El León Ruso.

Capitulo 91.

Luka. 

Mí padre era el maldito rey de el engaño, nadie pensaba que detrás de ese señor educado y hasta generoso se escondía uno de los delincuentes más peligroso del mundo, sus enemigos lo subestimaron tantas veces que por eso ellos siempre terminaron muertos por su propias manos en cambio a él solo lo puedo terminar una maldita enfermedad. 

Tengo que admitir que no estaba muy de acuerdo con esos malditos hologramas 6D y esa mierda, si hubiera sido por mí hubiera entrado a rescatar a mí mujer sin armar tanto circo, ponerle una bala en la cabeza al maldito de Sokolov y cortarle las pelotas al cobarde de Lennox, después ordenar que sus cuerpos sean esparcido por toda Rusia, para que le quede claro a todos lo que se quieran igualar a mí quién es el maldito León ruso jefe de la mafia Roja. 

Pero siempre me capté por ser una persona fría y calculadora, no podía dejar que los impulsos terminen destruyendo todo y sobre todo exponer a mí mujer un minuto más. 

Era obvio que mucho tiempo no lo podíamos tener engañados con la tecnología por eso mí mujer y yo tenemos que pelear y disparar contra la gente de Sokolov que ha ingresado para impedir nuestro escape. 

Salimos por un pasillo que es el mismo que nos trajo el imbécil de Petrov al cual engañamos gracias a la ayuda de su hermana, la muy maldita intento escapar de Rusia pero mis hombres la interceptaron y después de torturarla pudimos lograr que se comunique con su hermano el cual calló en nuestra trampa como el pelele que es, no acabe con mis propias manos con esa arpía por qué le quise dejar el honor de eso a mí mujer. 

Veo como mí mujer saca su arma y le dispara a uno de los hombres de Sokolov directo en la cabeza mientras yo peleó con puño y garras contra dos, mí instinto de matar salé al floté suelto mí arma y con la fuerza de mis brazos le rompo el cuello al más grande para luego darle una patada al otro que cae cerca de mí mujer la que clava un puñal en su yugular el cual no tengo la menor idea de dónde lo saco.  

La sangre deja el lugar echo un asco pero creo que yo me siento excitado por toda la adrenalina y sin hacerle asco a nada me acerco a ella y la beso, tomo su cabeza devorando sus labios mí lengua explora toda su boca y cuando las cosas empiezan a salirse de control nuestro beso es interrumpido por los ruidos, está mujer cada vez me vuelve más loco.  

—Primero terminemos con esto rusito y luego arreglemos nuestro asunto como dios manda—me guiña un ojo y me aprieta la polla y como si nada se vuelve ah poner nuevamente en alerta. 

Dicen que las leonas son las mejores cazadoras de el Reino animal, acabo de comprobar que eso es verdad veo luchar a Amber con garras, inteligencia y sobre toda astucias y ah pesar que varios de nuestros hombres se nos unieron haciendo la pelea un poco más parejas ninguno tiene la habilidad de mí mujer. 

—Señor dicen que Sokalov quiere escapar por el lado sur de las bodegas — me informa uno de los hombres y era evidente que el maldito iba huir como la rata que es. 

—Vamos mí Leona ahí una maldita Rata que casar, quiero que acaben con toda esta plaga y los que queden vivos tengan la lección que se merecen antes de mandarlos al infierno, ah Gael Lennox lo quiero vivo quiero acabar con el con mis propias manos—ordenó antes de ir por Mijail Sokolov de esta no salé con vida. 

Juntos salimos a acabar con esta guerra de una buena vez, ahí dos forma de salir de aquí y no pienso perder el León nunca pierde.