto pero la tal Fany no la ha dejado alegando que como hermana y dama de honor tiene que apoyarme y estar al tanto de todo los detalles de la boda.
No se de donde ha sacado está mujer Luka y ni quiero imaginarme que me trajo una de su ex amantes para ayudarme, sabe que eso sería tentar al diablo, ya cansada de tanta información doy un fuerte suspiro.
—Mira Fany ¿cierto?—ella me mira y asiente con la cabeza —te agradezco todos tus consejos y esas cosas pero yo no quiero nada ostentoso, no soy de esas mujeres, además no es que sea una boda por…
—Fany Franci lo sabe todo mamacita, por eso es que ese día tiene que ser una verdadera bomba, no se si sabes pero te vas a casar con el maldito rey de la selva y las hienas van a estar atentas y muchas de ellas mezclada entre los invitados ahí que demostrarles quien va ser la Leona Novanova sobre todo a la maldita de la insípida de Olenka Petrova—me interrumpe— eres una de las mujeres más envidiadas de Rusia no tienes por qué menospreciarte ahí un dicho que dice como te ven te tratan y si te ven mal te maltratan, en la mafia las cosas son algo parecidas, tú tienes que demostrarle que ha venido a ocupar el lugar de la Reina no el de una esposa trofeo por eso vamos a organizar la mejor boda de toda maldita Rusia.
—Ella tiene razón— apoya mi hermana.
Doy un fuerte suspiro tomó una de las revistas y me pongo a revisar ,la morena tiene razón .
—¿De donde conoces a los Novanov?¿eras la novia de Yerik?— pregunto recordando cómo la encontré con el ruso menor, llamando la atención de mi hermana que se acerca más ya que estaba bastante alejada para escuchar la respuesta.
—¡Que dios me libre y me guardé!—responde—Solo somos amigos por así decirlo, gracias a ellos sigo con vida— la miro sin entender— puede que sean unos malditos pero en este mundo ahí peores personas que ellos y yo tuve la desgracia de encontrarme con ellos, hasta que aparecieron los Novanov y de una forma me salvaron— Se queda pensativa como recordando algo doloroso—Pero Bueno basta de cosas triste, solo tenemos dos semanas, llegó la hora de salir de compras y se me acaba de ocurrir una brillante idea.
La idea de Fany es una completa locura que hará que Luka ponga el grito en el cielo, pero eso anima un poco a mi hermana que está muy callada así que yo terminó aceptando, no quiero hostigar a Paiper preguntando qué le sucede por que tengo una leve sospecha pero tengo que hablar con Luka necesitó su ayuda en ese asunto.
Se viene un cambio grande en mi vida y este maldito anillo que tengo en mi mano solo es un recuerdo de eso, estoy apunto de convertirme oficialmente en la mujer de el León Ruso y no se si eso me asusta o me excita.
Luka.
Dos semanas han pasado tan rápido que todavía no puedo creer que esté esperando a mi futura mujer enfrente del altar.
Han pasado muchas cosas desde que mi casamiento fuera anunciado en la prensa como uno de los gran evento del año , una de ellas fue tener que expulsar a Olenka Petrova de mi oficina la cual llegó a los gritos como toda una maniática.
Ella y su familia son un verdadero dolor de cabeza el cuál ya me estoy encargando lentamente.
De el maldito de Sokolov no se sabe nada, pero hace una semana he mandado a Yerik a hacer tratos con los chinos los cuales pueden ser unos aliados muy importante contra el maldito, mi hermano no se fue muy contento que digamos pero sabía que teníamos qué poner a los asiáticos de nuestra parte antes que el enemigo.
Ya el primer día de la llegada de Fátima me había arrepentido de haberla llamado, la muy maldita loca se llevó a mi mujer y a su hermana A Francia para comprar el maldito vestido de boda sin consultarme, al llegar a la mansión me puse como un loco si no fuera que por lo menos tomo precauciones hubiera matado a esa lunatica, prácticamente estuve una semana sin mí mujer y parecía un maldito demente.
—¡Siempre queriéndome ganar en todo maldito Ruso!—comenta Sarcástico Alessandro y no puedo evitar que mí sonrisa se agrande.
—Corrección siempre te gano en todo— respondo con burla.
—Ya quisiera, espero que este maldito lugar esté resguardado bien no quiero exponer a mí mujer e hijo— advierte.
—Mira quien le dice al que se le escapó en sus narices— respondo con burla.
—Por lo menos no me vio la cara por años— maldito italiano.
—Pueden dejar de pelear ustedes dos _Se queja Grecco— Mira que por un momento pensé que terminarían casándose entre ustedes.
—¡Yo también pensé eso!—apoya Yerik el cual acaba de ingresar en la iglesia mientras se termina de acomodar la corbata— ¡por un momento pensé que no llegaría!— suspira.
—Mira que ni había notado tu ausencia ¿que tal china?— pregunta Donato.
—Grecco es que tu diablita te tiene tan cortito que apena puedes notar tu nariz —Se burla mi hermano y es inevitable no reírse de eso por que es verdad, quien diría que un Don Juan como Grecco cambiaría tanto por una mujer —Ya saben comí mucho arroz y sushi pero todo ha salido bien.
—Mis amores platónicos llegó la hora, la novia y sus damas ya están aquí a su lugares Bomboncitos— grita la Loca de Fátima y siento cómo mi pulso se acelera nunca creí que me pondría tan nervioso por está mierda, pero parezco un puto adolescente en su baile de graduación.
Las personas empiezan a tomar su lugar, y yo sólo miro hacia la puerta a la espera de su ingreso.
