33. Lo arruinaste...

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Llegué a mi habitación para cerrarla con llave. Fui a mi escritorio, tome un pergamino y pluma. Me senté y comencé a escribir:


Michael:


¡Eres un maldito! ¡Dijiste que no podría pasar nada! Ahora Sirius esta en casa, su madre lo persiguió hasta aquí. Al parecer no aguanto un día mas allí y se escapo. Por suerte estamos todos bien ¡Pero ahora puede pasar! ¡Eres un maldito mentiroso mala suerte! Pero te adoro igual, azulito :3 Solo no te atrevas a decir que no pasará nada porque haré que Misch te picotee. Te lo advierto. Espero estés bien y respondas rápido.


____ P.


Enrolle el pergamino y lo até a la pata de Misch. Abrí la ventana y la solté mientras veía como se alejaba solté un suspiro. Me tiré a la cama y solté un gritó ahogado. Para volver a levantarme, volver al escritorio y tomar nuevamente pergamino y pluma. Escribí una carta a Barb explicando la situación en la que me encontraba. Luego, cuando Misch vuelva le enviaré la carta. Escuché como tocaban la puerta. Demonios.


____: ¿Quien? - pregunté cubriendo mi cara con la almohada.


James: El cartero - dijo con sarcasmo. Soy yo, hermanita... ¿Quién mas sería? - dijo del otro lado de la puerta yo rodé los ojos. Y me levante a abrir la puerta.


____: ¿Qué se te ofrece, Jimmy? - pregunté abriendo la puerta. James entro tranquilamente, haciéndome a un lado. Como si fuera su propia habitación. Como normalmente hace.


Jimmy: Oh, pues nada... Solo lo de siempre... - dijo sentándose en mi cama - Oye, hermanita ¿Te incomoda que Canuto este aquí? - preguntó mirándome fijamente. Yo lo miré de reojo por unos segundos.


____: Bueno, no mucho. Pero no es que me incomode... es extraño... - dije encogiéndome de hombros. Maldita mentirosa.


James: Oh, de acuerdo... - dijo no muy convencido de mi respuesta. Con toda la razón del mundo - Pero si te molesta, lo saco a patadas a la casa de Peter o Remus... por mi no hay problema en hacerlo... Digo, porque si la demente de su madre vuelve y te hace daño nuevamente... - dijo apretando los puños. Yo suspire y le di un beso en la mejilla.


____: Tranquilo, Jimmy... no pasará nada - dije con tono suave. Él suspiro y me abrazó con fuerza -. Ademas, no es como que no sepa defenderme...


James: Calla, no quiero escuchar esas cosas... - dijo apretándome mas.


* * *

Pasaron los días y de a poco me fui "acostumbrando" a la presencia de Canuto en la casa, y con "acostumbrando" me refiero a que encontré la forma de evitarlo lo mas posible, evitando que estemos solos. Siempre buscando la compañía de James o mis padres. A los que James puso al tanto de la regla por alguna razón desconocida y probablemente incoherente. Lo divertido de eso fue el berrinche de niño pequeño que Sirius hizo cuando James le dijo a mis padres sobre la regla. Y bueno... así estábamos, yo viviendo feliz estando el mayor tiempo posible cerca de James y mis padres, evitando a toda costa quedarme sola con Canuto. Mientras que por otro lado... Sirius al parecer, buscaba todo tipo de excusas para quedarse a solas conmigo. Mandaba a James a buscar algo (y yo lo solucionaba acompañando a James) o cosas como esas...

Pensando en Voz Alta (Primera generación)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora